La historia de una musa perdida y una enamorada desesperada…
La castaña corría de un lugar a otro en los pocos metros que cubrían su habitación, preparando la comida, buscando su mejor vestido, removiendo el neceser donde guardaba su maquillaje, después al baño donde el agua tibia ya la esperaba.
- ¡Ves las carreras que me toca dar ahora por tu culpa! ¿A ver donde andabas metida? ¿Acaso se te olvido que este mes era el cumpleaños de Terry? ¡DE Terry! Bonita hora a la que te apareces, ahora me toca desvelarme por tu culpa para poder tener todo a tiempo… - Decía o más bien gritaba a su pobre musa mientras se enjabonada con su gel de baño favorito Pure Seduction de Victoria´s Secret, por lo general este aroma la relajaba, pero hoy parecía no tener ese efecto, pues no hacía más que gruñir.
- Ya cálmate Natasha Grandchester o terminaras cayéndote y entonces ni regalos, ni fiestas, ni nada… necesitaba vacaciones, tal vez no conozcas esa palabra… ¡V-A-C-A-C-I-O-N-E-S! Se suponía que las tendríamos en diciembre y no vi un solo día… me tuviste igual trabajando todo el tiempo, cuando no eran los fics, era viendo películas, o con la casa o con tus compromisos pendientes en el trabajo… la verdad solo vine porque me apiade de ti y porque me dieron estos dos días de reposo, sino no me encuentras ni con las bolas de cristal del señor de los anillos ¡Bien! – Se defendió el ente incorpóreo que se hallaba cómodamente tendido en el sofá, mientras molestaba al hijo de Tattys, léase su gato siamés.
- ¿Entonces pretendías abandonarme en una fecha tan especial? – Pregunto la chica saliendo del baño, con los ojos ahogados en lágrimas.
- ¡No! Pero debía darte una lección… y ahora apúrate que debes escribir muchísimo, estas súper atrasada – Le ordeno moviendo sus manos.
- Tendré yo la culpa… es que ahora me toca a mí trabajar como burra por su culpa, pero ya vera… no la soltare hasta que no me dé mínimo cinco regalos para Terry, aún quedan días de enero y… hablando de días de enero ¿Y si le hago un video? – Se preguntó en voz baja.
- ¡Con Shakira no! Ya sabes que Tattys no la soporta y además ya bastante sonada esta con eso del pequeño Milan… me pregunto ¿Si llega a tener una hija, le pondrá Roma? – Inquirió dejando libre una carcajada.
- Eres malvada, eres la parte más mala que tengo y siempre me culpan de lo que tú haces… - Decía cuando la musa la interrumpió.
- Ya no hables tanto y siéntate que tenemos mucho trabajo… y por lo de mala aun no has visto la mejor parte… este año les daré una sorpresita encargo de su hermoso Terry, es que el pobre necesitaba que alguien lo defendiera o de plano ya parece el alce ese que salió en Blancanieves y el cazador, si tú andas con dolores de espalda, no quiero ni imaginar los que tendrá que soportar él por su culpa, cuerdas de coscolinas…
- ¿A qué te refieres? ¿Qué harás? – Pregunto la morena mirándola con cautela.
- ¿Yo? No querida lo harás tú – Contesto con una risita siniestra.
Después de cuatro horas Natasha estaba exhausta, era la una de la mañana debía, trabajar a las siete y no había dormido, apenas se había levantado de la silla, sus dedos un poco más y botaban humo, pero había logrado sacarle a la musa unas 10 postales que ambientarían uno de los episodios que tendrían lugar en la fiesta de cumpleaños de Terry celebrada por la Mafia Grandchester… había adelantado el epilogo de Eres mío… y hasta tenía un vídeo listo para publicarlo justo a la medianoche, solo que la bonita musa no se le dio por ponérsela fácil y solo le dio la idea faltando 15 minutos para las doce…
Pero lo mejor de todo era que estaba listo y la sonrisa en los labios de la chica demostraban que había quedado contenta con el resultado, ahora si se preparó para estar lo más hermosa posible, solo para él… salió disparada al foro rosa para buscar al festejado y hacerle entrega oficial de su primer regalo de cumpleaños del 2013!!!
- ¡Terry! ¡Terry amor mío! ¿Dónde estás? – La chica lo llamaba mirando a cada rincón del lugar, se acercó al balcón y lo vio acercarse cabalgado a su fiel Teodora. Por cierto ella también debía tener un pacto o algo, así como Klint y Puppeé… porque ya tenían más años vivos que cualquier otro animal en el mundo – Pensaba la chica con una sonrisa.
- ¿Me estabas buscando preciosa? – Inquirió el castaño con el mismo gesto de ella.
- ¡Por supuesto! ¿Acaso te has olvidado que día es hoy? – Contesto con una pregunta.
- No… no lo he olvidado, enseguida subo, espérame – Pidió mirándola a los ojos.
- No tienes ni que decirlo, ya sabes que no iría a ningún lado… y que esperaría toda la vida – Menciono de manera coqueta y le lanzo un beso.
Terry lo atrapo con la mano y se lo llevo al pecho, después de eso se alejó montaba sobre la yegua para llevarla hasta el establo. Natasha se volvió acomodando todo, para que él disfrutase de su regalo, movió el diván, los cojines, al fin escucho los pasos de Terry al otro lado de la puerta, cuando la figura del chico apareció bajo el umbral corrió hasta él rodeándole el cuello con los brazos y dejándole caer una lluvia de besos en el rostro.
- ¡Feliz cumpleaños! ¡Feliz cumpleaños! ¡Feliz cumpleaños! – Repetía al tiempo que repartía besos y en medio de la risa de ambos.
- ¿Me vas a dar uno por cada año que cumplo? – Pregunto con picardía.
- ¡No! Son muy pocos para todos los que quiero darte… pero mejor ven, tengo algo que entregarte, toma asiento y ponte cómodo – Le indico encendiendo el televisor.
- ¿Un video? ¡Qué bien! Me encantan tus videos… bueno veamos – Dijo rodeando los hombros de Natasha con su brazo.
Después de nueve minutos y medio, él se volvió para mirarla y sus ojos brillaban, bueno casi tanto como los de la chica quien estaba a la expectativa, se acercó a ella y rozo su nariz con la de la chica, mientras con la otra mano le acariciaba la mejilla, ella dejo libre un suspiro y cerró los ojos.
- ¿Te gusto? – Lo interrogo en un susurro.
- Si… mucho, cada una de las canciones parecen que las hubiesen escrito para mí, sobre todo la segunda, sabes que es lo que siento y como lo expreso, no hay necesidad de desgarrarte las vestiduras y gritarles a todos que la vida te está tratando de la patada cuando lo hace, simplemente lo aguantas, respirar, recoges los pedazos los unes, te levantas y tomas tu camino una vez más… has llegado a conocerme muy bien Natasha… te agradezco las palabras del primero, y la mirada ya no existe, es imposible rodeado de tanto amor… solo tengo dos quejas… - Menciono mirándola a los ojos.
- ¿Quejas? ¿Cuáles? ¿Qué imagen no te gusto? ¿O fue la última canción? – Pregunto alarmada.
- Tranquila, todo eso está bien, la canción es hermosa y me siento halagado que pienses así de mí, solo que tres palabras que reflejan algo que no es cierto… “Casi todo” “Casi nada” “La nube que no quieres ver” – Explico tomando el rostro de la chica entre sus manos. – Tú eres todo… todo Natasha y yo deseo ser lo mismo para ti, no me gusta los medios tonos, eso lo sabes, así que si me das todos, tendrás todo de mi… es un intercambio justo ¿No lo crees? – Inquirió y ella asintió en silencio, no podía hablar sus ojos la tenían atrapada – Perfecto y lo otro… Si no puedo quitar los ojos de ti cuando te tengo enfrente ¿Cómo puedes pensar lo contrario? Ya sé que bueno… son muchas chicas y todas son maravillosas, que todas tienen un lugar especial en mi corazón, sería un malagradecido si no fuese así… esto puede sonar increíble o cínico, pero a todas las amo y deseo hacerlas felices… tú eres la nube que siempre, siempre voy a querer ver, todos los días de esta vida, mientras el mundo gire – Expreso acariciando las mejillas de ella con los pulgares, para secar las lágrimas que bajaban por estas.
- ¡Terry! – Esbozo emocionada y lo abrazo, después en un acto de osadía, se aproximó y le dio un suave beso en los labios – Eres tan hermoso… tanto… gracias por ser así – Agrego perdiéndose en los ojos más hermosos que hubiese visto en su vida.
- Gracias a ti por el amor que me entregas… - Susurro pegando su frente a la de ella.
La envolvió entre sus brazos y esta vez fue él quien busco los labios de la chica para darle un beso, no suave y casto como ese que ella le había obsequiado, como bien dijo, no era un hombre de medias tintas, así que le dio un beso a la morena, un beso como debía ser, de esos que hacen temblar hasta la fibra más pequeña del cuerpo y elevaban al cielo.
- ¡Ves las carreras que me toca dar ahora por tu culpa! ¿A ver donde andabas metida? ¿Acaso se te olvido que este mes era el cumpleaños de Terry? ¡DE Terry! Bonita hora a la que te apareces, ahora me toca desvelarme por tu culpa para poder tener todo a tiempo… - Decía o más bien gritaba a su pobre musa mientras se enjabonada con su gel de baño favorito Pure Seduction de Victoria´s Secret, por lo general este aroma la relajaba, pero hoy parecía no tener ese efecto, pues no hacía más que gruñir.
- Ya cálmate Natasha Grandchester o terminaras cayéndote y entonces ni regalos, ni fiestas, ni nada… necesitaba vacaciones, tal vez no conozcas esa palabra… ¡V-A-C-A-C-I-O-N-E-S! Se suponía que las tendríamos en diciembre y no vi un solo día… me tuviste igual trabajando todo el tiempo, cuando no eran los fics, era viendo películas, o con la casa o con tus compromisos pendientes en el trabajo… la verdad solo vine porque me apiade de ti y porque me dieron estos dos días de reposo, sino no me encuentras ni con las bolas de cristal del señor de los anillos ¡Bien! – Se defendió el ente incorpóreo que se hallaba cómodamente tendido en el sofá, mientras molestaba al hijo de Tattys, léase su gato siamés.
- ¿Entonces pretendías abandonarme en una fecha tan especial? – Pregunto la chica saliendo del baño, con los ojos ahogados en lágrimas.
- ¡No! Pero debía darte una lección… y ahora apúrate que debes escribir muchísimo, estas súper atrasada – Le ordeno moviendo sus manos.
- Tendré yo la culpa… es que ahora me toca a mí trabajar como burra por su culpa, pero ya vera… no la soltare hasta que no me dé mínimo cinco regalos para Terry, aún quedan días de enero y… hablando de días de enero ¿Y si le hago un video? – Se preguntó en voz baja.
- ¡Con Shakira no! Ya sabes que Tattys no la soporta y además ya bastante sonada esta con eso del pequeño Milan… me pregunto ¿Si llega a tener una hija, le pondrá Roma? – Inquirió dejando libre una carcajada.
- Eres malvada, eres la parte más mala que tengo y siempre me culpan de lo que tú haces… - Decía cuando la musa la interrumpió.
- Ya no hables tanto y siéntate que tenemos mucho trabajo… y por lo de mala aun no has visto la mejor parte… este año les daré una sorpresita encargo de su hermoso Terry, es que el pobre necesitaba que alguien lo defendiera o de plano ya parece el alce ese que salió en Blancanieves y el cazador, si tú andas con dolores de espalda, no quiero ni imaginar los que tendrá que soportar él por su culpa, cuerdas de coscolinas…
- ¿A qué te refieres? ¿Qué harás? – Pregunto la morena mirándola con cautela.
- ¿Yo? No querida lo harás tú – Contesto con una risita siniestra.
Después de cuatro horas Natasha estaba exhausta, era la una de la mañana debía, trabajar a las siete y no había dormido, apenas se había levantado de la silla, sus dedos un poco más y botaban humo, pero había logrado sacarle a la musa unas 10 postales que ambientarían uno de los episodios que tendrían lugar en la fiesta de cumpleaños de Terry celebrada por la Mafia Grandchester… había adelantado el epilogo de Eres mío… y hasta tenía un vídeo listo para publicarlo justo a la medianoche, solo que la bonita musa no se le dio por ponérsela fácil y solo le dio la idea faltando 15 minutos para las doce…
Pero lo mejor de todo era que estaba listo y la sonrisa en los labios de la chica demostraban que había quedado contenta con el resultado, ahora si se preparó para estar lo más hermosa posible, solo para él… salió disparada al foro rosa para buscar al festejado y hacerle entrega oficial de su primer regalo de cumpleaños del 2013!!!
- ¡Terry! ¡Terry amor mío! ¿Dónde estás? – La chica lo llamaba mirando a cada rincón del lugar, se acercó al balcón y lo vio acercarse cabalgado a su fiel Teodora. Por cierto ella también debía tener un pacto o algo, así como Klint y Puppeé… porque ya tenían más años vivos que cualquier otro animal en el mundo – Pensaba la chica con una sonrisa.
- ¿Me estabas buscando preciosa? – Inquirió el castaño con el mismo gesto de ella.
- ¡Por supuesto! ¿Acaso te has olvidado que día es hoy? – Contesto con una pregunta.
- No… no lo he olvidado, enseguida subo, espérame – Pidió mirándola a los ojos.
- No tienes ni que decirlo, ya sabes que no iría a ningún lado… y que esperaría toda la vida – Menciono de manera coqueta y le lanzo un beso.
Terry lo atrapo con la mano y se lo llevo al pecho, después de eso se alejó montaba sobre la yegua para llevarla hasta el establo. Natasha se volvió acomodando todo, para que él disfrutase de su regalo, movió el diván, los cojines, al fin escucho los pasos de Terry al otro lado de la puerta, cuando la figura del chico apareció bajo el umbral corrió hasta él rodeándole el cuello con los brazos y dejándole caer una lluvia de besos en el rostro.
- ¡Feliz cumpleaños! ¡Feliz cumpleaños! ¡Feliz cumpleaños! – Repetía al tiempo que repartía besos y en medio de la risa de ambos.
- ¿Me vas a dar uno por cada año que cumplo? – Pregunto con picardía.
- ¡No! Son muy pocos para todos los que quiero darte… pero mejor ven, tengo algo que entregarte, toma asiento y ponte cómodo – Le indico encendiendo el televisor.
- ¿Un video? ¡Qué bien! Me encantan tus videos… bueno veamos – Dijo rodeando los hombros de Natasha con su brazo.
¡¡¡Tres canciones para el mas precioso de todos, mi amor Terruce Grandchester!!!
Después de nueve minutos y medio, él se volvió para mirarla y sus ojos brillaban, bueno casi tanto como los de la chica quien estaba a la expectativa, se acercó a ella y rozo su nariz con la de la chica, mientras con la otra mano le acariciaba la mejilla, ella dejo libre un suspiro y cerró los ojos.
- ¿Te gusto? – Lo interrogo en un susurro.
- Si… mucho, cada una de las canciones parecen que las hubiesen escrito para mí, sobre todo la segunda, sabes que es lo que siento y como lo expreso, no hay necesidad de desgarrarte las vestiduras y gritarles a todos que la vida te está tratando de la patada cuando lo hace, simplemente lo aguantas, respirar, recoges los pedazos los unes, te levantas y tomas tu camino una vez más… has llegado a conocerme muy bien Natasha… te agradezco las palabras del primero, y la mirada ya no existe, es imposible rodeado de tanto amor… solo tengo dos quejas… - Menciono mirándola a los ojos.
- ¿Quejas? ¿Cuáles? ¿Qué imagen no te gusto? ¿O fue la última canción? – Pregunto alarmada.
- Tranquila, todo eso está bien, la canción es hermosa y me siento halagado que pienses así de mí, solo que tres palabras que reflejan algo que no es cierto… “Casi todo” “Casi nada” “La nube que no quieres ver” – Explico tomando el rostro de la chica entre sus manos. – Tú eres todo… todo Natasha y yo deseo ser lo mismo para ti, no me gusta los medios tonos, eso lo sabes, así que si me das todos, tendrás todo de mi… es un intercambio justo ¿No lo crees? – Inquirió y ella asintió en silencio, no podía hablar sus ojos la tenían atrapada – Perfecto y lo otro… Si no puedo quitar los ojos de ti cuando te tengo enfrente ¿Cómo puedes pensar lo contrario? Ya sé que bueno… son muchas chicas y todas son maravillosas, que todas tienen un lugar especial en mi corazón, sería un malagradecido si no fuese así… esto puede sonar increíble o cínico, pero a todas las amo y deseo hacerlas felices… tú eres la nube que siempre, siempre voy a querer ver, todos los días de esta vida, mientras el mundo gire – Expreso acariciando las mejillas de ella con los pulgares, para secar las lágrimas que bajaban por estas.
- ¡Terry! – Esbozo emocionada y lo abrazo, después en un acto de osadía, se aproximó y le dio un suave beso en los labios – Eres tan hermoso… tanto… gracias por ser así – Agrego perdiéndose en los ojos más hermosos que hubiese visto en su vida.
- Gracias a ti por el amor que me entregas… - Susurro pegando su frente a la de ella.
La envolvió entre sus brazos y esta vez fue él quien busco los labios de la chica para darle un beso, no suave y casto como ese que ella le había obsequiado, como bien dijo, no era un hombre de medias tintas, así que le dio un beso a la morena, un beso como debía ser, de esos que hacen temblar hasta la fibra más pequeña del cuerpo y elevaban al cielo.
Última edición por NatashaGrandchester el Lun Ene 28, 2013 10:40 am, editado 1 vez