Todos los personajes de esta historia son propiedad de
Kyōko Mizuki & Yumiko Igarashi;
Para ajustarlo con la canción, algunas escenas no
están en el mismo orden cronológico que la historia
Con todo respeto les presento mi songfic, espero les guste.
Obvio
Songfic basado en la Canción
“Obvious” – Westlife
Por Sussy
Era un bellísimo día de primavera y me encantaba la maravillosa sensación de cabalgar al despuntar el alba y sentir el viento acariciar mi cara; el sol se filtraba por las copas de los árboles y aún se podía ver el roció en las hojas.
El borde de la cascada detuvo mi carrera, tenía tanto que recordar, el destino, ese poder sobrenatural que guía nuestras vidas… y que tan misteriosamente nos había reunido desde muchos años atrás, más de las veces que quisiéramos en una fatalidad, pero en otras con una gran sonrisa, igual que la de nuestro primer encuentro…
Comenzamos como amigos
Pero algo pasó dentro de mí
Ahora analizo todo
Pero no hay señales, escuchas el relámpago, nena
De ese primer encuentro, mi alma atesoro su hermosa sonrisa y esos ojos jade que me cautivaron; tiempo después allí estaba para rescatarla cuando se quedo dormida en el bote, aunque en ese momento no sabía que era la bella niña de los caracoles, algo muy especial sentí por ella.
No paso mucho tiempo y una muy dolorosa perdida me llamo a su lado, su dolor era el mío, pero ya tenía el poder para hacer algo más por ella y acompañarla en un nuevo camino. Las calles de Londres fueron el escenario de un “casual” encuentro – se ha puesto más bello – me dijo, y mi corazón salto de gozo.
Mis días eran más cortos con cada una de sus visitas al zoológico, era como el sol entrando por mi ventana…nuestra amistad era así, como el viento tibio que nos envolvía, nos conectaba. Nada ya en la vida era igual, yo sabía lo que mi corazón albergaba por ella, no podía evitar mis sentimientos, ya le pertenecía, la amaba… desde que la volví a ver, sentí algo, podía ir del infierno al paraíso con solo una de sus sonrisas; pero también sabia que no era el momento, sólo el tenerla cerca y que me buscará era más que suficiente, definitivamente era un hombre enamorado que necesitaba estar ahí en caso de necesitar refugio, el refugio de mis brazos, que siempre estaban a la espera de ella, que dulce tormento… sentía cada uno como su declaración tacita que confiabas en mí como en ninguno.
Mis brazos fueron fuente de consuelo, cada uno me daba más esperanzas… de verdad que el amor hace eso, esperar. Necesito estar a su lado para protegerla ¿o sería mi alma buscando a su gemela? De cualquier forma la necesitaba cerca, ver que hacía… si aún sufría.
Cuantas veces el destino traza líneas insospechadas y todo lo que alguna vez conociste, puede convertirse en nada. ¿Qué tanta influencia ejercen los cambios? ¿Y qué sucede si te arriesgas y das un paso en falso? Así que cuando tuve la certeza que en su corazón habitaba otro nombre, tome la triste decisión de partir. Solicite a mi muy estimado George que le enviara a Escocia, la vacaciones ya se acercaban.
Habría sido muy fácil haber “inventado” algo para acompañarla, pero no, tenía que intentar olvidarla y el saberle correspondida sólo me alegraba y oraba por que fueran felices.
Me costo tanto escribir avisando de mi partida, no era una despedida definitiva, sabia que no, siempre serias mi pequeña. Comencé uno más de mis viajes en solitario… África me recibió con su calor y belleza salvaje, sus miles de verdes, sólo me recordaban a cada segundo su vibrante mirada. Me obligaba a no pensar en ti… a no sentir
Fueron meses de estimulante trabajo, cada día aprendía más y más sobre veterinaria, la ayuda era muy escasa, pero cada uno de los voluntarios ponía todo de su parte y más.
Los rumores de guerra pronto llegaron, tenia que volver por ti, la carta que me avisaba de tu partida, debió de cruzarse conmigo cuando yo iba a tu encuentro y ahí comenzó la noche de mi vida.
Nunca te das cuenta cuando trato de ser encantador
Ni te preguntas porque siempre estoy donde estás tú
Nuevamente nuestros sendas se cruzaron, tu habías optado por buscar tu propio camino, yo hace tiempo que buscaba el mío, pero siempre pensando en ti.
Y ahí estaba yo, sin pasado, no entendía de dónde nacía tu tan esmerada preocupación por mí, sólo necesitaba salir del hospital para averiguar quién era, pero tú tan impetuosa, al encontrarme en el parque me abrazaste llorando y me juraste que éramos amigos y que cuidarías de mí, sentí algo muy profundo, no podía verla llorar, así que vivimos juntos, ha sido la mejor época de mi vida, cada día era especial, el tiempo que pensaba morir en el hospital, eran un mero mal recuerdo, y todo gracias a ella.
Aún recuerdo, el día que salí a buscar trabajo y no me encontró en el departamento, su cara trasfigurada por la preocupación, por mi bienestar, era tan evidente, que mi cariño por ella crecía día a día y me pregunte ¿si desde antes ya sentía esto?
He sido tan obvio
He hecho todo a excepción de cantarlo
(He estado enamorado de ti por tanto tiempo
Pero una y otra vez me malinterpretas)
Verdaderamente era mágico el poder esperarte cuando salías del hospital…te veía tan joven, pero madura la vez, es cierto que la niña siempre vivirá en ella, en gran parte es porque la amaba.
Siempre le preparaba el desayuno y la cena, era mi manera de agradecer todas tus atenciones, mi manera de decir “te amo”…en una de ellas te escuche susurra “que no serías una buena esposa”, yo me dije – serías la mejor – amorosa y tierna, preocupada siempre de los demás antes que de sí misma.
¡Oh! Aun tiemblo cuando lo recuerdo, no sé que hubiera hecho si aquel león la hubiera atacado a ella, su preocupación fue tanta que al curarme, fue un tanto brusca… tanto era tu cariño, sentías algo más por mí?
No soy muy bueno con las palabras
Y puesto que tú nunca has notado
La manera en la que encajamos
Lo diré en una canción de amor
Te veías tan encantadora cuando renegabas del frutero por llamarte señora. De solo pensar que fueras mi mujer, la felicidad me ahogaba. Cada noche oraba por que esto durara por siempre. De solo pensar en que fueras mi mujer, la felicidad me inundaba.
Sabía que no podía ofrecerte nada sin saber cual era mi pasado, aún así no podía por más que intentaba acallar a mi corazón, era más fuerte que yo; sentía que vivía entre una convivencia feliz y las brumas de un pasado que no quería regresar; era como un velo que ocultaba solo ciertas cosas. Pues hasta francés sabía que hablaba, Puppe fue mi confidente de este secreto, pero sólo más y más interrogantes llenaban mi cabeza. Por qué esta noche en mis recuerdos, ¿por qué recorría el mundo?, ¿cuál era mi propósito?, ¿tenia familia?… lo único que mitigaba mi zozobra y las miles de interrogantes que apremiaban mi cabeza, era ver su hermosa sonrisa… ¿sería posible seguir compartiendo mi viada con ella?, ¿si recordaba quién era, sería más fácil? Me dolía, se me hacía muy difícil comprender este sino, pero de lo que estaba segurísimo, era que en mejores manos no pude haber caído, no podría pedir más al destino…
Te he escuchado decir que
(Escuchado decir que)
Tú quieres a alguien justo como yo
(Justo como yo)
Siempre ha sido habladora, es un gusto escuchar su clara voz. Un sábado de tantos compartidos, me contaba como había conocido a “su príncipe” y aunque aún no sabía que era yo, me ilusionaba saber que en su corazón un sueño reinaba.
¡Regresa rápido! era mi letanía, te necesitaba más de lo quería aceptar.
Tu regreso no fue lo que esperaba, Archie te trajo muy enferma, afiebrada; pero yo vi más allá, una profunda tristeza, te abrazaste a mi como una tabla de salvación, pensarías que podía aliviarte, mi alma rogaba que sí. Eres única, tu sufrimiento era muy hondo, y aun así (notaste) bromeaste sobre mi corte de pelo.
El tiempo pasó como una ráfaga de tibieza y una vez más, demostraste tu fortaleza y la sonrisa volvía a tu lindo rostro. Y el destino nuevamente jugo a mi favor, al fin una tarde el velo de mi pasado callo…no podía creerlo, era tu tutor y algo más… pero podía ser.
Pero cada vez que te invito a salir
(Vez que te invito a salir)
Nunca vamos más allá de la amistad, no, no.
Ante mi partida eminente, necesitaba que de alguna manera supieras que no estarías sola, quería que fuera muy especial, por lo que te invite a un picnic. Y ahí en medio de la naturaleza, compartiendo un simple almuerzo tuve la certeza que en mi alma no ha habido más mujer que ella, nunca había sido tan consciente de aquel poder suyo capaz de conmoverme así… que sólo pude decir: “seamos más que amigos”, era mi promesa, de verdad se la hice. Promesas tan hondas desde mi alma, en ella no ha habido mujer más que tú, te convertirte en alguien muy importante para mí, desde nuestro primer encuentro, el solo ver tu hermosa sonrisa, la cual entibio mi corazón, pues era un momento muy doloroso para mí, y desde ese día me acompaño en mis noches de internado.
Y nunca te das cuenta de cómo
Te miro fijamente cuando estamos solos
Ni te preguntas por que te tengo siempre al teléfono.
Mi corazón está en sintonía con el tuyo. Mis brazos nuevamente fueron tu refugio. Stear, el soñador por excelencia nos había dejado, su partida marco algo muy profundo en mi alma…ye en la de ella, sólo yo sabía donde podías estar; te encontré en el aquel parque, arriba de un gran árbol cerca del cielo.
No soy muy bueno con las palabras
Y puesto que tú nunca has notado
La manera en la que encajamos
Lo diré en una canción de amor
Sí…
Sabiendo, ahora, quien soy para ti, me duele profundamente y sabía que no podía alargar más mi despedida, mis responsabilidades me llamaban, no podía acallar mis sentimientos, nada sería igual, porque el amarla me daba fuerzas.
He sido tan obvio
He hecho todo a excepción de cantarlo
(He estado enamorado de ti por tanto tiempo
Pero una y otra vez me malinterpretas)
Una madrugada me vio partir de tu lado, pero mi alma se quedaba contigo. Mi muy estimadísimo George me esperaba a unas cuadras, me llevaría directamente a Lakewood, debía ponerme al día de muchísimas cosas. Sentí que me dividía en dos, no quería alejarme de ti, pero era hora de retomar mis compromisos, pero me prometí que no sería por mucho tiempo.
Tú eres mi primer pensamiento en las mañanas
Y el último al anochecer
Sólo unos días lejos de ti y estoy en una angustia constante, George con su seria mirada y voz pausada me preguntaba por que no hablar con ella, yo solo lo miraba.
Cada mañana, tus ojos y tu sonrisa llegaban a mí claramente y en la noche elevaba una oración por que te encontraras con bien. Aun con los muy detallados informes de George, y sus suspicaces miradas no era suficiente, quería verte, necesitaba verte.
Tú eres el amor que llegó sin aviso
Te necesito, quiero que lo sepas.
El destino tiene formas muy curiosas de reunir a dos seres… -soy William Albert Andrew- te dije, salió más fácil de lo que había pensado, te vi muy afectada, emocionada hasta las lagrimas, sabía que me conocías, pero no como el cabeza de los Andrew, pero prontamente pudimos volver hacer los “amigos” de siempre. Me miraste con un brillo diferente, que no pude descifrar ¿o era lo que yo quería ver?
Cómo no sentir cuan intensamente te amaba, pero no podía decirlo, no, aún no. Pasamos unos días maravillosos, que sólo reforzaron mi sentir.
No había planeado presentarme así ante la sociedad, pero por ella ¡todo! Aun no tengo muy claro que paso por la cabeza de mi Tía, sé que creía hacer lo “mejor” para la familia, pero no así, no con mi pequeña.
He sido tan obvio
Así que finalmente lo cantaré
(He estado enamorado de ti por tanto tiempo)
Los días se convirtieron en meses y los meses en años, compartiendo tantos momentos mágicos, que pasaron como en un sueño, un sueño maravilloso
Y no soy muy bueno con las palabras
Y puesto que tú nunca has notado
La manera en la que encajamos
Lo diré en una canción de amor
Y con el mismo amor de siempre, no puedo esperara más, mi corazón me dice que es el momentos preciso, ya quedaron atrás todas las dudas y miedos y recursos para demostrarte todo lo que mi corazón guarda por ti. Creo que cuando las palabras sobran solo queda entender lo que se dice con evidencias.
Y la cantaré hasta el día en que me abraces
Te he querido por tanto tiempo
Pero una y otra vez me malinterpretas
Entonces te adoro más pero como nunca pareces ver
Y hoy es el día que se lo diré, me espera en el jardín de las rosas, se ve tan bella, su rostro está encarnado, me mira y nuestras almas se conectan, corre a mi encuentro y mis brazos te reciben con amor, de mi boca solo pueden salir las palabras reflejadas en mis ojos –te amo– me vez directamente a los ojos y sonríes, te siento acercar y une sus labios a los míos en una promesa de felicidad sin fin. Desde aquel día, que la vi llorar, aquella criatura joven y dulce que por primera vez apoyo su mano en la mía… aquel ángel de ojos verdes que nunca pude olvidar.
Me miras y preguntas, ¿por qué no lo note antes…?
Obvio, era simplemente la oscuridad antes del amanecer de nuestro amor.
*** FIN ***