El PASADO REGRESA.
cuarta parte
Terry se dejó abrazar por su madre, quería sentir el confort de sus brazos. Luego Eleonor lo tomó de su brazo y se dirigieron hacia un sofá. ─¿cómo estas hijo? por cierto te felicito por el éxito que han tenido con la gira.
─gracias madre, estoy bien, pero podría estar mejor... ¡madre! ¿puedo quedarme aquí esta noche?
─ ¡por supuesto cariño! ¡no tienes por qué pedirme permiso, esta es tu casa y puedes quedarte las veces y el tiempo que quieras!
─¡gracias madre!
─ahora cuéntame, ¿qué te pasa? te noto un poco triste.
Terry le contaba a su madre lo difícil que era vivir con Susana y su madre, de la esperanza que tenía de poder ver a Candy en Chicago y que no pudo ser. Mientras tanto en otra residencia una muy enojada madre le reclamaba a su hija.
─¿Qué estupidez has dicho? eres una tonta Susana, como vas hacer eso!
─¡lo siento madre, pero ya he tomado una decisión y esta vez no voy a permitir que te metas en mi vida!
Al día siguiente después de desayunar con su madre, aunque Robert les había dado unos días de descanso, no sabía por qué, pero decidió ir a darse una vuelta por el teatro pues quería empezar a estudiar la siguiente obra. Cuando llegó se sorprendió de ver a todos sus compañeros de tabla ahí.
─¡Terry! dijo Karen al verlo, hay buenas noticias -dijo muy emocionada. -ah sí ¿de qué se trata?
─Ven para que te lo diga Robert.
─¡Buenos días Robert! ¿qué es lo que pasa?
─¡Hola Terry! te llamé temprano pero no estabas, pero bueno, resulta que hemos sido reconocidos internacionalmente, y ahora que la guerra ha terminado, el Teatro Royal de Londres Inglaterra nos ha invitado a pasar la próxima temporada allá.
─¡Eso es maravilloso Robert! ¿y para cuando estaríamos viajando?
─dentro de un mes, así tendrán tiempo para que puedan organizarse y vayan estudiando a "Hamlet" nuestra próxima obra.
Era una sensación muy extraña que sentía Terry con ese viaje, pero al mismo tiempo sentía como que de ese viaje dependía su vida, y su felicidad. Al salir del teatro, Terry tenía algo pendiente que hacer y eso era hablar con Susana, después de conversar con su madre la noche anterior había decidido dejar a Susana, claro que él iba a estar pendiente de ella para que no le faltara nada.
Al entrar a la casa, vio que Susana estaba sentada cerca del ventanal observaba hacia el jardín.
─¡Hola Susana! ¿Cómo estás?
─¡Hola Terry, bien gracias, que bueno que llegas!, toma asiento Terry, ¡Tengo algo importante que decirte!
─¿ha si? ¿de qué se trata?
─Estos dos meses que han pasado he estado meditando mucho, y con la ayuda del doctor Mathew mi terapeuta, me ha hecho reflexionar las cosas.
─¿qué cosas?
─han sido tres años en los que me he empeñado en retenerte a mi lado a como diera lugar, haciéndote sentir culpable por lo que pasó. tres años en los que no logré obtener tu amor, tu presencia podrá estar aquí, pero tus pensamientos y tu corazón están con ella. Y después de lo que vi ayer, he decidido dejarte libre Terry, ya no tienes que sentirte comprometido conmigo.
─¡Gracias Susana! y en verdad lo siento, a Candy la amé desde el primer momento en que la vi y nada cambiará.
Después de esa conversación, Terry se sintió más aliviado de ser Susana quien diera por terminado todo, así él no se sentiría culpable de hacerla sufrir aún más, le dejó la casa y sacó sus cosas personales y se mudó a la casa de su madre quien ella felizmente lo recibía.
*IRLANDA DEL NORTE *
Habían llegado al punto Norte más alto de Irlanda llamado Donegal.
─¿están listas? -preguntó Albert a las chicas.
─¡Albert pero si es medianoche! yo tengo sueño. -respondió Candy bostezando.
─¡Candy es que lo que les tengo que mostrar pasa a esta hora y está ahí afuera!
La curiosidad de las chicas hizo que se levantaran en un dos por tres y salieron afuera de la cabaña. Grande fue la sorpresa para ambas al ver el gran espectáculo de luces en el cielo, teñidos de verdes, violetas y turquesas.
─"se llaman auroras boreales" -les dijo Albert.
─¡wow! es impresionante como pueden existir fenómenos así. -dijo Patty
─¡Es una belleza! -dijo Candy, encantada.
─¡Así es, sabía que les iba a encantar! -dijo Albert.
El mes pasó rápido, Terry y sus compañeros ya hacían a bordo del trasatlántico que los llevaba rumbo a Londres, Karen estaba feliz pues era la primera vez que salía tan lejos. Al sexto día el Capitán del trasatlántico anunció a sus pasajeros que en media hora tenían que hacer una parada para auxiliar a una pequeña tripulación, que se había dañado.
Terry y Karen estaban en la terraza del barco, cuando observaron que los que eran auxiliados se trataban de enfermeras y heridos de la guerra. De repente Terry vio a un muchacho que se le hacía muy conocido, pero no estaba seguro de que fuera él, pues no traía puesto sus lentes, lo acompañaba una bella enfermera.
─¡¡Stear!! -dijo Terry cuando lo vio más de cerca.
─¿usted lo conoce? -le preguntó la enfermera.
─¡sí, él es Stear Ardlay! un viejo amigo.
─¡gracias a dios! -dijo ella.
─lo encontraron unos pescadores, su avión al ser derribado cayó en el mar, pero de suerte que ellos estaban cerca y lograron salvarlo.
─¿pero qué tiene él aún no me reconoce?
─tiene pérdida de memoria, que fue causado por el impacto del avión sobre el océano y la impresión de que iba a morir, todo este tiempo hemos estado en una pequeña Isla cerca de Francia.
Terry estaba en shock, de todo lo que la enfermera le había relatado, al siguiente día arribaron a Southampton y por suerte el Hospital al que se dirigían quedaba cerca del Hotel Savoy donde se hospedarían.
**IRLANDA DEL NORTE**
─¿¡qué me estás diciendo Archie!? ¿están seguros? -dijo Albert poniéndose de pie del sofá cuando recibió la llamada, Candy y Patty salieron de sus habitaciones cuando lo escucharon.
─no te preocupes nosotros salimos hacia Londres en seguida.
─¡Candy, Patty preparen sus equipajes inmediatamente! ¡Viajaremos a Londres!
─¿qué pasa Albert, por qué a Londres? -le preguntó Candy.
─Candy, Patty es un milagro, pero parece ser que Stear ¡¡está vivo!!
─¿¿Qué,?? -respondieron al mismo tiempo ambas?
─El barco en el que iba Terry hacia Londres, lo auxilió. Candy se puso nerviosa de escuchar su nombre.
En cuanto todos estuvieron listos, abordaron un tren a Dublín, que les tomó unas cinco horas. Luego de ahí se embarcaron hacia el puerto de Liverpool en Inglaterra, les tomó dos horas más para finalmente llegar a Londres, ya era un poco tarde, Albert insistía que Candy y Patty descansaran un poco, pero ellas renuentes a quedarse en el hotel Savoy donde se hospedaron también.
Después de pedir información en la recepción del hospital, llegaron a la habitación donde se encontraba Stear, Albert al ver salir a la enfermera de la habitación.
─¿¡Abby!? La enfermera al verlo se alegró tanto de ver nuevamente a su viejo amor, se conocieron en África y por cuestiones de asuntos que tenía que atender Albert, se separaron.
─¡Albert! ¡que gusto me da volverte a ver! -los dos se acercaron para abrazarse y darse un beso en la mejilla.
─¡estas bellísima!, -le dijo él
─y ¡tú estás más guapísimo! Luego Albert le presentó a Candy como su hija adoptiva y cuando Albert mencionó a Patty.
─¡Así que tú eres Patty! aunque Stear no recuerda ni cómo se llama, él te nombra Patty.
─¡oh! ¿podemos verlo?
─¡claro aunque él está dormido en este momento pueden pasar con cuidado.
A las chicas se les salieron las lágrimas, pues no podían creer que Stear estuviera vivo, incluso a Albert se le aguaron los ojos y se dijo a sí mismo.
─ay tía Elroy, si estuvieras viva sé que este milagro te hubiera sacado de la gran tristeza que sufriste.
Al salir de la habitación, Abby les dijo que Stear al ser derribado su avión fue herido y llegó casi muerto a ella, y su pérdida de memoria la hizo aferrarse a él, para cuidarlo y encontrar a su familia. Hasta que conocí a Terry y fue él quien lo reconoció.
─¿Y dónde está Terry? -preguntó Candy.
─él viene todos los días a veces por las mañanas o por las tardes, pues tiene funciones con la nueva obra de teatro.
Al escuchar esto, Candy se puso tan feliz de saber que su gran amor estaba triunfando. Al día siguiente Albert, Candy y Patty habían llegado nuevamente al hospital, y el gran momento había llegado, Patty entraba a la habitación de Stear y él al verla reaccionó diciendo.
─¡Patty, mi amor! dijo luego puso sus manos sobre su cabeza y se desmayó.
Abby los tranquilizo pues les dijo que era normal, que él empezaba a recuperar su memoria mientras ella examinaba su presión y sus signos vitales.
Otro gran encuentro estaba por suceder cuando Terry llegaba a la habitación y al ver a Candy y a los demás de la habitación.
─¡Candy! -su corazón saltaba de alegría al verla más hermosa, más mujer y de unos atributos bien desarrollados.
se acercó a ella y los dos se fundieron en un abrazo tan largo que no querían separarse, Candy sentía una enorme felicidad que no le cabía en su corazón y se aferraba a sus brazos y sin dudar le plantó tremendo beso en los labios y Terry por supuesto sonrió encantado con su pecosa atrevida.
Albert carraspeo para volverlos a la tierra, luego le agradeció a Terry por notificar a Archie. Terry después de conversar un poco con ellos invitó a Candy a un restaurante cercano, pues tenía mucho que hablar con ella. Al llegar al restaurante, Terry había pedido un lugar privado pues no quería interrupciones, ya sentados uno junto al otro, Terry le dijo que nunca la había podido olvidar pues a pesar de los años nada había cambiado en él, y que ahora que se han vuelto a ver aun la ama más.
Candy también le confesó que ella se había arrepentido de haberlo dejado sin preguntarle lo que él querría, y que también lo amaba. Entonces Terry le pidió a Candy que fuera su novia, le contó que fue Susana quien dio por terminado lo que fuera que haya sido entre ellos. Y por supuesto que esta vez Candy no iba a posponer su propia felicidad y aceptó. Dicho y aclarado sus sentimientos se besaron tiernamente sintiendo finalmente en sus corazones paz y tranquilidad.
Después de un mes, Terry había concluido con las presentaciones del teatro, Robert Hathaway y el resto de los compañeros ya habían partido a América, pero él decidió quedarse para acompañar a su pecosa y partir todos juntos de regreso a también.
Ya todos abordo en el trasatlántico, Stear y Patty estaban sentados en una de las bancas en la terraza observando la puesta del sol en el horizonte, le dijo.
─¡Estuviste hasta en mis últimos pensamientos! Y me juré que si sobrevivía un día te mostraría este formidable sol que se extiende hasta el infinito, así como es mi amor por ti.
Patty se acercó para darle un beso y permanecer abrazada a él y diciéndole que también lo amaba.
Albert también había convencido a Abby de irse con él, y llegando a América se casarían. No muy lejos de estas parejas, Terry abrazaba a Candy.
─¡Tú y yo...tenemos muchos capítulos por escribir, no me sueltes nuevamente porque ahora viene lo mejor!
─¡Pues agárrate fuerte, porque ya no te pienso soltar nunca más! Y así sellaron su promesa con un beso. El pasado regresó para estas parejas y ahora ellos se encargarían de vivir el uno para el otro.
**FIN**
Muchas gracias por tomarse el tiempo de leer esta historia besos...Lady Lumont.
Última edición por Lucy Montano el Vie Abr 30, 2021 5:08 pm, editado 1 vez