Disfrutenla!!!
CANDICE…
—Se, Se, Señor Grandchester?
—Srta. Ardlay? —me mira desconcertado ¿Que será?...ay! no respondí!
—Ah si, estoy bien gracias. Solo fue un descuido y tropecé. A veces suelo ser algo distraída.
—Así parece. Creo que también no ayuda la falla en el tapiz, pediré que revisen eso.
—Muchas Gracias —Siento que mi cara explotara, vamos Candice tranquilízate, esta es tu oportunidad, es EL SR. GRANDCHESTER en persona! Vamos Candice, Coraje!!!
—Disculpe Sr. Grandchester, usted toma té? Lo que pasa es que tengo un té verdaderamente delicioso que mi padre me ha enviado y no se si le gustaría un poco? —En serioooooo Candice? Eso es lo que se te ocurrió decir? Invitarle té?
—Bueno, justo iba por un café, pero creo que podría cambiarlo. Después de usted.
Diablos!!!!! El es demasiado perfecto, todo un caballero quien no se enamoraría de solo mirarlo. Ah!!!!! No puede ser!!!! Tranquilízate Candice, vamos debes respirar …
—Sabe Sr. Grandchester, hoy se unirá a nuestro equipo un nuevo empleado. Es un conocido mío.
—Así? Y cual es su nombre?
—Neal Leagan. —Dije algo malo? la mirada del Sr. Grandchester, de repente cambio. No logro descifrar si es enojo, ansiedad o que cosa.
—Me retiro. Buen día Srta. Ardlay.
—Buen día Sr. Grandchester.
Que extraño nunca había visto al Sr. Grandchester en ese estado, ojala no sea nada malo. Por Dios! Olvide entregar los documentos que me pidió Tom!!!! Va a matarme!!!
TERRENCE…
La Srta. Ardlay, 1.55cm, busto amplio, caderas amplias, cuerpo bien torneado… No, repito… La Srta. Ardlay, no usa maquillaje, no se da cuenta que el sujetador se le nota a través de la blusa, que su falda tiene una mancha de la que ni se ha percatado, que si usara unos tacones un poco mas altos, se le estilizaría mas el cuerpo. Desearía saber que hay debajo de toda esa maraña de cabellos dorados mal arreglados.
Se le ve nerviosa, yo la pongo nerviosa? Es tan eficiente y diligente, ella no lo sabe pero todos en su departamento quieren meterse en su falda, seria una pena perder a una empleada tan devota.
Demonios, no debí aceptar este té que sabe horrible. Me dice algo sobre un nuevo empleado y yo pregunto su nombre.
—Neal Leagan
Que!!!!! Mi asombro y mi fastidio creo que son muy perceptibles. Trato de relajarme pero ese nombre me pone los nervios de punta. Solo me queda la opción de irme o explotare y nos abre como explicarlo.
—Me retiro. Buen día Srta. Ardlay.
—Buen día Sr. Grandchester.
Salgo de la cafetería y me encierro en mi oficina. Miles de recuerdos, vienen a mi, muchas cosas que he querido borrar…. Pero… ese nombre.. Neal Leagan!!!! El Maldito Neal Leagan!!!! Demonios como diablos esa sucia rata fue contratado en mi empresa! Voy a tener que ver su maldita cara todos los días!!!! Ah!!!!!!!! Solo esto me faltaba!!!!! Quisiera eliminarlo, borrarlo de la faz de la tierra… el es el único… el único responsable…
Flash back…
—Por favor es mi pensión para la matricula.
—No te preocupes, es solo un préstamo, vamos a tener buenos ingresos con esta inversión.
—Neal, por favor no pued..
—Vamos Terry, no seas cobarde! Es una inversión, en un mes tendrás tu dinero y los intereses. Vas a ver que no te arrepentirás…
—Peeero…
—Deberías agradecerme, te estoy dando una muy buena oportunidad, no te arrepentirás. Además los negocios no se mezclan con la amistad. Jajajajaja.
—Esta bien, confiare en ti.
No debi dejar que me arrebatara mi dinero, si no consigo pagar la matricula antes de fin de mes, no podre seguir estudiando… que voy hacer?
Fin del Flash Back
Ahora todo es diferente, pero aun no puedo borrar de mi mente todo lo que tuve que hacer porque el imbécil ese solo me mintió. Me usó y me orillo aceptar… Ah! Déjalo ir Terrence, déjalo ir…
—Buen día, Mi nombre es Neal Leagan.
Ese imbécil me mira con cara de asombro, no puede creer que esta ante el Presidente de Grandchester NDP, pedazo de mierda… vas a ver lo que te espera. Si pudiera en este momento… debo calmarme, esta oportunidad de tomar mi venganza no puede desperdiciarse así.
—Bienvenido! Espero podamos trabajar como el gran equipo que somos —alargo mi mano y estrecho la suya con un fuerte apretón de manos. No muestro mi disgusto al contrario me muestro amigable y empiezo una charla amena con este inepto.
—Amigo, yo quisiera que hablemos en privado —me dice él, inmediatamente le digo que vayamos a mi oficina.
Mientras nos dirigimos a mi oficina, el silencio es sofocante, pero me intriga de que quiere hablar conmigo, no comprendo su comportamiento. Al llegar, tomo asiento en mi sillón y lo invito a sentarse.
—Deseas algo de tomar?
—No estoy bien así. Lo que he venido a decirte y entregarte es esto. —me acerca un sobre con billetes. Mi mirada pasa del sobre a él.
—Se que es tarde para devolverte lo que me prestaste pero no quiero continuar en deuda contigo, mas aun recibe mis sinceras disculpas y por favor acepta el dinero que tanto trabajo me costo juntar.
Lo miro con incredulidad, y como el buen actor que soy, sonrío y le digo:
—Gracias amigo, pero olvidemos el pasado; y lo mas importante que no mezclemos negocios con la amistad.
—Si, Terry.. perdón Presidente Grandchester. Regresare a la reunión de bienvenida.
—Nos vemos.
Al cerrarse la puerta, limpio mi mano de su desagradable toque. Como si fuera tan fácil olvidar. Dicen que la venganza es un plato frio y esta preparación aun esta comenzando…
Al regresar a la recepción, cuando paso por el cubículo de Neal, veo algo que llama mi atención. Es una foto de él y la Srta. Ardlay? Ella esta sonriente y el la mira con cara de… de… enamorado?
—Hey! Encontraste mi tesoro. Candy es hermosa no lo crees?
Ay no lo puedo creer!!!!! Esta es mi oportunidad!...
—Si, lo es. Dime te gusta?
Veo enrojecer su cara y no puedo creérmelo. B.I.N.G.O.!
—Ella ha sido lo mas importante desde que la conocí.
—No te preocupes amigo! Te ayudare! Me gustaría verte feliz!
Diviso a la Srta. Ardlay con unos colegas conversando, nos acercamos e inmediatamente ella me da una mirada que muchas veces eh visto. Grandchester tienes el toque, sonrio para mis adentros.
—Sr. Grandchester, Neal, digo Sr. Leagan.
—No hay problema Srta. Ardlay, estamos entre amigos verdad? Por cierto quisiera comentarles que el comercial para Lafayette es nuestro, Gracias a una increíble gestión podemos contar con uno de los mejores clientes, ahora se nos vienen tiempos complicados ya que este proyecto será uno de los mas grandes.
Todos me miran asombrados y comienzan a vitorear, se ven bastante alegres con el anuncio… Comienzan a dar nombres de actrices para la campaña publicitaria, escucho el nombre de Karen Kleiss, seria una buena opción. Pero en un momento Neal hace que mis recuerdos mas desastrosos regresen.
—Por que no es Susana Marlow, ella es una belleza y es super talentosa.
—No es muy mayor? —dice Tom.
—Si, pero tiene mucha experiencia —Este maldito! Tenia que mencionarla! No resisto y me dirijo a los servicios.
Lavo mi cara, una y otra vez, pero solo logro ver al muchacho pobre que debió hacer lo impensable para poder llegar a donde esta.
Maldita sea no es momento para ponernos nostálgicos! Solo quiero echar andar mi plan y acabar con la rata. Ese debe ser mi enfoque ahora. Lo lamento Srta. Ardlay pero por usted no hay sentimientos de por medio, solo será la pieza que me ayude a obtener mi venganza….
1,2,3,4 tragos… soy resistente al alcohol, pero para que esto funcione debo aparentar estar un poco mal… veo que la Srta. Ardlay esta caminando hacia el corredor, así que sin perder el tiempo camino interceptándola pero finjo un mareo que me hace lucir ebrio.
—Sr. Grandchester esta usted bien?
—Si, estoy… no, francamente no, estoy algo mareado.
—Desea que haga algo por usted? —Caíste!
—Podrías llevarme a mi casa? Es que hoy vine manejando y no creo poder hacerlo de regreso a casa —si supiera que casi nunca manejo, que mi chofer solo siguió ordenes de desaparecer.
—Si claro, no hay problema —me responde y noto un sonrojo carmín en sus mejillas, diablos no había prestado atención a esta mujer, su piel parece porcelana, sus ojos esmeraldas me miran con una emoción y sus labios, con el color correcto de labial se verían espectaculares.
Salimos de la empresa yo apoyado en ella, debo de pesarle bastante considerando su estatura y la mía (mi 1.85cm no es fácil de manejar), pero igual nos las arreglamos para llegar al auto.
—Podría poner su dirección en mi GPS? Aun no me desplazo sin indicaciones.
—No te preocupes, voy a dirigirte —le digo para que solo maneje y me deje actuar.
—Esta bien.
La dirijo por la ruta a mi pent-house, maneja muy prudente y se preocupa por mi estado.
—Aun sigue mareado? Tiene nauseas?
—No, estoy bien. Solo un poco avergonzado por abusar de su amabilidad.
—No! No se sienta así, esto solo lo hace ver mas humano.
—Entonces antes no me veía humano?
—No, no me mal entienda, solo que usted nunca comete errores, siempre tan carismático, confiado, apasionado por su trabajo; yo quisiera ser como usted.
Ella parece admirarme? Bueno un punto mas para hacer esto fácil.
—Escuche que usted y Neal solían ser amigos? Tal vez podríamos salir algún día a tomar una copa.
—No, muchas gracias. Neal no es de mi agrado.
—¿Como?
Comenzare actuar desde ahora.
—Neal me robo la novia en la universidad. Si alguien tiene algo, el lo quiere. Siempre ha sido así. De saber que iba a estar en la empresa, hubiera confesado antes mis sentimientos…
—¿Sentimientos?
—Si, Srta. Ardlay mis sentimientos hacia usted. Ahora me veo forzado a no mostrarlos ya que sino Neal querrá robarla también y eso no lo puedo permitir.
—Ah, ya veo… espere que!!!!!!!
Dios, la emoción le gano casi nos mata!!!!
—Sr. Grandchester, ¿Quiere decir que yo le gusto?
—Exactamente Candice, me gustas. Nunca me he confesado a nadie.
—Sr. Grand, Grandchester…
—Me bajare aquí, ya estoy cerca de mi departamento. Cuídate mucho.
—No! Yo lo llevare.
—No te preocupes estoy muy cerca. Además debo calmar mi corazón que esta acelerado por ti.
La veo irse, y me divierte lo nerviosa que esta. La sigo con mi mirada y al verla mirar por el retrovisor le doy un guiño que la hace perder el control. Es tan divertido.
Unas horas después…
—Hola? Candice?
—Sr. Grandchester, llego bien a casa?
—Si, todo perfectamente bien. Gracias a ti. Llegaste bien tu?
—Si, ahora estoy en casa. Sr. Grandchester con respecto a lo que me dijo… no puedo dejar de pensar en eso.. siento el corazón acelerado y enloquecido.
—Mi corazón esta así también —esto esta causándome gracia—. Me dejarías mostrártelo? —siento su tartamudeo y me dice que espera que tenga una buena noche…
—Adiós, Candice, nos vemos mañana.
—Adiós, Sr, Grandchester.
—¿Quien era? —el rostro de Karen me mira intrigada.
—No era nadie, continua. —Agarro su cabello y empujo su cabeza para que siga chupándome la polla antes de darle rienda suelta a mi deseo y follarla en todos los lados de su recamara… hasta el amanecer….
…Continuara… [/b]
OSCURA OBSESION CHAPTER 1