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—Buenos días señor Graham, ¿que tal su despertar luego de su primera noche bajo cielo Neoyorquino? —asombrosamente Anthony sonreía.
Terrence negó con la cabeza —te aconsejo que no vuelvas a hacer eso o tu amigo, esa pequeña bestia de cuatro patas pagará las consecuencias —advirtió
—Por qué mejor no trata de hacerse su amigo —Anthony rió —en el peor de los casos, esa pequeña bestia de cuatro patas, como usted lo llama puede sernos útil. Dígame ¿quién podría desconfiar de un pequeño e inofensivo Coati? Así que, lo mejor que puede de hacer es buscar la manera de entenderlo.
—Pequeño si, inofensivo no —replicó Terrence recordando lo sucedido dentro de su departamento —pero tienes razón, esa pequeña bestia de cuatro patas puede resultarnos útil en un futuro. —Ten —Terrence le extendió una carpeta
—¿Qué es?
—Es el contrato que deben firmar los inquilinos del Magnolia y las encargadas del refugios.
—Me sorprende su eficiencia
—Soy un profesional en lo que hago y sé perfectamente lo que se espera de mi, aunque debo admitir que la impresora que instalaste en el departamento me fue de gran utilidad.
—Ya veo —respondió el rubio dando una ligera hojeada.
—¿Has encontrado un lugar adecuado para llevar a cabo nuestra reunión con el representante de la constructora King?
—Ese restaurante de enfrente podría ser una buena opción —propuso Anthony señalando el lugar.
—Y por que no la llevan a cabo dentro de la oficina de nuestro bufete —ambos se giraron ante aquellas palabras —abogado William Ardley representante legal de los inquilinos del edificio Magnolia, a sus órdenes —se presentó
—Licenciado Ardley —Anthony se aproximó —él es Terrence Graham mi representante legal —lo presentó —llegó anoche proveniente de Londres.
—Mucho gusto señor Graham —asintió con la cabeza —imagino que no sabe que no puede ejercer en los Estados Unidos.
—De hecho si puedo hacerlo, licenciado Ardley —sonrió de medio lado —soy egresado de la Universidad de Oxford por lo tanto puedo ejercer en muchos Pais del Mundo, sin embargo he decido no hacerlo en esta ocasión y limitarme a dar asesoría legal al señor Brower.
—Ya veo —William Ardley achicó los ojos y lo estudió detenidamente su rostro se le hizo familiar, buscó entre sus recuerdos hasta que dio con el que buscaba. —Entonces, ¿aceptan mi propuesta de llevar a cabo la reunión con el representante de la constructora King en mi oficina?, después de todo como el representante legal de los inquilinos del Magnolia, me interesa estar al tanto de todo.
—De acuerdo —Anthony asintió con la cabeza a manera de gratitud —le avisaré a ese insistente hombre el lugar y la hora de nuestra reunión —se alejó un poco.
—Y dígame señor Graham, ¿cuánto tiempo planea quedarse en los Estados Unidos?
—El necesario para que el señor Brower solucione sus problemas —lo miró
—¡Mmm! ya veo — ¿Le aconsejó que vendiera los edificios?
—No —respondió el joven castaño
—Listo —Anthony regresó a ellos —estará aquí en tres horas
—Perfecto —musitó Terrence mirando su reloj —ya es hora. ¿Viene con nosotros licenciado Ardley?
—Claro —respondió el hombre mayor poniéndose en marcha.
**********
—Por favor, podrían quitarse los zapatos para que no estropeen el piso —decía Patty con voz suplicante. —Ay por Dios del cielo Flammy si las cortinas estaban corridas era precisamente para que no ensuciaran mis espejos.
—Eres una exagerada Patty —protestó Archie mientras daba un sorbo a su tasa de humeante café —¡ups! —musitó cuando trastabilló y el resto del líquido terminó en brillante piso de madera
—¡Maldición! —gritó Patty roja de coraje —¿Por que demonios propuse que la reunion se llevara a cabo aquí?
—Quizás por que quieres impresionar al asesor del señor Brower —respondió Mark sonriendo.
—Cierra el pico o te juro que una palabra más, te lo cerraré yo misma
—Tranquila Patty —intervino Stair —tan pronto terminé la reunión te ayudaremos a limpiar tu salón —le guiñó un ojo para tranquilizarla —¿verdad que lo haremos vecinos?
—Si —respondieron todos al unísono —el piso quedará tan limpio que podrás ver tu propio reflejo en él.
—Hasta no ver no creer.
—¿En dónde he leído eso? —Annie se acercó a ella y palmeó su hombro —Ah si! Tomás el apóstol dijo que hasta que no viera con sus propios ojos a Jesus y metiera su mano en el costado no creería ¿no es así hermana María?
—Así es —respondió la religiosa mujer
—Bueno, bueno —Stair alzó la voz —dejemos esta pequeña disputa para mas tarde por ahora centrémonos en la reunión
—¿Que has dicho? —Annie abrió los ojos como platos. ¿Su vecino había dicho lo que escuchó que dijo o lo había imaginado solamente?
—Lo que escuchaste —respondió Stair con seriedad.
—Oye Stair ¿desde cuando eres un depravado? ¿Cómo te atreves a decir esas cosas frente a unas damas? —Negó con la cabeza —que vergüenza —se acerco a Patty —no le hagas caso a ese cuatro ojos, Patricia, es un patán sin una pizca de educación —torció los labios.
—¿De que demonios hablas?
—Acabas de decir que dejáramos a la pequeña puta para mas tarde....
Todos comenzaron a reír, sin duda alguna el problema de sordera de Annie había hecho de las suyas una vez mas. No entendían como un chica con problemas auditivos se había convertido en un prodigio de la música... bueno, Mozart también lo fue, era probable que esta fuera otra de sus vidas.
—Diablos Annie, deberías planear una visita a tu otorrinolaringólogo lo mas pronto posible, tal parece que los audífonos de tus oídos necesitan ser calibrados o de plano tu problema auditivo va de mal en peor —dijo Patty pegada a su oído cuando finalmente dejó de reír —Stair ha dicho pequeña disputa.
—No los tengo puesto —respondió avergonzada.
—¡Ah! Eso lo explica todo. Mas te vale que te los pongas ahora mismo o mal entenderás todo lo que se hable durante la reunión —Patty se dirigió a ella usando el lenguaje de señas.
—De acuerdo —respondió Annie colocándose el aparato en su oido izquierdo.
—¡Shhhh! silencio ya están aquí —dijo Archie tras atisbar por la ranura de la puerta.
—Buenas tardes.
—Buenas tardes —respondieron todos al unísono con recelo.
Tras las presentaciones respectivas, Anthony Brower comenzó a relatar el plan que tenía, el cual era favorable para todos.
—¿Que garantía tenemos que no es una trampa para sacarnos de aquí solamente?
—Tienen mi palabra —respondió Terrence
—Su palabra —bufó Archie
—Eso debería bastarle y sobrarle —replicó Terrence esforzándose por sonar gentil, aunque por dentro estaba que hervía de rabia. ¿Cómo demonios se atrevía aquel insolente a dudar de su palabra? En el mundo de la mafia, su palabra valía mas que el oro refinado.
—¿Tiene usted una idea de cuántas veces nos han engañado? Por qué íbamos a creerle precisamente a usted —replicó Archie con prepotencia.
—No tengo idea con que tipo de personas han tratado en el pasado, pero les aseguro que yo soy muy diferente —respondió Terry de la mis forma.
—Si claro, tan diferente que quieren echarnos de nuestro hogar —replicó Annie.
—Escuchen —Terrence apretó la mandíbula. Le estaba resultando difícil ser amable con aquel grupo de personas —solo tienen dos opciones, creer en la propuesta del señor Brower o no hacerlo, pero tengan la seguridad que si eligen la segunda opción los afectados serán ustedes, así que les aconsejo que piensen bien cuál será la elección que harán porque no habrá una segunda oportunidad.
Gracias Por leer
Retaliación
By Rossy Castaneda
Capítulo 5 Parte 1
By Rossy Castaneda
Capítulo 5 Parte 1
—Buenos días señor Graham, ¿que tal su despertar luego de su primera noche bajo cielo Neoyorquino? —asombrosamente Anthony sonreía.
Terrence negó con la cabeza —te aconsejo que no vuelvas a hacer eso o tu amigo, esa pequeña bestia de cuatro patas pagará las consecuencias —advirtió
—Por qué mejor no trata de hacerse su amigo —Anthony rió —en el peor de los casos, esa pequeña bestia de cuatro patas, como usted lo llama puede sernos útil. Dígame ¿quién podría desconfiar de un pequeño e inofensivo Coati? Así que, lo mejor que puede de hacer es buscar la manera de entenderlo.
—Pequeño si, inofensivo no —replicó Terrence recordando lo sucedido dentro de su departamento —pero tienes razón, esa pequeña bestia de cuatro patas puede resultarnos útil en un futuro. —Ten —Terrence le extendió una carpeta
—¿Qué es?
—Es el contrato que deben firmar los inquilinos del Magnolia y las encargadas del refugios.
—Me sorprende su eficiencia
—Soy un profesional en lo que hago y sé perfectamente lo que se espera de mi, aunque debo admitir que la impresora que instalaste en el departamento me fue de gran utilidad.
—Ya veo —respondió el rubio dando una ligera hojeada.
—¿Has encontrado un lugar adecuado para llevar a cabo nuestra reunión con el representante de la constructora King?
—Ese restaurante de enfrente podría ser una buena opción —propuso Anthony señalando el lugar.
—Y por que no la llevan a cabo dentro de la oficina de nuestro bufete —ambos se giraron ante aquellas palabras —abogado William Ardley representante legal de los inquilinos del edificio Magnolia, a sus órdenes —se presentó
—Licenciado Ardley —Anthony se aproximó —él es Terrence Graham mi representante legal —lo presentó —llegó anoche proveniente de Londres.
—Mucho gusto señor Graham —asintió con la cabeza —imagino que no sabe que no puede ejercer en los Estados Unidos.
—De hecho si puedo hacerlo, licenciado Ardley —sonrió de medio lado —soy egresado de la Universidad de Oxford por lo tanto puedo ejercer en muchos Pais del Mundo, sin embargo he decido no hacerlo en esta ocasión y limitarme a dar asesoría legal al señor Brower.
—Ya veo —William Ardley achicó los ojos y lo estudió detenidamente su rostro se le hizo familiar, buscó entre sus recuerdos hasta que dio con el que buscaba. —Entonces, ¿aceptan mi propuesta de llevar a cabo la reunión con el representante de la constructora King en mi oficina?, después de todo como el representante legal de los inquilinos del Magnolia, me interesa estar al tanto de todo.
—De acuerdo —Anthony asintió con la cabeza a manera de gratitud —le avisaré a ese insistente hombre el lugar y la hora de nuestra reunión —se alejó un poco.
—Y dígame señor Graham, ¿cuánto tiempo planea quedarse en los Estados Unidos?
—El necesario para que el señor Brower solucione sus problemas —lo miró
—¡Mmm! ya veo — ¿Le aconsejó que vendiera los edificios?
—No —respondió el joven castaño
—Listo —Anthony regresó a ellos —estará aquí en tres horas
—Perfecto —musitó Terrence mirando su reloj —ya es hora. ¿Viene con nosotros licenciado Ardley?
—Claro —respondió el hombre mayor poniéndose en marcha.
**********
—Por favor, podrían quitarse los zapatos para que no estropeen el piso —decía Patty con voz suplicante. —Ay por Dios del cielo Flammy si las cortinas estaban corridas era precisamente para que no ensuciaran mis espejos.
—Eres una exagerada Patty —protestó Archie mientras daba un sorbo a su tasa de humeante café —¡ups! —musitó cuando trastabilló y el resto del líquido terminó en brillante piso de madera
—¡Maldición! —gritó Patty roja de coraje —¿Por que demonios propuse que la reunion se llevara a cabo aquí?
—Quizás por que quieres impresionar al asesor del señor Brower —respondió Mark sonriendo.
—Cierra el pico o te juro que una palabra más, te lo cerraré yo misma
—Tranquila Patty —intervino Stair —tan pronto terminé la reunión te ayudaremos a limpiar tu salón —le guiñó un ojo para tranquilizarla —¿verdad que lo haremos vecinos?
—Si —respondieron todos al unísono —el piso quedará tan limpio que podrás ver tu propio reflejo en él.
—Hasta no ver no creer.
—¿En dónde he leído eso? —Annie se acercó a ella y palmeó su hombro —Ah si! Tomás el apóstol dijo que hasta que no viera con sus propios ojos a Jesus y metiera su mano en el costado no creería ¿no es así hermana María?
—Así es —respondió la religiosa mujer
—Bueno, bueno —Stair alzó la voz —dejemos esta pequeña disputa para mas tarde por ahora centrémonos en la reunión
—¿Que has dicho? —Annie abrió los ojos como platos. ¿Su vecino había dicho lo que escuchó que dijo o lo había imaginado solamente?
—Lo que escuchaste —respondió Stair con seriedad.
—Oye Stair ¿desde cuando eres un depravado? ¿Cómo te atreves a decir esas cosas frente a unas damas? —Negó con la cabeza —que vergüenza —se acerco a Patty —no le hagas caso a ese cuatro ojos, Patricia, es un patán sin una pizca de educación —torció los labios.
—¿De que demonios hablas?
—Acabas de decir que dejáramos a la pequeña puta para mas tarde....
Todos comenzaron a reír, sin duda alguna el problema de sordera de Annie había hecho de las suyas una vez mas. No entendían como un chica con problemas auditivos se había convertido en un prodigio de la música... bueno, Mozart también lo fue, era probable que esta fuera otra de sus vidas.
—Diablos Annie, deberías planear una visita a tu otorrinolaringólogo lo mas pronto posible, tal parece que los audífonos de tus oídos necesitan ser calibrados o de plano tu problema auditivo va de mal en peor —dijo Patty pegada a su oído cuando finalmente dejó de reír —Stair ha dicho pequeña disputa.
—No los tengo puesto —respondió avergonzada.
—¡Ah! Eso lo explica todo. Mas te vale que te los pongas ahora mismo o mal entenderás todo lo que se hable durante la reunión —Patty se dirigió a ella usando el lenguaje de señas.
—De acuerdo —respondió Annie colocándose el aparato en su oido izquierdo.
—¡Shhhh! silencio ya están aquí —dijo Archie tras atisbar por la ranura de la puerta.
—Buenas tardes.
—Buenas tardes —respondieron todos al unísono con recelo.
Tras las presentaciones respectivas, Anthony Brower comenzó a relatar el plan que tenía, el cual era favorable para todos.
—¿Que garantía tenemos que no es una trampa para sacarnos de aquí solamente?
—Tienen mi palabra —respondió Terrence
—Su palabra —bufó Archie
—Eso debería bastarle y sobrarle —replicó Terrence esforzándose por sonar gentil, aunque por dentro estaba que hervía de rabia. ¿Cómo demonios se atrevía aquel insolente a dudar de su palabra? En el mundo de la mafia, su palabra valía mas que el oro refinado.
—¿Tiene usted una idea de cuántas veces nos han engañado? Por qué íbamos a creerle precisamente a usted —replicó Archie con prepotencia.
—No tengo idea con que tipo de personas han tratado en el pasado, pero les aseguro que yo soy muy diferente —respondió Terry de la mis forma.
—Si claro, tan diferente que quieren echarnos de nuestro hogar —replicó Annie.
—Escuchen —Terrence apretó la mandíbula. Le estaba resultando difícil ser amable con aquel grupo de personas —solo tienen dos opciones, creer en la propuesta del señor Brower o no hacerlo, pero tengan la seguridad que si eligen la segunda opción los afectados serán ustedes, así que les aconsejo que piensen bien cuál será la elección que harán porque no habrá una segunda oportunidad.
Gracias Por leer