Destino
Capítulo 2
"Yo quería pasar el tiempo con tus ojos viéndome.
Con las ganas de quedarme así abrazandote.
Y parar aquel momento cada vez que tu te ibas.
Yo quería, si quería."
Yo quería/ Cristian Castro
La mansión en Florida era hermosa, e inmensa, el Señor Graham dispuso que la chica no sería tratada como su enfermera personal solamente, era su invitada, y como tal tenía su habitación de huésped, al día siguiente de su llegada se pusieron a trabajar, él le relataba lo que ella escribía en la pequeña libreta, y que mas tarde redactaba en la máquina de escribir, desde aquel día ella conoció por su viva voz lo que aquella Mujer significó en su vida, había leído parte de la historia, ahora escucharlo le dejaba sin lugar a dudas el Gran Amor que sintió por ella:
- Alguna vez se ha enamorado Escritora?- ella sonrió con nostalgia
- Hace unos años por primera vez… aunque fue unilateral creo yo!-
- Suele suceder, enamorarse es fácil, basta con admirar a alguien, con ver lo que ni siquiera ese alguien vé en sí mismo, el enamoramiento suele ser fugaz, solo si se alimenta de Esperanza se transforma en Amor- suspiro, el aire le daba una atmósfera de Nostalgia al lugar.
- Cuando murió mi esposa, yo no tuve más remedio que esperar a que aquel escándalo pasará, debía borrar cualquier cosa que entorpeciera mi Vida en mi regreso a América, tuve que quedarme un año más en Inverness, mi pequeño Robert me ayudó a soportar aquella crisis, aislados del mundo puesto no debía quedar huella de aquel escándalo, a mi regreso encontré solo ruinas de lo que esperaba edificar…!- sus apagados ojos brillaron por las lágrimas que amenazaban con salir.
- Si bien Hattaway fue quien me apoyo como siempre, era imposible volver a los escenarios, yo no me daría por vencido y fue así que regrese, ya no en presencia, las obras que de puño y letras había recopilado me regresaron a los escenarios, el público se encargo de regresarme el éxito. Mi primer impulso al regresar fue buscarla, pero nadie en Chicago sabía de ella, recurrí a William su tutor, pero hacia unas semanas había partido a África, solo! Entonces decidí buscarla en aquel lugar donde ella se crío, sabía con seguridad que allí estaría…!- un nudo en la garganta lo detuvo y dando un hondo suspiro continuó:
- Aquella casa hogar no había cambiado mucho desde la primera y última vez que estuve allí, desde el camino podía verse la colina favorita de “Ella”, comenzaba el otoño, y aquel viejo árbol parecía resistirse a la caída de sus hojas, tampoco yo me resistí, antes de visitar aquel hogar, subí hasta lo alto de aquella colina, donde el viento azotaba con mas fuerza y se respiraba cierta melancolía, era como un aviso, mi corazón lo presentía, saqué de mi abrigo aquella vieja armónica, sabía que si ella escuchaba aquella vieja melodía sin duda iría a mi… la melodía terminó y a lo lejos miré a aquellos niños, y al Par de Mujeres que tanto la Amaban, ambas enjugaban sus lágrimas, entonces el frío heló aún más mis cuerpo, cuando me dí la vuelta para ir a su encuentro la miré… era una cruz blanca con flores frescas… y en la inscripción el Nombre de la única mujer que Amé y me Amó…!- ya no pudo continuar, lloraba en silencio, apretaba sus ojos y la chica lloró con él, se quedaron largo rato en silencio, solo los sollozos se escucharon, ella no se atrevió a indagar más, y él no volvió a hablar más al respecto, era una forma de guardar luto a aquel Gran Amor!. Lo único que agregó la dejo sin palabras:
- No soy para nada bueno Escritora, Dios y el Destino me han privado de personas que he Amado, todas ellas a temprana edad, y yo sigo aquí… espero que mi estancia en esta vida tenga algún propósito, o será que no tengo cabida en el paraíso? Tan solo espero que llegué el día de volver a reunirme con “ella” se lo debo!-
El resto de la tarde él le pidió que leyera el resto de su manuscrito, ahí estaba la reseña de todas y cada una de sus obras y guiones de película, cada una tenía una historia, y en cada una había un rastro de ella, de lo que significó aquel gran Amor. Había pasado una semana de su llegada a Florida, y él le anunció:
- Haz trabajado bastante “Escritora”- ella sonrió, realmente estaba sumergida en su trabajo, y lo disfrutaba
- Tendrás libre una semana, para que hagas lo que te plazca..- ella se sorprendió
- Oh no Señor Graham! Realmente disfruto lo que hago..- él la interrumpió
- Esta noche llegan mis Bisnietos, y quiero disfrutar su presencia, hace tiempo que no tengo ese privilegio, son lo que más Amo en esta vida!- ella no tuvo más remedio que aceptar, si bien era su empleada y su huésped, sabía que debía tomar distancia a la permanencia de sus familiares, nadie debía saber que el Anciano estaba haciendo su Biografía, Joseph le hizo esa recomendación especial, a ojos de la servidumbre y de los demás ella sería solo la enfermera, y una especie de cuidadora. Esa noche tal como él anciano lo predijo llegaron sus Bisnietos:
Terry el mayor era el vivo retrato de su “ Abis” como él cariñosamente lo llamaba, el chico tenía el mismo carácter y gustos del hombre, aunque sus Padres no estaba muy de acuerdo, Terry debía seguir la estirpe y algún día se haría cargo de los negocios de la Familia. El Chico brillaban en todo lo que hacía, estaba en la Universidad, dedicado a sus estudios, aunque amaba la Literatura y la actuación igual que su Bisabuelo, sus padres nunca lo apoyaron en eso, “ Era una pérdida de tiempo” decían, a pesar de eso en su época de preparatoria estuvo en el taller de Literatura, tenia el don de la actuación era algo que le venía en la sangre, su Padre le había condicionado eso, y él fue el mejor en su Generación, así pudo darse un tiempo para hacer lo que tanto le gustaba, solía encerrarse en su recamara y hacer dos de sus pasatiempos favoritos, leer obras literarias y escuchar Rock. Su habitación era enorme, tenía un par de libreros en los cuales había una gran colección de Obras literarias, y libros de Negocios además una pequeña habitación a prueba de ruidos exteriores para poder escuchar sus discos favoritos, de los que también tenía una gran colección, era un Apasionado de ambas cosas. Aunque tenía más de un año sin verlo, los estudios en Harvard lo había tenido ocupado, la última vez que estuvo de visita lo sintió cambiado, se había vuelto tan “practico” su apariencia era la de un hombre serio, ya no llevaba consigo los walkman, se vestía mas formalmente y no hablaba con la misma pasión de la poesía, sus temas de conversación ahora eran sobre negocios, y sobre aquella novia Rose, que se le había impuesto, y que parecía ahora “agradarle” el anciano solía sacarle la vuelta, sentía que su Terry estaba siendo envuelto por el tema de la riqueza, y de los gustos vánales.
Antonie o Tonny como era llamado Cariñosamente ( porque su Bisabuelo así lo dispuso ) era un chico un tanto distraído, él gustaba de los video juegos, no era un alumno ejemplar, aunque su hermano Mayor se había esforzaba por enseñarle; ellos se Adoraban, el chico tenia el cabello castaño claro y los ojos azules, era 4 años menor que su hermano, aunque coincidieron en el colegio, había años de diferencia, él estaba Orgulloso de Terry, era eso lo que le daba Popularidad entre las chicas: presumir que era su Hermano!
Ese Año había sido tedioso para Terry, la Universidad era siempre estudiar, había terminado aquel antepenúltimo semestre cansado, pero como siempre con los mejores promedios, así que sus Padres no tuvieron más remedio que darle permiso de ir a pasar sus vacaciones junto a su “Abis” él y Tonny tomaron el primer vuelo para viajar de inmediato a Florida, amaban la compañía del Anciano y pasar esos días en la playa. Llegaron muy entrada la noche, y ambos aunque cansados corrieron a la habitación del Hombre, que permanecía despierto esperándolos, se abrazaron, era ya una costumbre, nada los amedrentaba ni siquiera que a Celine su Madre no le parecía del todo, fue algo que conservaron desde que tuvieron uso de razón, él tocó el rostro de ambos, aunque no podía verlos del todo conocía los rasgos de ambos, y se guiaba por las voces, Amaba a sus Bisnietos tanto como ellos a él, solamente hablaron unos minutos
- Vayan a descansar, ya habrá tiempo mañana de charlar, Tonny tienes mucho que contarme, seguramente ya será tu Novia esa chica: Kelly…? O Kenny… o definitivamente estoy perdido?- los tres rieron a carcajadas
- Andas algo atrasado de noticias Abis, mi Hermanito ahora le dio por perseguir Chicas mayores que él..!-
- Oye!! Sigues con eso?! Además no es mucho mayor que Yo solo unos meses..!!- reía nervioso.
Se despidieron, estaban agotados, y querían descansar, tenían pensado disfrutar a lo grande aquellas 5 semanas.
Al día siguiente ambos jóvenes desayunaron con el hombre, Tonny estaba ansioso por salir a pasear y encontrarse con amigos, mientras que Terry disfrutaba su desayuno tranquilamente,
- Ya te deshiciste de la coleta?- se dirigió al castaño, el se tocó el cabello
- Así es “Abis” mi carrera requiere seriedad y..-
- La apariencia no es lo importante, eres un hombre de temple, y a pesar que haz cambiado en este último año, sigues escuchándote como mi Autor favorito!- Le guiñó un ojo, él sonrió, era imposible adoptar esa imagen seria y pulcra que venía manejando, el Anciano era para el una figura imponente, mucho más que la de su padre. Tonny aprovecho que su hermano era el centro de atención del hombre, apresuró el vaso de jugo y se despidió argumentando que iría a ver a sus amigos, ellos siguieron en la charla de sobre mesa
- Abis, mi Padre me contó sobre tu cirugía, sabes realmente los riesgos?- él lo interrumpió
- Mira Terry, no quiero terminar el resto de mi vida sin disfrutar de la belleza de la vida! Si bien ya estoy cansado, quiero hacer este último intento, mi vista no quedará como la tuya, pero por lo menos podré con la ayuda de mis lentes leer mis queridas obras!—el chico se sintió realmente apenado, había estado tan sumergido en sus estudios en sus cosas que había hecho de lado su aficiones y costumbre, una de ella era pasar tiempo con él anciano
- Pues para que no pierdas tus costumbre y aficiones te invito a nuestro sitio favorito, y prometo leerte lo que tú quieras!- ese hombre significaba mucho para el castaño, habia un lazo irrompible que los unía
Llegaron a aquel chalet, y tal como lo prometió el chico le leyó varios poemas, conservaba esa pasión, y los envolvió una atmósfera de Amor, leyó Madrigal de Amado Nervo, y ambos recordaron a una mujer de ojos verdes, para uno su gran Amor, para él otro aquella chica a quien besó por primera vez, a quién él guardo en su corazón, como su primer amor
- Te haz quedado en silencio Terry, alguien rondó en tu mente con este poema?- sonrió pícaro, él se puso de pie, mirando hacia el mar
- Si Abis, existió alguien que se me vino a la mente con estas líneas..-
- Creo que no hablas de Rose tu novia, me equivoco?-
- No, no es de ella, es una Chica de la preparatoria, era… algo especial!... solía verla, sobre todo el último semestre… era apasionada de la literatura, y escribía muy bien!... tenía el cabello encrespado, solía verse tan lindo cuando lo acomodaba y definía sus rizos, a mi me gustaba verlo libre, sin esa coleta, llevaba el uniforme de forma diferente a las demás, ni tan corto, ni tan largo, no iba ceñido a su cuerpo, pero denotaba su figura… bien torneada, delgada, no usaba tanto maquillaje, pero sus mejillas y sus labios estaban siempre nacarados, y sus ojos…- lanzó un suspiro – eran de un Verde intenso, como si pudiera ver dos Esmeraldas…!- El anciano escuchaba la pasión de su muchacho, así se sintió el una vez con su Gran Amor, sintió que él la había descrito
- Y qué pasó con ella?- él lanzó otro suspiro
- No lo sé, me fui a Harvard, me absorbió el estudio, no pude regresar por mucho tiempo a Chicago.. creo que… espero más bien, que siga haciendo lo que tanto le gustaba..-
- Terry : ¿que sientes por Rose? A penas si la conozco, pero si mal no recuerdo, tú y ella no tenía mucho en común, y ahora están en una relación. – cuestionó
- Es una Chica lista, tiene muy buenos promedios, es agradable, me ha presentado a muchos conocidos del medio, sus padres y los míos tienen los mismos intereses, y ella es bonita, elegante y fina-
- Me estas hablando de tu novia? O de la afgana que tu Madre adquirió hace unos meses?- soltó una carcajada
- Abis!!- también río divertido
- Busca a ojos verdes Terry!! El Amor es Pasión, no posesión! No confundas..!-
- Abis, yo.. ella me gusta, es mi primer novia formal, y creo que sería una buena esposa.. bueno, estamos ligados por los negocios…- el anciano interrumpió
- Hace días le hice a alguien la misma pregunta, fíjate quien viene a tu mente y no me contestes: te haz enamorado realmente de alguien?- el castaño pasó saliva, la recordó a ella, a aquella rubia, a quien una vez guardó en su mente como: Su Primer Amor de Verdad.
- La Vida, no nos presenta dos veces a las personas, no veas el deber, busca lo que te llene como persona, que no deje espacios, estas tan metido en tu carrera que haz echo a un lado lo que te llena de Vida, no quiero que sientas que quiero distraerte, tan solo quiero que mi Bis Nieto, sea un hombre pleno!!- El Chico lo abrazó, amaba a ese hombre, y las más grandes lecciones de su corta vida las había tomado de él. El hombre se aparto conmovido.
- Oye, no pude darte tu regalo, te fuiste de repente a Harvard!- metió la mano a su pantalón y le extendió aquellas llaves:
- El porche ha estado mucho tiempo sin moverse, temo que vaya a dañarse ahí en el garaje sin que lo conduzca su nuevo dueño!- el castaño estaba feliz, era el auto que tanto le gustaba, su Abis lo había llevado a pasear en él muchas veces cuando era un niño y solía decirle que un día sería suyo, ese día había llegado!
- Anda, ve a dar una vuelta! Vibra con él – aceptó gustoso, fue a su habitación y se puso aquellos jeans que tenía tiempo sin usar, cogio sus lentes de sol y bajó al garaje, estaba impecable el auto, sin perder tiempo lo hecho a andar, bajo la capota y salió de la mansión, tomó la carretera, quería sentirse libre, como hacía mucho no se sentía.
Candy por su parte, pasó parte de la mañana terminando su trabajo, le era tan difícil desprenderse, estaba realmente entusiasmada con ello, aunque recordó lo que Graham le dijo y decidió dar por terminado, desayuno y se dio una ducha, había llevado ropa suficiente, saco aquella falda corta, su blusa hombliguera y sus tenis, se hizo una coleta y se amarró aquel medio paño en la cien, dejó su fleco alborotado y se puso sus pulseras que había guardado para poder usar apropiadamente su filipina de trabajo, tomó una bolsa y la puso cruzada en su cuerpo, a esa hora el chófer solía ir por los víveres, así que ella le pidió que la acercará a la bahía, una vez allí él le comentó que llamará a la residencia cuando decidiera regresar para ir por ella, eran instrucciones del Señor, ella se sentía abrumada, no estaba acostumbrada, pero acepto.
Caminó por aquel lugar, había muchos restaurantes, lugares de moda llenos de jóvenes, ella solo deseaba encontrar aquel lugar que una vez mencionara una de sus compañeras de clase, era una explanada donde habían personas pintando cuadros, vendían todo tipo de cosas, pulseras, dijes, todos elaborados al aire libre, además habían vendedores de libros antiguos, eso la motivaba a encontrar aquel lugar, le preguntó a un par de lugareños, una vez obtenida la ruta, se dirigió hacia el lugar. Los transeúntes volteaban a mirarla, si bien todos los chicos vestían de esa forma, Candy solía llamar la atención.
Hubo alguien que la miró, a pesar de ir a cierta velocidad, era Terry que miró a lo lejos aquella figura, era imposible no fijarse en aquellas piernas, cuando estuvo más cerca de ella sus ojos se abrieron más y su corazón latió con fuerza, quiso detenerse pero había autos transitando tras el de él, empezó a sudar: Era a caso, ella? ¿Realmente la estaba imaginando después de haberla recordado aquella mañana? ¿Era Candy? ¿Acaso el Destino la ponía de nuevo frente a él?
Continuará…
Capítulo 2
"Yo quería pasar el tiempo con tus ojos viéndome.
Con las ganas de quedarme así abrazandote.
Y parar aquel momento cada vez que tu te ibas.
Yo quería, si quería."
Yo quería/ Cristian Castro
La mansión en Florida era hermosa, e inmensa, el Señor Graham dispuso que la chica no sería tratada como su enfermera personal solamente, era su invitada, y como tal tenía su habitación de huésped, al día siguiente de su llegada se pusieron a trabajar, él le relataba lo que ella escribía en la pequeña libreta, y que mas tarde redactaba en la máquina de escribir, desde aquel día ella conoció por su viva voz lo que aquella Mujer significó en su vida, había leído parte de la historia, ahora escucharlo le dejaba sin lugar a dudas el Gran Amor que sintió por ella:
- Alguna vez se ha enamorado Escritora?- ella sonrió con nostalgia
- Hace unos años por primera vez… aunque fue unilateral creo yo!-
- Suele suceder, enamorarse es fácil, basta con admirar a alguien, con ver lo que ni siquiera ese alguien vé en sí mismo, el enamoramiento suele ser fugaz, solo si se alimenta de Esperanza se transforma en Amor- suspiro, el aire le daba una atmósfera de Nostalgia al lugar.
- Cuando murió mi esposa, yo no tuve más remedio que esperar a que aquel escándalo pasará, debía borrar cualquier cosa que entorpeciera mi Vida en mi regreso a América, tuve que quedarme un año más en Inverness, mi pequeño Robert me ayudó a soportar aquella crisis, aislados del mundo puesto no debía quedar huella de aquel escándalo, a mi regreso encontré solo ruinas de lo que esperaba edificar…!- sus apagados ojos brillaron por las lágrimas que amenazaban con salir.
- Si bien Hattaway fue quien me apoyo como siempre, era imposible volver a los escenarios, yo no me daría por vencido y fue así que regrese, ya no en presencia, las obras que de puño y letras había recopilado me regresaron a los escenarios, el público se encargo de regresarme el éxito. Mi primer impulso al regresar fue buscarla, pero nadie en Chicago sabía de ella, recurrí a William su tutor, pero hacia unas semanas había partido a África, solo! Entonces decidí buscarla en aquel lugar donde ella se crío, sabía con seguridad que allí estaría…!- un nudo en la garganta lo detuvo y dando un hondo suspiro continuó:
- Aquella casa hogar no había cambiado mucho desde la primera y última vez que estuve allí, desde el camino podía verse la colina favorita de “Ella”, comenzaba el otoño, y aquel viejo árbol parecía resistirse a la caída de sus hojas, tampoco yo me resistí, antes de visitar aquel hogar, subí hasta lo alto de aquella colina, donde el viento azotaba con mas fuerza y se respiraba cierta melancolía, era como un aviso, mi corazón lo presentía, saqué de mi abrigo aquella vieja armónica, sabía que si ella escuchaba aquella vieja melodía sin duda iría a mi… la melodía terminó y a lo lejos miré a aquellos niños, y al Par de Mujeres que tanto la Amaban, ambas enjugaban sus lágrimas, entonces el frío heló aún más mis cuerpo, cuando me dí la vuelta para ir a su encuentro la miré… era una cruz blanca con flores frescas… y en la inscripción el Nombre de la única mujer que Amé y me Amó…!- ya no pudo continuar, lloraba en silencio, apretaba sus ojos y la chica lloró con él, se quedaron largo rato en silencio, solo los sollozos se escucharon, ella no se atrevió a indagar más, y él no volvió a hablar más al respecto, era una forma de guardar luto a aquel Gran Amor!. Lo único que agregó la dejo sin palabras:
- No soy para nada bueno Escritora, Dios y el Destino me han privado de personas que he Amado, todas ellas a temprana edad, y yo sigo aquí… espero que mi estancia en esta vida tenga algún propósito, o será que no tengo cabida en el paraíso? Tan solo espero que llegué el día de volver a reunirme con “ella” se lo debo!-
El resto de la tarde él le pidió que leyera el resto de su manuscrito, ahí estaba la reseña de todas y cada una de sus obras y guiones de película, cada una tenía una historia, y en cada una había un rastro de ella, de lo que significó aquel gran Amor. Había pasado una semana de su llegada a Florida, y él le anunció:
- Haz trabajado bastante “Escritora”- ella sonrió, realmente estaba sumergida en su trabajo, y lo disfrutaba
- Tendrás libre una semana, para que hagas lo que te plazca..- ella se sorprendió
- Oh no Señor Graham! Realmente disfruto lo que hago..- él la interrumpió
- Esta noche llegan mis Bisnietos, y quiero disfrutar su presencia, hace tiempo que no tengo ese privilegio, son lo que más Amo en esta vida!- ella no tuvo más remedio que aceptar, si bien era su empleada y su huésped, sabía que debía tomar distancia a la permanencia de sus familiares, nadie debía saber que el Anciano estaba haciendo su Biografía, Joseph le hizo esa recomendación especial, a ojos de la servidumbre y de los demás ella sería solo la enfermera, y una especie de cuidadora. Esa noche tal como él anciano lo predijo llegaron sus Bisnietos:
Terry el mayor era el vivo retrato de su “ Abis” como él cariñosamente lo llamaba, el chico tenía el mismo carácter y gustos del hombre, aunque sus Padres no estaba muy de acuerdo, Terry debía seguir la estirpe y algún día se haría cargo de los negocios de la Familia. El Chico brillaban en todo lo que hacía, estaba en la Universidad, dedicado a sus estudios, aunque amaba la Literatura y la actuación igual que su Bisabuelo, sus padres nunca lo apoyaron en eso, “ Era una pérdida de tiempo” decían, a pesar de eso en su época de preparatoria estuvo en el taller de Literatura, tenia el don de la actuación era algo que le venía en la sangre, su Padre le había condicionado eso, y él fue el mejor en su Generación, así pudo darse un tiempo para hacer lo que tanto le gustaba, solía encerrarse en su recamara y hacer dos de sus pasatiempos favoritos, leer obras literarias y escuchar Rock. Su habitación era enorme, tenía un par de libreros en los cuales había una gran colección de Obras literarias, y libros de Negocios además una pequeña habitación a prueba de ruidos exteriores para poder escuchar sus discos favoritos, de los que también tenía una gran colección, era un Apasionado de ambas cosas. Aunque tenía más de un año sin verlo, los estudios en Harvard lo había tenido ocupado, la última vez que estuvo de visita lo sintió cambiado, se había vuelto tan “practico” su apariencia era la de un hombre serio, ya no llevaba consigo los walkman, se vestía mas formalmente y no hablaba con la misma pasión de la poesía, sus temas de conversación ahora eran sobre negocios, y sobre aquella novia Rose, que se le había impuesto, y que parecía ahora “agradarle” el anciano solía sacarle la vuelta, sentía que su Terry estaba siendo envuelto por el tema de la riqueza, y de los gustos vánales.
Antonie o Tonny como era llamado Cariñosamente ( porque su Bisabuelo así lo dispuso ) era un chico un tanto distraído, él gustaba de los video juegos, no era un alumno ejemplar, aunque su hermano Mayor se había esforzaba por enseñarle; ellos se Adoraban, el chico tenia el cabello castaño claro y los ojos azules, era 4 años menor que su hermano, aunque coincidieron en el colegio, había años de diferencia, él estaba Orgulloso de Terry, era eso lo que le daba Popularidad entre las chicas: presumir que era su Hermano!
Ese Año había sido tedioso para Terry, la Universidad era siempre estudiar, había terminado aquel antepenúltimo semestre cansado, pero como siempre con los mejores promedios, así que sus Padres no tuvieron más remedio que darle permiso de ir a pasar sus vacaciones junto a su “Abis” él y Tonny tomaron el primer vuelo para viajar de inmediato a Florida, amaban la compañía del Anciano y pasar esos días en la playa. Llegaron muy entrada la noche, y ambos aunque cansados corrieron a la habitación del Hombre, que permanecía despierto esperándolos, se abrazaron, era ya una costumbre, nada los amedrentaba ni siquiera que a Celine su Madre no le parecía del todo, fue algo que conservaron desde que tuvieron uso de razón, él tocó el rostro de ambos, aunque no podía verlos del todo conocía los rasgos de ambos, y se guiaba por las voces, Amaba a sus Bisnietos tanto como ellos a él, solamente hablaron unos minutos
- Vayan a descansar, ya habrá tiempo mañana de charlar, Tonny tienes mucho que contarme, seguramente ya será tu Novia esa chica: Kelly…? O Kenny… o definitivamente estoy perdido?- los tres rieron a carcajadas
- Andas algo atrasado de noticias Abis, mi Hermanito ahora le dio por perseguir Chicas mayores que él..!-
- Oye!! Sigues con eso?! Además no es mucho mayor que Yo solo unos meses..!!- reía nervioso.
Se despidieron, estaban agotados, y querían descansar, tenían pensado disfrutar a lo grande aquellas 5 semanas.
Al día siguiente ambos jóvenes desayunaron con el hombre, Tonny estaba ansioso por salir a pasear y encontrarse con amigos, mientras que Terry disfrutaba su desayuno tranquilamente,
- Ya te deshiciste de la coleta?- se dirigió al castaño, el se tocó el cabello
- Así es “Abis” mi carrera requiere seriedad y..-
- La apariencia no es lo importante, eres un hombre de temple, y a pesar que haz cambiado en este último año, sigues escuchándote como mi Autor favorito!- Le guiñó un ojo, él sonrió, era imposible adoptar esa imagen seria y pulcra que venía manejando, el Anciano era para el una figura imponente, mucho más que la de su padre. Tonny aprovecho que su hermano era el centro de atención del hombre, apresuró el vaso de jugo y se despidió argumentando que iría a ver a sus amigos, ellos siguieron en la charla de sobre mesa
- Abis, mi Padre me contó sobre tu cirugía, sabes realmente los riesgos?- él lo interrumpió
- Mira Terry, no quiero terminar el resto de mi vida sin disfrutar de la belleza de la vida! Si bien ya estoy cansado, quiero hacer este último intento, mi vista no quedará como la tuya, pero por lo menos podré con la ayuda de mis lentes leer mis queridas obras!—el chico se sintió realmente apenado, había estado tan sumergido en sus estudios en sus cosas que había hecho de lado su aficiones y costumbre, una de ella era pasar tiempo con él anciano
- Pues para que no pierdas tus costumbre y aficiones te invito a nuestro sitio favorito, y prometo leerte lo que tú quieras!- ese hombre significaba mucho para el castaño, habia un lazo irrompible que los unía
Llegaron a aquel chalet, y tal como lo prometió el chico le leyó varios poemas, conservaba esa pasión, y los envolvió una atmósfera de Amor, leyó Madrigal de Amado Nervo, y ambos recordaron a una mujer de ojos verdes, para uno su gran Amor, para él otro aquella chica a quien besó por primera vez, a quién él guardo en su corazón, como su primer amor
- Te haz quedado en silencio Terry, alguien rondó en tu mente con este poema?- sonrió pícaro, él se puso de pie, mirando hacia el mar
- Si Abis, existió alguien que se me vino a la mente con estas líneas..-
- Creo que no hablas de Rose tu novia, me equivoco?-
- No, no es de ella, es una Chica de la preparatoria, era… algo especial!... solía verla, sobre todo el último semestre… era apasionada de la literatura, y escribía muy bien!... tenía el cabello encrespado, solía verse tan lindo cuando lo acomodaba y definía sus rizos, a mi me gustaba verlo libre, sin esa coleta, llevaba el uniforme de forma diferente a las demás, ni tan corto, ni tan largo, no iba ceñido a su cuerpo, pero denotaba su figura… bien torneada, delgada, no usaba tanto maquillaje, pero sus mejillas y sus labios estaban siempre nacarados, y sus ojos…- lanzó un suspiro – eran de un Verde intenso, como si pudiera ver dos Esmeraldas…!- El anciano escuchaba la pasión de su muchacho, así se sintió el una vez con su Gran Amor, sintió que él la había descrito
- Y qué pasó con ella?- él lanzó otro suspiro
- No lo sé, me fui a Harvard, me absorbió el estudio, no pude regresar por mucho tiempo a Chicago.. creo que… espero más bien, que siga haciendo lo que tanto le gustaba..-
- Terry : ¿que sientes por Rose? A penas si la conozco, pero si mal no recuerdo, tú y ella no tenía mucho en común, y ahora están en una relación. – cuestionó
- Es una Chica lista, tiene muy buenos promedios, es agradable, me ha presentado a muchos conocidos del medio, sus padres y los míos tienen los mismos intereses, y ella es bonita, elegante y fina-
- Me estas hablando de tu novia? O de la afgana que tu Madre adquirió hace unos meses?- soltó una carcajada
- Abis!!- también río divertido
- Busca a ojos verdes Terry!! El Amor es Pasión, no posesión! No confundas..!-
- Abis, yo.. ella me gusta, es mi primer novia formal, y creo que sería una buena esposa.. bueno, estamos ligados por los negocios…- el anciano interrumpió
- Hace días le hice a alguien la misma pregunta, fíjate quien viene a tu mente y no me contestes: te haz enamorado realmente de alguien?- el castaño pasó saliva, la recordó a ella, a aquella rubia, a quien una vez guardó en su mente como: Su Primer Amor de Verdad.
- La Vida, no nos presenta dos veces a las personas, no veas el deber, busca lo que te llene como persona, que no deje espacios, estas tan metido en tu carrera que haz echo a un lado lo que te llena de Vida, no quiero que sientas que quiero distraerte, tan solo quiero que mi Bis Nieto, sea un hombre pleno!!- El Chico lo abrazó, amaba a ese hombre, y las más grandes lecciones de su corta vida las había tomado de él. El hombre se aparto conmovido.
- Oye, no pude darte tu regalo, te fuiste de repente a Harvard!- metió la mano a su pantalón y le extendió aquellas llaves:
- El porche ha estado mucho tiempo sin moverse, temo que vaya a dañarse ahí en el garaje sin que lo conduzca su nuevo dueño!- el castaño estaba feliz, era el auto que tanto le gustaba, su Abis lo había llevado a pasear en él muchas veces cuando era un niño y solía decirle que un día sería suyo, ese día había llegado!
- Anda, ve a dar una vuelta! Vibra con él – aceptó gustoso, fue a su habitación y se puso aquellos jeans que tenía tiempo sin usar, cogio sus lentes de sol y bajó al garaje, estaba impecable el auto, sin perder tiempo lo hecho a andar, bajo la capota y salió de la mansión, tomó la carretera, quería sentirse libre, como hacía mucho no se sentía.
Candy por su parte, pasó parte de la mañana terminando su trabajo, le era tan difícil desprenderse, estaba realmente entusiasmada con ello, aunque recordó lo que Graham le dijo y decidió dar por terminado, desayuno y se dio una ducha, había llevado ropa suficiente, saco aquella falda corta, su blusa hombliguera y sus tenis, se hizo una coleta y se amarró aquel medio paño en la cien, dejó su fleco alborotado y se puso sus pulseras que había guardado para poder usar apropiadamente su filipina de trabajo, tomó una bolsa y la puso cruzada en su cuerpo, a esa hora el chófer solía ir por los víveres, así que ella le pidió que la acercará a la bahía, una vez allí él le comentó que llamará a la residencia cuando decidiera regresar para ir por ella, eran instrucciones del Señor, ella se sentía abrumada, no estaba acostumbrada, pero acepto.
Caminó por aquel lugar, había muchos restaurantes, lugares de moda llenos de jóvenes, ella solo deseaba encontrar aquel lugar que una vez mencionara una de sus compañeras de clase, era una explanada donde habían personas pintando cuadros, vendían todo tipo de cosas, pulseras, dijes, todos elaborados al aire libre, además habían vendedores de libros antiguos, eso la motivaba a encontrar aquel lugar, le preguntó a un par de lugareños, una vez obtenida la ruta, se dirigió hacia el lugar. Los transeúntes volteaban a mirarla, si bien todos los chicos vestían de esa forma, Candy solía llamar la atención.
Hubo alguien que la miró, a pesar de ir a cierta velocidad, era Terry que miró a lo lejos aquella figura, era imposible no fijarse en aquellas piernas, cuando estuvo más cerca de ella sus ojos se abrieron más y su corazón latió con fuerza, quiso detenerse pero había autos transitando tras el de él, empezó a sudar: Era a caso, ella? ¿Realmente la estaba imaginando después de haberla recordado aquella mañana? ¿Era Candy? ¿Acaso el Destino la ponía de nuevo frente a él?
Continuará…