Despues de mucho tiempo lo habia convencido de tomar unas vacaciones, unas a su lado por supuesto. Albert estaba renuente pues simplemente era demasiado trabajo y responsabilidades en su nueva vida, vestia su traje dia a dia y acudia puntual a cada dia de trabajo, perdido en documentos, citas de negocios y demas.
Luisy despues de verlo ir y venir habia decidido convertirse en su secretaria, pocas veces lo veia y se sentia angustiada de que el trabajo lo estuviera absorviendo, podia decir que no era el mismo. Por ello organizo todo para aquel viaje, ella iria a su lado, pasarian momentos maravillosos juntos y volveria a encontrar al Albert cariñoso y despreocupado.
Aquel dia le dio los boletos, puso la maleta en sus manos y le explico que todo estaba cancelado en las proximas semanas, Albert apenas reacciono, tenia una adquisicion importante, ademas estaba a punto de estallar una huelga y la familia... ah la familia necesitaba de su apoyo.
- Tu lo prometiste...
- Lo siento Luisy es que tu sabes que no es tan facil.
- Todo esta listo, que te lo impide?
- Sabes que tenemos pendientes y ...
- Sabes que... ya no importa, no ire contigo, no ire a ningun lado y renuncio en este momento.
Albert la vio, era la primera vez que la veia tan enfadada, suspiro y la vio salir de la oficina dando un portazo, fue entonces que reviso su agenda, ciertamente nada era tan importante, no tanto como para perder a Luisy, a su complice, amiga, gran amor... aflojo su corbata, cerro la agenda y se sirvio a seguirla pero ella parecia caminar muy de prisa, se devolvio a la oficina por la maleta que ella le habia colocado enfrente y tomo los boletos... sabia bien a donde iria ella, tan enojada estaba que era seguro iria por sus cosas a la casa y se iria de su lado... eso no podia permitirlo.
Tomo el auto y practicamente volo hasta la casa, efectivamente ella estaba furica, con toda la razon -penso-... le sonrio y ella le volteo el rostro, solo habia una solucion y esa fue en vez de explicarle la cargo a la fuerza, la metio en el auto y bajo protesta y reniego de ella se fue al aeropuerto... no se hablaron en el camino pero al llegar el le sonrio, para el ella era como una niña y simplemente decidio complacerla aun mas, bajaron del avion, tomo un auto llegaron a un lugar aledaño a la toscana y en vez de pedirle que caminara a su lado para entrar al hotel la subio en la maleta y no la dejo bajar mientras caminaba jalando la maleta con ella arriba, aun se veia enojada, pero en realidad el supo bien que ella iba encantada...
- Ya vas a hablarme?
- No.
- Bien, entonces no te dare tu regalo de cumpleaños.
- Lo recordaste?
- Por supuesto, dijo con una sonrisa traviesa en los labios, ves aquel lugar?
- Si...
- Pues es nuestro, desde que mencionaste que querias venir a Italia y mientras hablabas de lo bello que era y que comprarias boletos de avion para venir conmigo de viaje hice preparativos para comprarlo y venir contigo.
- Me estabas escuchando?
- Siempre te escucho, parece que me pierdo en el trabajo pero siempre estoy atengo... lamento haberte hecho enojar asi, espero puedas perdonarme.
Ella se abalanzo a sus brazos ofreciendole sus labios y se olvido por un momento que estaba enojada con el.
No fue un viaje de placer, fue un cambio de vida para ambos, lo unico que Albert habia deseado hacer era terminar con todo para poder irse lejos con Luisy y ahora ya todo estaba atras...
Feliz Cumpleaños Luisy...