"Pesadilla"
By Cherry
- Quieres más ¿Eh?
Se oye la voz carrasposa de un hombre, sus iris diabólicamente oscuros intimidan, devoran a su presa mientras que sus amigos lo rodean impidiendo el paso
- ¿Por qué no hablas?
- ¿A caso no me disculpe ya? ¿¡Es que no saben con quién hablan!? Yo soy Neil, del clan Ardley
- ¡¿No me digas?!
El pelirrojo, obnubilado por el alcohol que corre por sus venas se siente envalentonado, con fuerzas para atacar a sus agresores… por lo que no entiende cómo es posible que con el simple hecho que uno de ellos lo haya tocado del brazo sus piernas flaqueen tanto
- Lo que eres es un saco de patatas, un chuletón con patas
- ¡Oh! ¿Cómo se atreven? Les aseguro que lo pagaran
- ¿Te crees muy listo, burlándote de nosotros?
- Tu desgracia fue haberte topado conmigo e interrumpirnos… si quieres seguir viviendo ¡Más vale que te quedes quieto!
El más alto de todos… el que viste de oscuro, con un colgante dorado, de líneas y formas muy extrañas, en su centro lleva una piedra negra engarzada; acerca sus manos para crear una esfera de energía, la acerca al rostro del pelirrojo, cuando una voz femenina interrumpe su magia
- ¡Esperen! Tres contra uno ¡Cobardes!
- ¡Candy!
Con voz temblorosa y la vista borrosa, un pelirrojo observa como una mujer de abrigo rojo se acerca a ellos con la indignación marcada en sus pecas
- Será mejor que te largues si no quieres que te cobren a ti también
-No sean brabucones ¡Suéltenlo!
- ¿Es que estás sorda? ¡Lárgate!
Uno de los hombres tira de su brazo, forzándola a alejarse de ahí… furiosa esta les espeta:
- ¿Quieren pelear con una chica?
Irritada, sujeta con fuerza la bandolera de su bolso y arremete contra el hombre que la sujeta, este medio atontado por el topetazo, termina de espaldas en el suelo… el más gordito de ellos tira de su brazo para retenerla, pero la rubia provecha el impulso y levanta su pierna para plantarla en su pecho, haciéndole caer junto con su otro compañero. Neil no da crédito a lo que sus ojos presencian. La voz de ella lo saca de su estado de letargo
-Neil ¡¡Corre, rápido!
Y como puede, intenta poner un pie delante de otro para salir por piernas de ese callejón. Por un par de calles va tras la mujer quien al parecer está más centrado de los dos. Media vez han logrado llegar una de las avenidas más concurridas, detienen su tropel… no está seguro si es por la adrenalina, el bajón del alcohol, o el pavor que sintió segundos antes; simplemente se siente morir, su cuerpo le duele como si sus músculos fuera de cristales y esto se rompieran en mil trozos al moverse
- ¿Ya estamos a salvo!
- No te piensas que estoy en deuda contigo, no tenías por qué meterte
- Pero ¿Qué estás diciendo?
- ¡Olvídate de esto Candy! Y no se lo vayas a contar a nadie más
Y espetando estas últimas palabras se aleja del lugar dejando tras sí a una atónita rubia… tambaleándose se dirige hasta su casa y entra a su habitación sin saludar a nadie. Pasadas las horas su cuerpo y mente se estremecen ante las imágenes tenebrosas.
No reconoce el lugar… parece una cueva o ciudad subterránea, unas luces sombrías esparcidas por algo parecido a un camino escabroso o por la ventana de una habitación vertiginosa… una figura extraña se encamina hasta él… tiene la piel arrugada, su cara tiene marcas, sus extremidades raquíticas y más largas de lo normal… camina tétricamente en su dirección y extiende sus zarpas para cogerlo… un gruñido se escucha retumbar en las paredes borrascosas… cree que quiere arrebatarle algo… un hueco donde debería ser la boca se abre dejando ver unos dientes puntiagudos y putrefactos
- Grrrr…
- ¡¡Aaahhhh!!
Se levanta sudando y sobrepasada de la emoción… se lleva una mano a su cuello, donde creía que lo sujetaban esas garras… le duele
- ¡Qué sueño más espantoso!
Se restriega el rostro con una palma, aún tiembla de miedo… con la boca pastosa, la garganta seca y la cabeza como un bombo por la resaca. Se levanta a por un vaso de agua y encuentra que la casa está en total penumbra, cuando da un par de paso por el pasillo, le da la sensación que no está solo… da otro par de pasos y algo hizo eco en la estancia, no reconoce qué provocó ese sonido… paulatinamente una luz amarilla que se divisa en el fondo se curva como si fuesen unos ojos siniestros… y cambian a un rojo… toda la piel se le enchina y el mismo miedo que experimentó minutos antes en el sueño, vuelve a sacudir su ser. Su corazón se mueve cardiaco y la voz la ha perdido… de presto se queda cegado por la luz…
- ¡Neil! ¿Qué haces despierto a esta hora?
- ¡Mierda! Elisa ¡Menudo susto me has dado!
- Pues imagina el que me has dado tú caminando a estas horas como un espectro
Le replica su hermana mientras se cierra la bata de su pijama, revisa que ningún otro ser inesperado esté merodeando por ese lugar, luego se acerca hasta él
- ¿Qué haces despierto a esta hora?
- Voy a por un vaso con agua… tú tienes toda la pinta de ir llegando de fiesta hermanita
-Hay cosas hermanito, que será mejor que no te las cuente
-Hahaha… tranquila hermana… me tiene muy sin cuidado con quien ligas o las travesuras que haces
Sigue caminando muy de mala gana mientras su hermana se cuelga de su brazo, cuando llega a la cocina y encienden la luz observa como su hermano se mueve de manera automática, cuando está por darle un mordisco a unas uvas que están sobre la encimera se percata de la mala cara que tiene su hermano.
- ¿Tú estás seguro que te encuentras bien?
El tono de voz preocupado que había utilizado la pelirroja, hizo que el joven dejara de darle vuelta a su sueño por un momento para darle una que le tranquilizara… pero al girar su rostro para ver el de Elisa, le pareció ver una sombra moverse… pestañeo un par de veces para poder enfocar mejor y es entonces que se da cuenta que ahí no hay nada.
-Sssi…
Logró decir a duras penas. Suben a sus respectivas recamaras para poder dormir, al menos es lo que él intenta. Mientras se acomoda de costado sobre su cama, escucha que una puerta rechina… un suave susurro pronuncia: Neil… Neil… Neil… Neil… Neil… se gira para saber quién le llamaba, e inevitablemente dio un saltó al ver su reflejo en el espejo… un poco más repuesto de la impresión decide levantarse… cuando se acerca hasta la cómoda con la intención de taparla, vuelve a ver la figura de un hombre con capa oscura… este ser extiende sus zarpas para poder cogerlo pero Neil grita… es entonces que se estremeces sobre su cama, despertándose de su sueño… lleva su mano para limpiarse el sudor de la frente… pero una mano negra le coge del cuello y tira de él para hundirlo sobre la cama… con sus piernas y manos se agita para poder liberarse y unas garras lo sujetan de sus tobillos, muñecas y torso… ¡Miedo! ¡Terror! ¡Pánico! ¡No quiere morir! Abre su boca como último intento en pedir auxilio, pero esta no sale…
- Aaaahhhh
Sobrepasado por el terror se levanta gritando, se sienta sobre su colchón… respira entrecortadamente y con el corazón a mil.
- No me puedo creer que esto solo sea un simple sueño…
Es de día, tembloroso se levanta, decide darse una ducha para quitarse esa sensación pegajosa, el agua corre por su cuerpo y todavía no termina de entender qué es lo que le está pasando. Mientras pasa la toalla por su cuerpo se percata de las marcas sobre su hombro izquierdo: tres dedos rojos, como si alguien le hubiese dado un golpe… entonces las luces parpadean y la puerta se cierra con un fuerte golpe por una mano invisible
- ¿Hay alguien?
Logra pronunciar mientras posa su mano por el pomo
- ¡Neil! ¿Todavía no estás listo?
- ¡Joder Elisa, no me des estos sustos!
- Pero ¿Qué te pasa? Menudo genio te gasta… anda termina de vestirte que nos están esperando para ir a la mansión de los Andrew
Con pesar termina de arreglarse mientras en su mente intenta buscar una explicación para sus extraños sueños. Una vez en la residencia en compañía de la tía abuela, los Legan disfrutan de una comida familiar ese fin de semana. Sara y Elisa disfrutan de obtener toda la atención de la matrona, para evitar que cierta rubia logre de alguna manera gane la simpatía con alguno de sus actos.
Mientras las mujeres charlan tomando el té en el salón de la abuela, Neil decide sentarse en un diván cerca del ventanal para observar el exterior… se siente cansado y la cabeza espesa… los rayos tenues acarician su figura mientras sus ojos se pierden en ese cielo lejano… se escucha unos pasos acercarse, pero él no mueve ni un músculo, no le apetece… su hermana le dice algo, pero pasa de ella… Elisa toma la mano de él para obtener su total atención
- Neil… te veo muy aburrido, juega conmigo
- Elisa, déjame en paz, no tengo ganas de nada
- ¡Anda no seas así!... este juego te va a encantar
Tira insistentemente de su brazo, pero él sigue sentado, como si estuviese pegado en su lugar… de presto Sara y Elroy están a su lado y también le piden jugar
- ¡¿Queréis dejarme en paz?! ¡He dicho que “NO”! ¿Es que no entienden?
- Es que no te pensamos dejar en paz… tendrás que jugar quiérase o no
Dijo perversamente su madre a la vez que le tomaba de la otra mano… Neil, molesta intenta soltarse de los agarres, pero ellas no le dejan, sino que le detienen con más fuerza y la acercan a su rostro
- ¡Déjenme! Elisa ¡Deja!... Aaahhhh ¿Qué haces? ¿Por qué me muerdes? Ahhhhh
Neil grita con toda su fuerza aterrado al ver cómo Elisa, su madre y la tía abuela le muerden sus brazos y arrancan los trozos de carne y se ríen en su cara
- Aaahhh… mamá ¡Noooo!
- ¡Neil! Despierta, Neil… Neil ¿Qué te pasa?
- ¡Elisaa!
Abre sus ojos como platos al sentir el cálido tacto de la mano de su hermana sobre su mejilla… su corazón late desbocado y todo su ser tiembla… del miedo
- Neil ¿Qué te pasa? Estás actuando muy extraño, me estás asustando
- Hijo ¿Te encuentras bien?
- Sí… si, no se preocupen… me habré quedado dormido y tuve un sueño…
Observa a las damas derredor de él y un presentimiento de premonición, le hizo pensar que debía salir de ahí… no sea que esas mujeres decidan jugar con él tal y como lo había soñado.
- Creo… saldré un momento… necesito despejarme
Y sin añadir más, deja la residencia Andrew y empieza a caminar sin rumbo fijo… su corazón está adolorido por esas carreras tan frenéticas a las que ha sido sometido últimamente… su mente le cuesta procesar… o mejor dicho entender qué es lo que le está pasando. Sin darse cuenta, sus pasos le han llevado por aquellas calles solitarias… lúgubres… siniestras. Se detiene justo enfrente de los escombros de la casa donde había empotrado su coche el día anterior.
Había avisado a Stewart que se había accidentado, de seguro este fue a buscar una grúa para poder sacar el vehículo de ahí. Los recuerdos vienen a su mente. Conducía a toda velocidad dando volantazos cada dos por tres. Un gato se cruza en su camino y pisa el freno con brusquedad… los neumáticos derrapan y termina estampándose con el muro de esa casa… como pudo salió de ahí y buscaba la avenida principal cuando esos tres hombres lo detuvieron diciéndole cosas que no entendía; dijo una disculpa que ni él mismo se la creía cuando intervino Candy y todo cambió.
- Lo que han hecho aquí, es algo muy peligroso
- Lo siento abuela… solo quería hablar con
Las voces llamaron la atención de Neil quien empezó a buscar el origen de estas
- ¡Torpe! No se trata de que con quién quieras hablar, sino quien hablas… espero que os hayáis protegido
- Sí abuela… solo que…
- Están aquí
- ¿Cómo?
Los dos dirigen su vista hasta donde el intruso había asomado llevado por la curiosidad; es entonces que Neil ve a una señora muy mayor, vestida de negro y con sus ojos blanquecinos se acercaba en su dirección alzando una mano como si fuese a tocarlo
- Quedaros aquí, no os mováis… quedaros aquí, no os mováis
Temeroso, el pelirrojo se queda de piedra, que el color de la pupila de esa vieja sea blanco lo ha dejado petrificado
- Lo siento señora… pero vengo solo
- No estás solo… alguien respondió al llamado de Rick y ahora camina contigo muchacho
Neil no podía abrir más sus ojos del estupor… no entendía ¿Qué estaba hablando esta mujer?
- No te muevas… “Tumele cua mè, tumele cuà ma”
- Pero ¿Qué dices? Es usted una vieja loca
- Oye ¡Mas respeto por mi madre!
Un Rick muy molesto por como Neil había tratado a su querida abuela se acerca con la intención de darle un puñetazo, pero la mujer le dice que se detenga con su mano
- Sea lo que sea, que haya respondido a tu llamada, está tras este hombre… y estoy segura que ya se le ha manifestado… puedo ver esa sombra
- Entonces hay que darle un amuleto para protegerlo
- Los amuletos ni las cruces no tendrán efecto… tendréis que mandarlo a su lugar de la misma manera que lo habéis llamado, tiene que volver a cruzar la puerta que abristeis y esta vez, luego destruirla
- ¿Otra vez?
- ¡Exacto! Hay que hacer bien lo que se hizo mal… hay que hacer bien lo que se hizo mal
- ¿Lo que se hizo mal?
Preguntó Neil confundido; ve como el otro hombre se lleva una mano al rostro como clara señal de frustración, suelta un suspiro y responde al intruso
- cuando te accidentaste en la casa, interrumpiste un rito… mis amigos y yo portábamos estos amuletos…
Levanta el colgante dorado con líneas y formas extrañas, una piedra negra en su centro, resplandece
- Por eso te perseguimos, para poder separarte de esa energía extraña antes de que cogiera más fuerza… pero esa mujer entrometida lo estropeo todo
- Pues ¿A qué esperas para quitarme eso? ¡Hazlo de una vez!
Le increpó molesto
- Es que ¿No has escuchado lo que ha dicho madre? Solo se puede si hacemos un rito… y los chicos no están
- Si lo has hecho con esos idiotas quiere decir que no es muy difícil, aquí estoy yo para hacerlo
- Oye idiota… no tienes ni la más mínima idea en lo que te estás metiendo
- ¡Ya está bien Rick! Si los chicos no están, debes de aprovechar que él se ha ofrecido… hazlo, antes de que sea demasiado tarde
- Esta bien madrecita… como tú digas
Aceptó de mala gana el hombre, viendo furioso a Neil. Quedaron que se verían en la casa de Neil en una hora y que debía preparar ciertas cosas para hacer el rito. Mientras daba vueltas en su habitación pensando bien en lo que se avecinaba… el miedo que lleva sintiendo desde el accidente solo ha incrementado… decide utilizar el cuarto que está en las caballerizas para que su madre o hermana se enteren de lo que va a hacer…
El pelirrojo espera a que aparezca de un momento a otro Rick, cuando por fin lo hace lo lleva por la entrada del servicio hasta atrás, en el cuarto encienden varias velas y hace un dibujo en el suelo… luego saca una tabla…
- ¿Qué es eso?
- Es una tabla de ouija, es la única manera de hacerlo seguro ya que eres un inexperto
La corta explicación no le calmó para nada sus nervios que de por sí sentía que ya no podían tensarse más… se sientan en el suelo y coloca un vaso sobre la tabla y le pide que ponga su pulga sobre él… tembloroso lo hace
- Cierra los ojos
Neil lo hace, mientras intenta pasar el trago amargo
- ¿Hay alguien aquí con nosotros?
La piel se le erizó cuando Rick hizo esa pregunta… temía la forma en que fueran a responder
- ¿Hay alguien aquí con nosotros?
Una brisa fresca se sintió en la habitación cerrada. De presto el vaso se mueve derredor de la tabla a lo que Neil no hizo más que tragar aire del miedo… recipiente se detiene sobre una frase… “SI”
- Nos hemos reunido aquí para despedirte… tienes que irte de aquí
El vaso se desplaza sobre la tabla… “NO”
- Te lo ordenamos… oye, repite conmigo
Pronuncian los dos
- Te lo ordenamos
El vaso empieza a moverse y extraños ruidos se escuchan en derredor de la habitación… la piel de Neil no se erizar más de susto… Rick empieza a recitar unas palabras y los estruendos aumentan cada vez más… el recipiente donde aún tiene sus dedos empieza a estremecerse… y termina estallando en cientos de trozos en el mismo momento que la puerta se abre y una corriente de aire apaga todas las velas… la figura de una persona se deja ver bajo el umbral… los hombres se giran para saber quién es
- ¿Qué estáis haciendo?
- ¡¡Elisa, cuidado!!
Intentó prevenirle su hermano al ver como una sombra tras la puerta la movía para cerrarla… Neil se levanta al igual que Rick, entonces ve como la mano de la silueta se desliza por la pared hasta donde el hombre y lo empuja, Elisa se sorprende… pero la voz de su hermano la puso en alerta… incluso él no entendía cómo su voz podía sonar tan carrasposa
- ¡Corre!
Y tal como se lo pidió su hermano ve que ella se aleja… entonces Neil ve que la sombra va tras ella y decide ir a salvarla, cuando entra por la puerta de la cocina no puede evitar llamar a su hermana… pues le parece ver la silueta oscura moverse por todos lados… su hermana grita pidiendo ayuda… las luces tintineaban por cada estancia que pasaba… sabía que si existía un lugar donde se refugiaría su hermana sería en su habitación
Escuchaba los porrazos que daban en la puerta y Elisa seguía gritando… cuando llega hasta la alcoba ve la puerta abierta y el interior oscuro… empieza a dar unos pasos intentando acostumbrar su mirada a ese entorno… cuando percibe como la silueta se mueve por el espejo de cuerpo entero… coge el taburete que estaba cerca de su pie y lo estampa contra este… entonces observa su reflejo en espejo del tocador…
Tiene el rostro medio inclinada… su mirada oscura, sus cabellos parecen húmedos y unas marcas blancas en su cuerpo empiezan a oscurecerse cuando desde lejos un manto negro parece levitar hasta llegar hasta sus hombros como si fuese una capa para luego transformarse todo su cuerpo por una piel negra, tenebrosa… tétrico… aterrador… llora, al ver en lo que se ha convertido, pero el reflejo del espejo sigue sin cambiar gesto alguno
- Soy yo… soy yo
Todo este tiempo esa figura oscura que ha estado viendo desplazarse por todos lados ha sido él… entonces la figura levanta una espada en la cual sus símbolos se iluminan segundo a segundo que es acercado a su cuello… Neil abre sus ojos en totalidad al sentir como la hoja fría del metal se desliza por su garganta cortando la piel
- AAAAaaaahhhh
Fue el grito de la mucama que se había acercado hasta esa habitación debido a los gritos y el estruendo, ve el cuerpo inconsciente de la señorita Elisa al fondo de la habitación en el suelo y presencia justo el terrorífico momento en que el joven llevaba hasta su cuello el abre cartas que está sobre la mesa.
F I N