HOLA GUERRERAS AQUI DEJANDO OTRA ENTREGA ESPERO LES GUSTE
Sexto Invierno.
Aferrarse no tiene sentido y sé bien que suena absurdo pero no puedo evitar pensarte – cierro los ojos y por mi mente pasa tu dulce rostro –, pero… pero ahora se bien que todos esos anhelos son producto de mi imaginación y fantasía, que el tiempo si afecto nuestro sentir, tú sentir – hago énfasis en esa última frase –, supuse que tú me seguías amando como yo te amo, pero me equivoque, ¡Sí!, ese fue mi error creer que tu amor no cambiara en lo absoluto – fui un tonto, me reclamo en mis adentros –, solo quería que supieras que te mirabas hermosa el día de tu boda, estuve ahí pero de manera muy discreta para que no me reconocieras, no quería por en duda tu decisión, siempre te imagine así, radiante, virginal y hermosa, es una pena que el que te llevaba del brazo fuera otro, en fin no escribí para reclamarte nada solo quería que supieras que estoy buscando mi camino, ayer hable con Susana y aun que se puso furiosa y luego me imploro que no la dejara, no di vuelta atrás con mi decisión de separarnos, hoy fui a ver a James ¿Qué quién es él?, pues mi abogado está llevando los trámites de divorcio – miro el cielo gris y suspiro – tarde mucho en tomar esta decisión, si tan solo lo hubiera hecho cuatro inviernos atrás otra sería mi historia, otra sería nuestra historia, aun así con el corazón vació y frágil me estoy dando el valor de luchar por vivir y si en algún momento de tu vida necesitas de mi sabes que estaré por siempre y para siempre esperando por ti… - por mis ojos brota como un destello de luz una lágrima – bueno, eso es todo lo que deseaba decirte por este invierno… ¡Ah lo olvidaba!, una cosa más Candy… Te amo y te amaré siempre mi tarzan con pecas.
Nota: Carta no enviada.
Sexto Invierno.
Aferrarse no tiene sentido y sé bien que suena absurdo pero no puedo evitar pensarte – cierro los ojos y por mi mente pasa tu dulce rostro –, pero… pero ahora se bien que todos esos anhelos son producto de mi imaginación y fantasía, que el tiempo si afecto nuestro sentir, tú sentir – hago énfasis en esa última frase –, supuse que tú me seguías amando como yo te amo, pero me equivoque, ¡Sí!, ese fue mi error creer que tu amor no cambiara en lo absoluto – fui un tonto, me reclamo en mis adentros –, solo quería que supieras que te mirabas hermosa el día de tu boda, estuve ahí pero de manera muy discreta para que no me reconocieras, no quería por en duda tu decisión, siempre te imagine así, radiante, virginal y hermosa, es una pena que el que te llevaba del brazo fuera otro, en fin no escribí para reclamarte nada solo quería que supieras que estoy buscando mi camino, ayer hable con Susana y aun que se puso furiosa y luego me imploro que no la dejara, no di vuelta atrás con mi decisión de separarnos, hoy fui a ver a James ¿Qué quién es él?, pues mi abogado está llevando los trámites de divorcio – miro el cielo gris y suspiro – tarde mucho en tomar esta decisión, si tan solo lo hubiera hecho cuatro inviernos atrás otra sería mi historia, otra sería nuestra historia, aun así con el corazón vació y frágil me estoy dando el valor de luchar por vivir y si en algún momento de tu vida necesitas de mi sabes que estaré por siempre y para siempre esperando por ti… - por mis ojos brota como un destello de luz una lágrima – bueno, eso es todo lo que deseaba decirte por este invierno… ¡Ah lo olvidaba!, una cosa más Candy… Te amo y te amaré siempre mi tarzan con pecas.
Nota: Carta no enviada.