Y ahora otro ¡Complete!
Décimo quinto Aporte de Luisy Andley, Gezabel y su amiga Mayra Exitosa, esperando les guste
ALBERT LOVERS SECRET SERVICE
Mi Ángel
Por Mayra Exitosa
--- ¡Hola Mi amor!
--- ¡Cielo! ¿Eres tú?
--- Se me hizo una eternidad esperarte… no sabes cuanto deseaba que estuvieras aquí, pero… también quería que estuvieras allá y… Por eso no me podía ir.
--- ¡Oh Albert! Los chicos están bien, nació mi nieta, pensé que solo serían hombres y… por fin nació una niña. Tenemos una nietecita, mi amor.
--- Si mi vida, la vi al nacer. Estaba contigo, nunca me fui. No podía irme, tenía miedo que me olvidarás y…
--- Dicen que era Alzheimer.
--- Si, pero te dije que así no sufrirías mi ausencia.
--- Lo recuerdo, ahora lo recuerdo todo mi cielo. Creí que em volvería loca cuando partiste, pero al fin paso el tiempo y… ¿La niña?
--- Nuestro hijo la salvó.
--- Eso lo heredo de ti. Siempre me salvaste una y otra vez.
--- Y lo volvería a hacer de nuevo. Sin ti mi vida está vacía.
--- No me gustaría que estuvieran tristes.
--- No lo están, saben que ahora estas conmigo, nuestros nietos se los repitieron con tus propias palabras ¡Quiero irme con mi Albert!
--- ¿Se los repitieron?
--- Si, William, Alex, Alistar, todos estaban asegurando que estaba ahora contigo y que estaba feliz.
--- ¿Y lo estás?
--- ¿Lo dudas? Estoy como el día que me dijiste que te casarías conmigo.
--- Yo también. Te confieso que alcance a dudar en volverte a encontrar… pero es que olvidaba todo, era como estar en la nada, como perder mi pasado y mi presente. ¡Fue muy triste!
--- Lo sé, pero cada que llorabas y te desesperabas, mi alma te abrazaba mi vida, te abrazaba tan fuerte para que alcanzaras a sentirme.
--- ¿Y dejaba de llorar?
--- Algunas veces, suspirabas y decías mi nombre.
--- Por eso me esperaste.
--- No, aunque me olvidaras. Yo nunca te olvidaría, no me iría a la eternidad, sin tomar tu mano, sin sentir que te llevo conmigo.
--- ¡Albert! Mi nieta dijo que te vio…
--- Si, no sé cómo, pero me sonreía, creo que ya sabía que vendrías hoy. Sabes, le pusieron Candy. Como tú.
--- De verdad. Siempre les dije que, si teníamos una hija, le pondría el nombre de tu hermana.
--- Si, pero ellos te amaban a ti. Y no sabían nada de Rosemary.
--- Albert, ya no nos vamos a volver a separar.
--- Jamás, ahora tenemos toda la eternidad para estar juntos.
--- Ya no soy tan joven.
--- Por supuesto que sí, mírate, sigues siendo tan bella.
--- Pero ¿cómo?
--- Aquí te ves como queremos estar, mi vida. Mírame, yo tampoco me vine tan joven y ya ves, me sigues viendo con ojos de amor.
--- Tu siempre has sido así.
--- Ven, vayamos a ver el atardecer.
--- Como cuando estábamos en la playa.
--- Como tu lo desees. Ahora podemos estar donde queramos, como queramos y la eternidad es nuestro límite.
--- ¿Seguro que estarán bien?
--- Si, los educamos bien, y ellos harán lo mismo con nuestros nietos. No te preocupes, los veremos en algunos años más, para ellos serán muchos, para nosotros, el tiempo es… infinito.
FIN
Décimo quinto Aporte de Luisy Andley, Gezabel y su amiga Mayra Exitosa, esperando les guste
ALBERT LOVERS SECRET SERVICE
Mi Ángel
Por Mayra Exitosa
--- ¡Hola Mi amor!
--- ¡Cielo! ¿Eres tú?
--- Se me hizo una eternidad esperarte… no sabes cuanto deseaba que estuvieras aquí, pero… también quería que estuvieras allá y… Por eso no me podía ir.
--- ¡Oh Albert! Los chicos están bien, nació mi nieta, pensé que solo serían hombres y… por fin nació una niña. Tenemos una nietecita, mi amor.
--- Si mi vida, la vi al nacer. Estaba contigo, nunca me fui. No podía irme, tenía miedo que me olvidarás y…
--- Dicen que era Alzheimer.
--- Si, pero te dije que así no sufrirías mi ausencia.
--- Lo recuerdo, ahora lo recuerdo todo mi cielo. Creí que em volvería loca cuando partiste, pero al fin paso el tiempo y… ¿La niña?
--- Nuestro hijo la salvó.
--- Eso lo heredo de ti. Siempre me salvaste una y otra vez.
--- Y lo volvería a hacer de nuevo. Sin ti mi vida está vacía.
--- No me gustaría que estuvieran tristes.
--- No lo están, saben que ahora estas conmigo, nuestros nietos se los repitieron con tus propias palabras ¡Quiero irme con mi Albert!
--- ¿Se los repitieron?
--- Si, William, Alex, Alistar, todos estaban asegurando que estaba ahora contigo y que estaba feliz.
--- ¿Y lo estás?
--- ¿Lo dudas? Estoy como el día que me dijiste que te casarías conmigo.
--- Yo también. Te confieso que alcance a dudar en volverte a encontrar… pero es que olvidaba todo, era como estar en la nada, como perder mi pasado y mi presente. ¡Fue muy triste!
--- Lo sé, pero cada que llorabas y te desesperabas, mi alma te abrazaba mi vida, te abrazaba tan fuerte para que alcanzaras a sentirme.
--- ¿Y dejaba de llorar?
--- Algunas veces, suspirabas y decías mi nombre.
--- Por eso me esperaste.
--- No, aunque me olvidaras. Yo nunca te olvidaría, no me iría a la eternidad, sin tomar tu mano, sin sentir que te llevo conmigo.
--- ¡Albert! Mi nieta dijo que te vio…
--- Si, no sé cómo, pero me sonreía, creo que ya sabía que vendrías hoy. Sabes, le pusieron Candy. Como tú.
--- De verdad. Siempre les dije que, si teníamos una hija, le pondría el nombre de tu hermana.
--- Si, pero ellos te amaban a ti. Y no sabían nada de Rosemary.
--- Albert, ya no nos vamos a volver a separar.
--- Jamás, ahora tenemos toda la eternidad para estar juntos.
--- Ya no soy tan joven.
--- Por supuesto que sí, mírate, sigues siendo tan bella.
--- Pero ¿cómo?
--- Aquí te ves como queremos estar, mi vida. Mírame, yo tampoco me vine tan joven y ya ves, me sigues viendo con ojos de amor.
--- Tu siempre has sido así.
--- Ven, vayamos a ver el atardecer.
--- Como cuando estábamos en la playa.
--- Como tu lo desees. Ahora podemos estar donde queramos, como queramos y la eternidad es nuestro límite.
--- ¿Seguro que estarán bien?
--- Si, los educamos bien, y ellos harán lo mismo con nuestros nietos. No te preocupes, los veremos en algunos años más, para ellos serán muchos, para nosotros, el tiempo es… infinito.
FIN