Albert Lover Secret Service
Presentándome y tardando un poco en llegar...
Saludos y aquí mi primer aporte
traje una historia,
TU ME CAMBIASTE LA VIDA,
deseando sea de su agrado, subiré diariamente, hasta completarla
https://youtu.be/gGY4Tmso_Qs?t=13
Presentándome y tardando un poco en llegar...
Saludos y aquí mi primer aporte
traje una historia,
TU ME CAMBIASTE LA VIDA,
deseando sea de su agrado, subiré diariamente, hasta completarla
https://youtu.be/gGY4Tmso_Qs?t=13
Tu me cambiaste la Vida
Por Mayra Exitosa
Capitulo 1
Un ser humano indomable
Por Mayra Exitosa
Capitulo 1
Un ser humano indomable
Había sido una tarde desastrosa, la Tía se había vuelto loca, quería que tomara una vida de deberes y compromisos, aun siendo tan joven, estaba molesto incomodo, bastante era no tener padres, que a mi única hermana la hubieran obligado a casarse tan joven, solo porque mis padres ya no estaban para respaldarnos, apenas era un niño, no comprendía porque la vida era tan injusta si ese señor era mucho mayor, casi se parecía a mi padre. Que mi Tía dijera que era bueno, vi como mi hermana lloraba, desesperada y yo sin comprender, ahora lo entiendo todo, me quieren hacer lo mismo. Creen que soy como ella, que diré todo que sí. Pero están equivocados, la he visto sufrir en silencio, sonriendo para que no sufriera, haciéndose cargo de mí, escondiéndome, viendo que no me falte nada. Ella es genial, me dio un sobrino y es muy pequeño, pero me asegura que es igual a mi cuando tenía su edad.
Es verdad su esposo nos protege a todos, el se hace cargo de que no toquen la herencia de mi padre, es mi tutor y mi Tía Elroy desconfía él y de todos, también quedo ella como Albacea. Pero ahora que por fin pensaba que podría escaparme, dice que soy mayor de edad y que ya pueden entregarme todo para que lo administre. No acepte. Salí corriendo, mi hermana me dijo que me tranquilizara, que ella me cubriría como siempre, Rosy al rescate. Llamaba a George, era el único hombre que podía encontrar a William y hablar con él.
--- Ve con el George, no lo dejes solo.
--- Como usted ordene señorita.
--- No lo obligues, no lo trates duro. Mi Tía tiene sus razones, no confía en nadie, es muy difícil para mí hermanito, que se haga cargo de todo solo. Hablare con mi Tía.
--- Si señorita.
--- ¡Señora! George, señora.
--- Si madame.
George siempre considerado, no le había obligado a nada, charlaban como buenos amigos, aunque fuera mayor, siempre le daba su lugar y sabía del amor que sentía por su hermana la amaba secretamente, porque, aunque su esposo casi nunca estaba, el siempre respondía con cortesía y amabilidad.
Nuevamente había huido William ya ahora mayor de edad sería imposible obligarlo.
Con un suspiro mientras manejaba recordaba, meditaba el tiempo y el comportamiento de William y de la llegada de Anthony a la familia, como se había cambiado tanto el niño, al sentir la responsabilidad del bebe, cuando su padre no lo atendía porque no le tenía paciencia.
Siempre obligado a estar en clases, encerrado como un ave en una jaula, desde pequeño gozaba de esconderse en los bosques, pero desde que lo habían trasladado a la ciudad, su alegría era solo cuando estaba su hermana y su bebe. Cuidarlo y enseñarle, fueron las bases de su educación. Pues aprendía rápidamente y tenía muchas habilidades, paciencia y era un buen niño, su rebeldía era ante sus mayores, esa seriedad y esas obligaciones que siempre le ordenaban, era algo que lo irritaba. Sin embargo, su hermana intervenía acertadamente.
Así fue como de la admiración nació ese amor prohibido a esa dama, tan jovencita madre y hermana. Ese hombre, que le llevaba mas de veinticinco años, parecía su padre y no su marido.
--- Madame, me hare cargo de los señoritos, vaya a descansar.
--- Gracias George, sin usted estaríamos perdidos. Le puedo encargar a mi hijo y a mi hermano.
--- Vaya sin pendiente. No los dejare solos.
--- Si llega mi Tía, querrá cargar a Anthony. Mi hijo, solo sigue e ami hermano. Mejor aléjelos y llévelos a los jardines.
William ahora era un joven, estaba rebelándose más, ahora que Anthony estaba en su educación, ya no lo necesitaba, por lo cual el podía irse lejos en cualquier momento, era muy listo, no necesitaba dinero, siempre se las arreglaba, sabía trabajar, sabía defenderse y sus habilidades se incrementaron conforme mas salía de la casa. Sabía varios idiomas y tenía identificaciones, guardaba celosamente sus documentos, tenía escondites en varias de sus propiedades a tal grado que conocía pasadizos y lugares que ni el en todos los años que había trabajado para la familia, había logrado encontrar. Fue tal su rebeldía que podía irse a cualquiera de las propiedades de la familia, sin decir nada. Ahora para encontrarlo de nuevo.
Lejos de ahí… En el hogar de Ponny, un orfanato bastante lleno de niños con problemas, con terrenos muy lejanos a las poblaciones, para que los menores fueran tratados con libertad y ayudados a salir de sus problemas. Así con la ubicación y los antecedentes la llevaban a ella, una pequeña niña que, aunque tenía doce años, parecía de ocho, su pequeñez, desnutrición y marcas de haber huido varias veces, la llevaban con la hermana María, una monja de gran corazón.
--- Pasa hija, aquí nadie te hará daño. Estaré cerca de ti, te prometo que no dejare que te toquen.
--- Me lo promete.
--- Te lo juro. Confía en mí, cualquier cosa, lo que sea, estaré contigo.
--- Gracias. Tengo hambre.
--- Ven, hay mucha comida. Ella por fin veía algo de alimento, después de días sin ingerir nada, la sopa tibia, el arroz y un pequeño trozo de carne, era algo que su estómago necesitaba.
Mientras tanto el investigador, hablaba con la directora del lugar.
--- Fue atacada, intentaron abusar de ella, es una niña, no tiene marcas, ni ha sido abusada, según los exámenes médicos, se ha escapado de todos los lugares donde la han intentado ayudar. No es de aquí, su acento denota que nació en otro lugar. No tenemos nada de ella, ni partida de nacimiento, ni documentos, es probable que la hayan intentado regresar en barco, pero ella desconoce todos los lugares en los que ha estado, no tiene marcas graves, asegura que las marcas de heridas han sido leves por subir a árboles, bardas y… es muy ágil.
--- La cuidaremos bien. Pero necesitamos más de ella.
--- Los nombres que le han dado, son muy extraños Caimana, Anna, Ania, Cania.
--- ¡Cania!
--- Le he dicho que ni ella menciona su nombre bien, su pronunciación es errática.
--- Investigaremos con ella.
--- El ultimo investigador que se hizo cargo, murió. No sabemos nada de sus documentos, es todo un desafío.
La niña se había quedado dormida, sus cabellos eran muy largos y rebeldes, rizados en tono dorado y cobrizo. Las zapatillas desgastadas, sus ropas raídas.
La monja se hacia cargo de darle ropas limpias y de mejor ver. Esos días platicaban con ella ara saber su nombre y fue difícil entenderlo.
--- ¿Quieres un dulce pequeña Cania?
Con una sonrisa al haber escuchado de nuevo su nombre mal, ella trataba de corregirlas tomando el dulce,
--- Caidana.
--- Caidanna
--- Aidana
--- Te gustaría que te llamáramos Candy.
--- Mi nombre es fuego, no dulce.
--- Si eres hermosa y muy cálida.
--- Gracias.
--- Ven te enseñaremos a leer y hablar correctamente.
--- Si.
En las clases se quedaba dormida, su retraso era notorio, había sido maltratada, las heridas habían sanado, pero sus movimientos al dormir, esconderse y protegerse fueron indicios de que habían intentado abusar de ella. En efecto no era una señorita, sin embargo, los alimentos eran algo que podían utilizar para la enseñanza. Le tuvieron paciencia y ganaba peso y alegría con forme al paso del tiempo, se escapaba y regresaba, siempre escondiéndose, no tardaba en llamar la atención de todos los pequeños del hogar, eran niños aun, no tardarían en ser jóvenes y serían enviados a otros lugares, pero al menos ya con la educación y el cuidado de las monjas y el personal, eran revindicados a la sociedad actual.
En el bosque, con leños formaban una fogata cuidadosamente, ella contaba a todos los lugares que había conocido, algunos contaban sus problemas y ella se molestaba y les decía lo que debían hacer, siempre huyendo, eso había sido su forma más fácil de evitar problemas, así se ganaba el respeto y admiración de sus compañeritos tanto niños como niñas.
--- Candy, ¿te gusta alguien?
--- ¿Cómo? ¿Tienes hambre?
--- No. Si te gusta algunos de ellos.
--- ¿Eres caníbal?
--- No, Candy. Lo siento. No debí preguntar.
Candy no tenía muchas habilidades sobre conocimientos, era muy lenta en su aprendizaje aun, mas ingenua en cuestiones de conversaciones con chicos y chicas de su edad, sin embargo, para ella era muy fácil reunirse con los menores a ella, la hacían sentirse mejor, no se sentía tonta y era fácil aprender junto a ellos.
Las niñas de su edad algunas ya eran señoritas y gozaban de mas desarrollado su cuerpo, por lo que sus pensamientos eran distintos, también llevaban distintas clases, lo cual no podía unirse a ellas, debido a que Candy hablaba otro idioma y ingles lo estaba aprendiendo a escribir y leer.
Correr en los bosques era relajante y estimulante, jugar en libertad fue lo mejor que le podía suceder, el problema ahí era el clima, siempre llovía y eso la mantenía encerrada en las clases.
En Lakewood, propiedad de los Andrew, el hogar que mas amaba por haber vivido ahí su niñez y recordar cuando era feliz junto a su hermana. Ella siempre corriendo y sonreía, los jardines extensos, los bosques todo lo conocían juntos, hasta que sus padres fallecieron ellos siempre habían sido felices. Tomaba una botella de whisky y bebía como lo hacía su padre cuando estaba feliz. Sin darse cuenta, rememorando su niñez, se fue terminando la botella y se fue caminando lejos de la casa, ahí estaba otra botella que recordaba, en la cabaña de su padre, ahí donde se escondían a veces.
Se sentaba en el porche viendo imágenes de Rosemary y su madre, las lagrimas no se hicieron esperar, eran tan hermosas. Su padre estaba tomando en la mecedora del porche de la cabaña vieja. Donde se iban a pasar el verano, para bañarse en el río sin que nadie los molestara. Su padre le enseño a manejar las armas, a tirar al blanco, era un caballero escoces que había hecho su fortuna en base a la minería y luego el banco, los negocios se fueron incrementando. Ahora su Tía estaba de responsable de ellos, pero la alternativa fue casar a Rosemary, con alguien importante, antes que un hombre le pusiera las manos a la fortuna de su padre. Darse cuenta de todo lo que su Tía Elroy había autorizado, porque el era un niño, ahora quería que fuera el quien hiciera esas autorizaciones tan descabelladas. Pues su cuñado estaba enfermo y era probable que la situación empeorara.
En los bosques, ella se sentaba en un árbol lejos del hogar, las niñas de su edad habían comentado que ella no era igual, que era retrasada y eso la había entristecido, no sabía leer bien, no estaba con los de su edad, pero eso no significaba que no pudiera aprender.
Triste ante su situación, notando que sus bustos eran muy pequeños y su cuerpo no mostraba la forma de las demás. Es que la madre María una de las monjas, le aseguraba que no era importante que debía ser por no haberse desarrollado como todas las demás, que su genética era diferente y… ¿Qué era genética? ¿Quién sabe?
Comenzaba a llover y el río se había elevado, no se había dado cuenta y ahora no podía regresar, tenía que buscar un lugar donde pasar la noche.
CONTINUARA...
Última edición por Mayra Y Exitosa el Vie Abr 10, 2020 12:26 am, editado 1 vez (Razón : error palabras)