Crédito Art, Cici Grandchester
Protector o Propietario
Capítulo 2
Sin enterarse de la tormenta que se avecinaba Candy estaba sentada en la banca del parque, platicando muy amena mente con la señora que estaba en la banca junta a la suya, su hijo estaba jugando con sus pies y su hija estaba en brazos de su vecino Adams, quien por cierto no le caía del todo bien, nunca dejaba que nadie que no fuera de su total confianza cargara a sus hijos menos a su hija, pero estaban en el parque y a ella le pareció muy grosero no permitirle que cargara a la niña, a parte ella estaba ahí vigilando, no es que fuera desconfiada pero Adams no le daba mucha confianza, sentía que la vigilaba y que siempre estaba pendiente de sus movimientos, al principio sus amigas le dijeron que quizá estaba interesado en ella y que no sabia como abordarla, eso la tranquilizo pero después que nacieran los bebes se había mostrado mas interesado, mas al pendiente pero no le había hecho ninguna insinuación de que ella y el tuvieran algo, el interés era básicamente por los niños por lo cual ella había preferido tenerlos en la casa de Any, o Paty o incluso con su ángel en la oficina pero no en la casa con niñera, y solo estaban en casa por las tardes, y ese seria el ultimo día que estaría ahí en ese parque ya que había aceptado que necesitaba ayuda con los bebes y después de todo lo que había sucedido había por fin aceptado que tanto ella como los bebes merecían tener y ser parte de una familia, a su ángel le había llevado mucho convencerla de eso pero al fin ella había analizado que si, que era cierto que ella básicamente ya aprovechaba todas la ventajas y beneficios que su ángel le daba, que incluía desde su protección física, económica y hasta en los estudios, gracias a su ángel tenia una agencia de publicidad y como era la dueña solo trabajaba de 10 de la mañana a 4 de la tarde
y la niñera vivía con ella, juntas llevaban a los bebés a donde se fueran a quedar le tenía chofer un guarda espaldas que ella creía innecesario y por supuesto el apartamento era suyo y nada faltaba ahí para ella y los bebes
Entonces se dijo que era ridículo querer seguir evitando lo inevitable, y acepto irse a vivir a la mansión con su ángel y bueno por eso estaba ese día antes de irse a su nueva casa, irse ahí implicaba aceptar todo lo que vivir ahí significaba, desde dejar el anonimato hasta usar el apellido y todo lo que conllevara
su vida tendría un giro pero bueno su vida siempre había tenido esos giros inesperados y ella como una experta malabarista había aprendido a no caerse y cambiar los planes como la vida le daba esos giros.
De repente sintió un dolor en el pecho como si no pudiera respirar y en su nuca comenzó un cosquilleo que estremeció su cuerpo, algo que la ponía en alerta como cuando.......
pero, no podía ser,
las únicas veces que sentía eso era cuando estaba a punto de verlo a él
Era imposible, porque en casi 2 años él no había dado señales de vida, así que se dijo que era solo la expectativa de todos los cambios que estaban a punto de suceder en su vida.
sin querer hacer caso, se paso la mano por el cuello para disimular esa sensación y luego froto sus brazos y pensó que era mejor irse porque se sentía incomoda con Adams y ahora inquieta gracias a esos pensamientos.
Se puso de pie levando a Tt, y justo cuando volteo para ponerlo en el cochecito se estrello con una pared humana y se quedo inmóvil, intentando recordar como respirar como mover alguna parte de su cuerpo
cuando por fin el cerebro decidió trabajar reconoció que esa pared humana olía muy bien, y que según sintió temblaba y ella reconoció que ese temblor no era miedo
¡ era , ira ¡
lentamente fue subiendo la vista reconociendo el pecho, la manzana de adán, la barbilla y conforme su mirada iba subiendo sus miedos iban aterrizando en sus cuerpo dejándole básicamente la única función de respirar y sostener a Tt en sus brazos
cuando llego a sus ojos, vio lo que imaginaba, fuego, un fuego que había hecho que esas lagunas adoptarán ese color obscuro como sus pensamientos más crueles.
Ella le sostuvo la mirada tratando de tener fuerzas para no bajarla pero tenia que aceptar que estaba muerta de miedo.
Solo lo vio por un segundo y notó que él tenia otro objetivo, siguió su mirada y se encontró con Adams que tenía en los brazos a Rosselhie
por un momento quiso decirle a Adams que dejará a la bebé en el cochecito y que escapará por su vida pero no tuvo tiempo, en 2 zancadas él ya estaba arrebatando a la bebé de los brazos de Adams y cuando este intento decirle que no,
¡ perdió el control !
Sujetó a la beba con una mano y con la otra agarro a Adams por la camisa y a quemarropa le dijo:
es mí hija, mía; Candy , el bebé y ella son míos me pertenecen y ni tu ni nadie me va impedir tenerlos entendiste y si valoras tu vida jamás vuelvas a tocarlas a verlas a respirar el mismo aire que ellas.