Mis pasos retumban por el pasillo que lleva al salón donde se llevara acabo la recepción para el cumpleaños de mi pecosa. Entro al lugar y quedo asombrado, las personas que contrate hicieron un magnifico trabajo, todo esta de acuerdo como lo solicite, Candy quedara maravillada cuando llegue.
Una mujer rubia se acerca al sitio donde estoy parado y me llama por mi nombre.
-Terry -La observo con extrañeza porque no la conozco. Por supuesto que la corrijo de inmediato.
-Soy el señor Granchester y ¿usted es...?
-Perdón, mi nombre es Susy.
-Susana entonces. -Mi voz tiene un tinte de seriedad. Debo dejarle en claro a esta mujer que no vine a este lugar a coquetear.
-¡¿Le gusta como quedo arreglado el salón señor?!
-Debo admitir que hicieron muy bien su trabajo.
-Gracias señor. ¿Y entonces a que hora llega la festejada? supongo que sera su hermana o tal vez su mamá.
-No señorita, es mi esposa. -Lo expreso con una gran sonrisa.
-¡Aaahh! no me diga que es casado. - la mujer muestra un rostro decepcionado.
-Felizmente casado y con dos lindos bebes. -agrego girándome hacia la puerta de salida -Y si me disculpa, tengo que ir a recoger a mi familia para que comience el festejo de cumpleaños de mi hermosa esposa.