Valiente
Por Mayra Exitosa
Idea original de la película de Disney
Dedicado a Minuet Andrew y a las Lovers
En el lado obscuro ¡¡¡Brave!!! Se llevará a la par con escenas más fuertes.
Por Mayra Exitosa
Idea original de la película de Disney
Dedicado a Minuet Andrew y a las Lovers
En el lado obscuro ¡¡¡Brave!!! Se llevará a la par con escenas más fuertes.
En la época en que las peleas y las guerras eran por tierras, surge esta historia de difamaciones y ataques entre clanes, Escocia e Irlanda, siempre en constantes disputas contra Inglaterra. Sin embargo algo más fuerte surge de entre las tierras altas y bajas de Escocia, una unidad que nadie jamás se imaginó…
Una joven de origen irlandés, con mezcla de los escoceses se enamora de un Inglés, contra todo clan y ataque, Terrance Grandchester se casa con Candice Galloway una joven hermosa de ojos enormes verdes claro y cabellos rizados cobrizos. El inglés encomendado para establecer el orden en la Escocia, al casarse se queda con las tierras de Aberdeen, pertenecientes a la familia de la joven. De esta pareja nace una pequeña niña, tan pequeña al nacer que se consideraba un milagro pues la madre al dar a luz pierde todas sus fuerzas, quedando desvalida... la pequeña guerrera como le puso su abuela materna una vieja descendiente Escocesa de grandes cualidades y virtudes especiales, mientras que su padre la llama Candy Grandchester. En honor a su valiente y hermosa madre porta el diminutivo de su nombre ya que la niña apenas medía el tamaño del pie de su padre, sus ojos enormes en un verde obscuro y sus cabellos pegados a su cabeza en forma de pequeños símbolos celtas del color del sol.
Grandchester, dolido ante la pérdida de su amada, se refugia en la bebida y pierde la noción del tiempo al luto, mientras su pequeña se queda bajo el cuidado de su abuela Keira y su tía Tara, esta última enferma y con la esperanza de ver crecer a su sobrina sobrevive contra todo pronóstico para ver en Candy el crecimiento de una niña normal.
Una noche el ruido inquietante de trastos quebrados se despierta a Lord Terrance, quien al salir ve como intentan robar a su pequeña hija, de inmediato sube a capela a un corcel y con arco al pecho intenta dar alcance al vil ladrón. La persecución es tal que la pequeña comienza a llorar y al verse perdido el ladrón intenta des hacerse de la bebita lanzándola al aire.
Un Escoces que descansaba en el camino rumbo a sus tierras ve el bulto blanco caer desde el camino alto y toma con cuidado el contenido, a lo que el padre al ver que la pequeña cae en brazos de otro hombre detiene su persecución y llega hasta él, un hombre alto, rubio de barba abundante de nombre William Andrew, sosteniendo con cariño a la pequeña, ve agotado al hombre quien sin poder más cae a sus pies, al ver a su hija a salvo.
--- Tome un poco de agua, mi amigo. Le ofrece el hombre que salvó a su hijita
--- ¡Mi bebita! ¿Dónde esta mi hija?
--- Ahí, esta dormida, al parecer tenía hambre, es hermosa la pequeña, me recuerda a mi hija Rose, es muy parecida a su bebita.
--- Soy Grandchester, de Aberdeen, intentaron robar a mi hija en la noche y parece que ya amanece.
--- Así es mi amigo, apenas me disponía a salir con el amanecer cuando vi caer a esta pequeña rosa, es linda su hija. Tendría que haber salido hace un par de horas, pero al verlo no pude irme hasta asegurarme que pudiera tomar a su hija y llevarla con su madre.
--- Mi esposa murió, solo me queda mi pequeña, es todo lo que tengo.
--- Lo comprendo, mi esposa murió hace un año, pero me ha dejado a mis dos grandes amores, mi Rose y mi William.
--- Es tan difícil ser padre sin ella a mi lado.
---Estoy seguro que su familia, lo apoyara para salir adelante, anímese y… deje de beber, no le hace bien a su hija tener un padre fuerte y valiente, cuando este se ha embriagado y no puede defenderla.
--- Tiene razón, cuando sentí que la perdía, me arrepentí tanto de haber bebido, solo espero que la vida me dé la oportunidad de darle a mi pequeña Candy, lo que merece.
Con la conversación y la calma, se dio una amistad singular, el hombre que salvó a su hija pertenecía a tierras altas, pero ese lazo que los unió en ese momento, para Grandchester fue el cambio que necesitaba para resurgir de su tristeza y dedicarse a sacar a su hija adelante.
Entre los clanes y los ataques constantes, los afectados fueron los Andrew, quienes saboteados de muchas maneras, poco a poco perdían su fortuna con el paso de los años, esto hizo que William casará de manera prematura a su hija mayor quien cumplía quince años, así invitó a los clanes para la competencia en favor del matrimonio de su hija, darle una dote y salvarla de tantos problemas dentro de Glasgow, tierra de los Andrew.
La invitación llegaba a Terrance, habían pasado ya seis años y este al querer darle una madre a su hija fue a la competencia, donde al llegar fue saboteado y drogado, ahí la joven Rose al ver a varios caballeros con los ataques para no competir, protegía de uno a uno junto a su hermano menor, a los que fueron atacados por alguien de mala entraña, entre ellos estaba Terrance quien apenas podía abrir los ojos, viendo a la hermosa Rose que forcejeaba arrastrándolo para esconderlo en una habitación y que no fuera atacado de otra manera más lastimosa.
Las competencias continuaban en los clanes, mientras que ganaba un hombre de cabellos rubios y de origen escocés con tierras en Dundee. Un guerrero implacable de nombre Anthon, al que al ver a Rose quedaba prendado de ella. Alto, fuerte y robusto de cabellos castaños, tomo por esposa a Rose, el mismo día de la competencia, se quedaron semanas en Glasgow hasta ver buen tiempo para regresar a su tierra, en el trayecto fue atacado y Rose perdió a su esposo.
Los meses fueron problemas extras para los Andrew, Rose había quedado embarazada de Anthon, al ver la agresividad con la que fue recibida en Dundee, William pidió que volviera a su hogar, no sin estipular que las tierras dentro de Dundee serían de su nieto Anthony, al no poder ser registrado por el padre, William lo registro como su nieto y el pequeño quedo con el nombre de Anthony Andrew, las tierras de su padre fueron su legado y fue reconocido por el abuelo paterno, quien intentó llevarse a Rose y a su nieto, los cuales al no haber sido bien recibidos perdieron la oportunidad, el viejo Maxwell Mc Brown, se quedaría cuidando de las tierras con la seguridad que solo su nieto estuviera con la familia de la madre, intentaba re establecerle el apellido, pero ya no se lo permitieron los orgullosos Andrew, como solía llamarlos no lo perdonaron, al ofender a Rose y traer supuestamente en sus entrañas al hijo de otro hombre.
Años después, en tierras de Aberdeen, donde Grandchester incrementaba sus propiedades y las hacía producir, su pequeña contaba con siete años cuando su Tía Tara falleciera, haciendo que perdiera a la que era como su madre, su abuela ante el dolor de la pérdida de otra hija, soportaba con dignidad para poder darle a su nieta sus conocimientos y dejar en ella, las posesiones más valiosas de los Galloway, así continuaba cuidando de ella, mientras Terrance no se decidía a olvidarse de la madre de su hija y del fallido intento de buscar esposa en Glasgow, donde en sueño recordaba haber estado cerca de la joven Andrew, a quien rechazaron los Mc Brown por tener un hijo de otro hombre.
En las tierras de los Andrew descubrieron quienes saboteaban desde el interior del castillo, ahí corrieron a una mujer llamada Samira y su hija Susana, fueron desterradas de Glasgow, al ser descubiertas por Rose de buscar difamar a su familia. Estas huyeron antes de ser denunciadas con William Andrew. La mujer intentaba difamar a William asegurando que Susana era su hija al ser rubia, sin embargo la mujer había estado con muchos hombres y William estaba fuera de Glasgow en el tiempo en el que debió quedar embarazada.
Rose se dio cuenta que fue ella quien participó en drogar a los hombres, para que perdieran la mayoría y quedar ganadores los Mc Niel, sin embargo no esperaron que Anthon Mc Brown no durmiera en el castillo y se quedo bajo resguardo de su clan, para ser el honesto vencedor.
Rose en su ternura y poco conocimiento del clan del padre de su hijo, le contaba historias maravillosas al pequeño de su verdadero padre, un guerrero invencible, el mejor con el arco, imposible de vencer. El pequeño Anthony quedaba extasiado imaginando a su padre, que debía ser el mejor escocés que esa tierra haya tenido.
Cuando este le contaba maravillas a William Albert de cómo era su padre, el tío ya mayor trataba de mejorar para el pequeño, pues su parecido hacia el, lo hacía responsable de ver que Anthony tuviera una figura paterna honorable, así este se exigía para ser todo lo que el niño soñaba en su verdadero padre, sin saber que su hermana solo le contaba lo poco que había visto cuando participó en la competencia de clanes para obtenerla en matrimonio.
Esa falta de comunicación entre ellos era mayor, ya que Rose tenía a bien ser quien se encargará de llevar el castillo Andrew y que no faltará nada a sus tres caballeros, su valioso padre, su valiente hermano y su pequeño hijo quienes por genética parecían similares en diferentes edades, pues el pequeño Anthony solo tenía algo muy leve de su padre, ese secreto era de Rose, quien si sabía que tenía de los Mc Brown.
El paso de los años cambiaba las cosas, Terrance Grandchester hacía molestar a su suegra, quien daba de palabras en lenguas antiguas una y otra vez, haciendo reír juguetonamente al Padre de Candy, Lord Grandchester.
--- Mi nieta será toda una guerrera escocesa.
--- Oh si, mi lady, recuerde que sobrevivió porque tiene sangre inglesa, mire sus ojos son tan intensos y mi hija maneja el arco y cabalga como una inglesa.
--- Olvídate de tu origen, ella tiene sangre de Escocia y aseguro que si sale de estas tierras, los mismos dioses harán diluvios hasta su regreso. Ella pertenece a Escocia y jamás la llevaras a Inglaterra.
--- Todo lo que poseo será de mi hija, todo Aberdeen será de ella, lo juro.
--- Si te casas y tienes un hijo, mi niña se casará con un escocés.
--- Mi hija se casará libre y ojala que sea un inglés quien la cuide, porque si es tan hechicero como usted, mis nietos saldrán con cola y cuernos.
--- ¡Cola y cuernos! Solo si es de tu parte, hijo, eres un demonio andando, pero aun así, mi hija se rindió y ni modo.
Candy observaba de un lado a otro la disputa con una sonrisa en los labios, ella amaba a su padre como a nadie, haría todo lo que le pidiera, pero su abuela era especial y había visto por los dioses que ella sería una guerrera escocesa, sería la mejor dama de Escocia, la más asediada y la más hermosa, según su abuela.
La pequeña reía al ver como su padre de manera bromista hacía molestar a su abuela, sin darse cuenta que todo lo que decía era lo que deseaba escuchar su abuela, y lo mismo que ella había oído de los labios de su abuelita antes de comenzar la pelea con su padre.
--- Oíste bien Candy, todo Aberdeen será dado como dote para que compitan los mejores guerreros escoceses por ti. Confirmaba su abuela.
--- No he dicho eso, mi hija se irá con mis padres a Inglaterra, vieja bruja. Girando a ver a su hija quien abría sus ojos expresivos, él le sonreía y de forma mimosa le confirmaba --- Si mi pequeña Aberdeen es tuyo.Cuando Candy cumplió doce años aun siendo tan pequeña y delicada, tenía una fortaleza increíble, al perder a su abuela ella se hacía cargo de ser la encargada del castillo Grandchester.
La vieja abuela desapareció y con el tiempo una mujer llegó al castillo Grandchester, asegurando ser prima de su esposa, y que su hija podría casarse con Lord Grandchester. Aunque fue aceptada al mencionar todos los detalles familiares de ser la prima de la madre de su hija, el desconfiaba de Samira y su hija Susana, a la que siendo muy joven deseaba casar con él. Una noche trataron de embriagarlo y con eso se dio cuenta de su plan, dejando claro y anunciando que jamás se casaría con Susana, quien era poco mayor que su hija y apenas se hacía mujer y que no era de su agrado.
Terrance Grandchester se casó muy joven y su hija crecía cada día pero en él la juventud pasaba con buen grado aun dejando a un atractivo hombre maduro, quien en su corazón no era fácil conquistar, pues si de alguna mujer era ese corazón, era de su hija y aun recordando a su esposa, y aquella joven rechazada tal vez por su causa, se cuidaba de no ser embaucado o saboteado de ninguna forma de nuevo.
En Glasgow William Andrew fue herido, su hermosa hija lo ocultaba y cuidaba esmeradamente, pues no podía pensar en ver crecer a su pequeño, sin su abuelo, quien era un descendiente de grandes guerreros escoceses, con su convalecencia, William Albert Andrew, su hijo tomaba los negocios y comenzaba el ardua tarea de cuidar de las tierras de su padre, de los trabajos que en ella se llevaban, de que la fortuna creciera en el Clan Andrew y que esta fuera suficiente y mejor para elevar las expectativas familiares.
--- Mira Anthony. William Albert desde una distancia bastante considerada, llevaba en su caballo al pequeño para que viera como se había convertido en lo que el niño deseaba, y con el arco disparaba las flechas a puntos marcados, dejando al pequeño más que emocionado, ambos encima del caballo con sus kilts de cuatros verdes y pequeñas franjas azules.
--- Eres el mejor Tío, cuando sea grande quiero ser como usted. Albert sonreía satisfecho, por fin lo había logrado, el pequeño ya de siete años lo admiraba, y para muchos era ver a Padre e hijo, pues sus parecidos y sus vestimentas, la forma de arreglarse y como el pequeño imitaba a su tío en todo, porque cuando fuera mayor sería un gran guerrero. --- Tío yo seré mejor que tú, porque mi padre era el mejor guerrero de Escocia. Con esta frase la sonrisa de satisfacción de William Albert se volvía una mueca, tanto esfuerzo por ser el mejor arquero, ahora el pequeño deseaba que también fuera el mejor guerrero. Este cabizbajo se fue rumbo al castillo a ver a su padre.
--- Padre, cada que pasan los años se vuelve más exigente ese nieto tuyo.
--- Vamos William, es un niño, recuerda que si falto yo, serás quien lo guie.
--- Lo sé, no me quejo, pero hago todo por cuidar y elevar nuestros dividendos, para que mi sobrino diga que no solo quiere ser el mejor arquero de Escocia, ahora también quiere ser el mejor guerrero, creo sinceramente Padre, que eso se lo enseñará usted.
--- Te estás cuarteando William, que no ves la segunda intención de tu sobrino, que no sientes que te está retando a ser mejor y con ello, podrás exigirle ser mejor a él. Vamos hijo, que no quieres tener a la mejor mujer de Escocia algún día.
--- ¡La tendré!, no lo dude Padre. ¡La tendré!
CONTINUARA
Última edición por Mayra Y Exitosa el Miér Abr 01, 2015 2:13 am, editado 1 vez (Razón : parrafo)