¡Buenas noches! No pueden faltar mis aportes para mis hermosas brujitas
Continuo con la serie de mini-drabbles, agradezco mucho el apoyo que le dieron al primero.
Esta vez es el turno de mi personaje favorito Anthony Espero que sea de su agrado, y que no este tan mal hecho
Para el fanwork agradezco a: Lord Cornwell, por prestarme su reciente chibi
Sin más les dejo mi aporte
"Una... ¿travesura?"
Mini-drabble #2
Mini-drabble #2
Los gritos de la tía abuela prorrumpían por toda la casa en aquella tarde.
Varias chicas de la servidumbre subían y bajaban las escaleras, la mayoría con un gesto de temor. Y no era para menos… ¡ver a la tía abuela molesta no era un asunto menor!
-¿Quién de ustedes fue la encargada de la limpieza de hoy?- el tono de la Sra. Elroy era autoritario la mayor parte del tiempo.
La mano temblorosa de una chica castaña se elevó poco a poco, debatiéndose entre hablar o no.
-¿Y entonces que significa esto, jovencita?- los ojos de Elroy la miraron causando un escalofrío en la chica.
-Y-yo… lo h-he limpiado esta mañana, señora- contesto temerosa.
-¿Me estás diciendo que lo que mis ojos ven es una ilusión?- pregunto retadoramente.
-N-no… e-esa no era mi intención, señora
Los ojos azules de Anthony observaron la escena desarrollada frente a él. Se sentía un poco culpable al ver las expresiones de la joven chica. Pero ese era el único método, esta vez tenía que lograrlo.
Aunque lamentaba tener que hacer que la joven soportará todo aquella, solo quería escuchar una frase, solo una frase era suficiente.
La Sra. Elroy yacía cruzada de brazos esperando una respuesta. La mucama jugaba con su delantal de forma nerviosa.
-V-verá señora… lo que pasa e-es…- ahí estaba. Pronto vendría el momento esperado, el pequeño Anthony presto toda su atención- e-el señorito Anthony… él estaba jugando y entonces trajo todo esto…
La mucama señalo la ancha cama cubierta de tierra y lombrices. Todo estaba hecho un desastre.
Las orbes cafés de Elroy miraron la travesura realizada, y después miró al pequeño rubio que estaba en un rincón no muy lejos de ahí.
-Anthony- su nombre había salido de la boca de Elroy, casi como si lo estuviera llamando.
El pequeñito estaba a punto de decirle claramente que él lo había hecho, pero entonces fue interrumpido abruptamente por la voz de la tía.
-Anthony no haría eso- termino de decir causando sorpresa en el rubio.
Ella se acercó hasta su sobrino y lo acogió en un abrazo, cargándolo con intención de salir de la habitación. Pero antes miró una vez más a la servidumbre.
-Limpien esto antes de que vuelva- dijo secamente y bajo con el niño en brazos.
Anthony miró el rápido movimiento ejecutado por todas las mucamas.
-Pero tía abuela, yo…- Anthony no podía permitir no ser regañado.
¡Incluso tenía las manos cubiertas de tierra! ¿Cómo podía decir eso la tía abuela?
-Vamos a que te limpien- le calló antes de que continuará- Mi pequeño Anthony siempre debe estar limpio.
Anthony se rindió, no habría poder humano para lograr su objetivo.
Quizás lo que estaba mal era algo en la cabeza de la tía abuela.
[…]
Cuando el pequeño Anthony fue vestido nuevamente con ropas limpias después de ser bañado, se dispuso a salir de su habitación.
Claro que aquel cuchicheo por parte de las mucamas no había pasado desapercibido para él.
Sus primos, los hermanos Cornwell ¡llegarían a vivir con ellos!
La sonrisa de Anthony no se hizo esperar. Con nuevas energías se dirigió al jardín para regar las hermosas rosas de su madre.
De ahora en adelante ya no estaría solo y con algo de suerte lograría que sus primos le ayudaran para lograr su cometido, quizás llevándose tremendo regaño los tres…
Si mi memoria no me falla aún recuerdo que los que siempre se ganaban los regaños de la tía abuela eran los hermanos Conrwell de ahí surgió la idea. Realmente creo que Anthony quería intentarlo, pero nunca lo logro, así que al final prefiero aprovecharse de eso
Gracias nuevamente por su apoyo