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LA ISLA BONITA PARTE 2 Y FINAL
Hemos perdido la cuenta del tiempo que ha pasado, se supone que este viaje sería de un mes pero el hundimiento inexplicable de nuestro crucero nos tiene ya rumbo a nuestro tercer mes de naufragio. Es increíble lo que el aislamiento le hace a las personas. Aun recuerdo la madrugada que llegamos a esta isla en medio de la nada, no se ni en qué lugar del mundo nos encontramos. Es un terrón verde y con agua potable en medio de la nada. A veces creo que morí y estoy en algún tipo de limbo al que mi disipada manera de vivir me terminó trayendo, la verdad ignoro cual sea la explicación de lo que nos ha pasado a mi y a este peculiar grupo de individuos.
De la nada me vi acompañada por unas mujeres muy especiales, que quizá en otra circunstancia no serían con quienes entablaría amistad, sin embargo hay que ver lo que el hambre, la sed, el miedo y la necesidad de sobrevivir te empujan a hacer llegado el momento. Como lo demostró desde el principio el rubio grandote, se volvió en el líder de nuestro "clan", como terminamos llamándonos y nos ayudó a no perder la cabeza de la angustia que el sabernos abandonados nos produjo. A como pudimos buscamos comida y fue un gran alivio encontrar muchos arboles frutales y Stear, como terminamos llamandóle al joven de lentes, con su gran ingenio nos proporcionó herramientas y multiples gadgets para resolver pequeñas necesidades que fueron surgiendo, lo curioso es que él y Gezabel se hallaron de inmediato, formandose primero como amigos y compañeros de experimentos y repentinamente los vimos muy sospechosos, al grado que la sombria actitud de Geza, aunque no desapareció del todo, se vio disminuida ya que se le veía sonreír cuando estaba con él. Al poco tiempo ya tenían su cabaña donde vivían juntitos, y las bromas no se hicieron esperar entre las mujeres quienes a costa de ella nos distraíamos de nuestra realidad como náufragos.
Isabel y Terry discutían todo el día, si él decía que había que ir al norte de la isla para explorar y buscar la posibilidad de otros humanos, ella de inmediato le decía que era una tontería, que de haber humanos ya los hubiéramos encontrado o ellos a nosotros. Peleaban por las cosas más ridículas hasta que en una ocasión, harta de escucharlos pelear, la Condesa Wendolyn les dijo con su proverbial elegancia "Ustedes dos necesitan irse a follar, ya dejen de jorobarme que me tienen hasta el cogote con su tensión sexual, par de tontos!!"
Y efectivamente, se fueron discutiendo a la selva y no regresaron en 5 días, y cuando al fin lo hicieron ella venía tarareando una canción en español con una sonrisa de oreja a oreja, que evidenciaba que habían seguido al pie de la letra la amable recomendación de la condesa.
Por cierto, la Condesa, ahhh que mujer tan sacrificada! Lo que tiene de inteligente, interesante, distinguida, atractiva e ingeniosa, lo tiene de paciente con ese pimpollo marido suyo que es un adonis, pero lo que tiene de guapo lo tiene de petulante, resbaloso e irritante. Se la pasa coqueteando con las sobrevivientes y siendo honestas, es encantador y tiene un no se que, serán las feromonas, no se ni como explicarlo, que a todas de una forma u otra nos ha movido el tapete. Lo más triste es la forma como a las espaldas de nuestra Condesa él y la "morena, sexy de cuerpo ardiente" Igzell descararon el nivel de intimidad que había entre ellos. Hemos tenido que intervenir en varias ocasiones para que las "Leagan", como las llamamos a ambas, no se maten cuando empiezan las recriminaciones. Y ese baquetón de Neil, sólo sonríe y a mi me ha dado nalgadas cuando no me doy cuenta. Me provoca quitarle la sonrisa de la boca cuando lo hace pero prefiero hacerme la que no me doy cuenta, como TODAS lo hacen, a mi no me engañan. No hay ni una mujer en esta isla que no se deje al menos pellizcar la mejilla por ese sinvergüenza.
Cherry por su parte coqueteó con todos, es una joven muy alegre y sin prejuicios, no se hasta que grado llegaron sus escarceos con los caballeros con quienes compartimos esta prisión en la que estamos varados, sin embargo ya tiene semanas que la veo muy cercana al señor Johnson. La verdad a mi me sorprendió ver ese emparejamiento por lo dispares que son ambos, él adusto, parco, muy centrado y que no dice ni una palabra de más, y ella como castañuelas españolas, sin poderse quedar quieta ni un instante. Los encontré hace poco en la cascada de agua dulce de donde obtenemos nuestros suministros y a donde acostumbramos irnos a bañar, muy juntitos, de hecho ella estaba sentada en las piernas de él. No creo que George la haya estado contando un cuento infantil a la niña, opté por retirarme y regresar después a llenar mis recipientes de agua, para no interrumpir lo que evidentemente iba a pasar
Yo por mi parte, veo a mi bello amigo Albert como no se desespera, como a pesar de que el tiempo pasa, los días vuelan y seguimos varados en este lugar perdido de la mano de Dios. Tenemos cabañas que entre él y los hombres levantaron, han hecho todo lo posible para que el tiempo que estemos aquí, si es que algún día nos rescatan, sea lo más seguro y cómodo posible. A veces noto que se me queda viendo. La soledad es canija y puede hacer que la persona que jamás llegaste a imaginar en circunstancias normales, se sienta atraída por ti.
Pero me da miedo seguirle la corriente en sus insinuaciones, tiendo a ser muy intensa y me temo que si caigo en sus redes nunca podré recuperarme.
Hay noches, como esta, que se escuchan los gemidos de lo que hacen los demás en la oscuridad de sus chozas. El y yo estamos con la fogata vigilando el horizonte, como acostumbramos hacerlo con la esperanza de divisar alguna nave que nos pueda rescatar y solo nos miramos sonrojándonos de escuchar el jolgorio que nuestros amigos traen. La Condesa y Miss Igzell, a mi no me engañan, bien que se entretienen las 2 con su semental, fingen odiarse pero ya las he visto como se miran furtivamente queriendo ocultar el arreglo pasional que traen las dos con el verriondo de Neal Leagan! Gezabel encontró en Stear el compañero idóneo con el que practica actividades poco ortodoxas para las parejas enamoradas, como latigarse y amarrarse entre si. Ella ya tiene una colección de navajas de obsidiana que él le ha ayudado a elaborar y que ella atesora de una forma que a mi me da un poquito de miedo. Isabel y Terry, bueno, él no menciona para nada a su novia, se la pasa tan bien con ella aun cuando eventualmente se pelean y ella lo saca a patadas de la cabaña que comparten, ese par se ama sin duda! Cherry va y viene de la cabaña donde dormimos juntas a la de Albert y George, cuando el wero está conmigo, como esta noche.
El me sonríe, al final es sólo un hombre con necesidades como cualquiera, y me cierra un ojo levantando el brazo para invitarme a acercarme a él. Yo lo miro sin poder contener mi sonrisa y me acerco a su costado para seguir con nuestra vigilancia abrazados. Al final yo también soy una mujer, con necesidades como cualquiera y con semejante tipazo, quien se va a poner remilgosa??
FIN
