- Llegamos pollo, llegamos...
- Ya te habías tardado, me haces trabajar como loca y escribes cuanto se te pega la gana.
- No te quejes, es para hacerla de emoción. Mejor sigue trabajando para presentar muchos aportes.
Aqui nuestro primer aporte en conjunto desde El Real Colegio San Pablo... El art como ya saben es de Jeann Pollifrodi y la historia es de mi inspiración. Sra una serie de varios arts asi que esperen las otras mini historias...
La nieve caía una vez más, embestido con un abrigo negro el caminaba en medio de aquella noche que prometía tormenta, el cielo oscuro se veía asaltado por pequeños copos de nieve que apenas comenzaban a caer temerosamente, derritiéndose apenas llegaban al suelo. Aquel viento helado que comenzó a soplar le calo en la nuca a pesar de su larga cabellera la cual había pensado varias veces en cortar sin atreverse a hacerlo. “si lo hago ella tal vez ya no me reconozca” … pensaba a menudo, cuando en su mente la imagen de aquella chica, aquel primer amor, volvía a su memoria.
Aquel día se había decidido a buscarla de nuevo, aquel día volvía sus pasos de nueva cuenta como cuando llego por primera vez a América, entonces todo parecía posible y a pesar de la soledad que sentía en aquella ocasión, tenía la esperanza de triunfar por sus propios medios. En ese entonces sufría la perdida del primer amor pero entonces era el quien se había alejado por el bien de ella, pensando que eso traería su felicidad.
“Que ironica ea la vida pues quien fuera a pensar que años despues ella lo hiciera por la misma razón y en ambas ocasiones los dos hemos sufrido” –pensó.
Alzo el rostro en medio de los recuerdos y camino hasta el Hogar de Ponny recordando el camino con cada paso, trayendo imágenes a su memoria del primer encuentro con aquellas mujeres, con aquel árbol, con aquel paisaje. Sabía que ella estaba ahí pero no estaba seguro de que lo esperara, sin embargo quería creer que si lo hacía. Quería creer que a pesar de la distancia, el tiempo, la vida, ellos seguían destinados a encontrarse y a seguir juntos. Si no era así al menos deseaba verla para decirle que había vuelto y que retomaría su vida para alzarse de nuevo, que los años transcurridos no habían sido en vano y que la buscaba porque ella había sido su motor para continuar, quería agradecerle por todo lo que había vivido con ella aunque… aunque todo hubiera sido tan doloroso...
- Sin que tu lo supieras me inspiraste para retomar mi camino y seguir adelante. –murmuro a sus adentros.
A lo lejos vio las luces de aquel lugar, pequeño pero calido, lejano pero añorado y entonces dio media vuelta y se alejo. Era una noche fría, pero habia dicho lo que tenia que decir y no importaba si ella no lo habia escuchado, no era necesario que lo hiciera porque solo entonces se dio cuenta que esas palabras que quería decirle de frente eran las que el necesitaba escuchar para si mismo.
A lo lejos vio tambien aquel gran árbol que movia sus ramas desnudas con la fuerza del viento, recordándole que no importaba cuan fuerte fuera siempre habría algo que pudiese moverlo, sonrio y continuo caminando ya no sumido en sus pensamientos del pasado, sino mirando al futuro.
“Algun dia nos encontraremos Candy, no hoy y tal vez no pronto pero lo haremos y entonces te demostrare que los sueños si se pueden lograr”…
- Ya te habías tardado, me haces trabajar como loca y escribes cuanto se te pega la gana.
- No te quejes, es para hacerla de emoción. Mejor sigue trabajando para presentar muchos aportes.
Aqui nuestro primer aporte en conjunto desde El Real Colegio San Pablo... El art como ya saben es de Jeann Pollifrodi y la historia es de mi inspiración. Sra una serie de varios arts asi que esperen las otras mini historias...
La nieve caía una vez más, embestido con un abrigo negro el caminaba en medio de aquella noche que prometía tormenta, el cielo oscuro se veía asaltado por pequeños copos de nieve que apenas comenzaban a caer temerosamente, derritiéndose apenas llegaban al suelo. Aquel viento helado que comenzó a soplar le calo en la nuca a pesar de su larga cabellera la cual había pensado varias veces en cortar sin atreverse a hacerlo. “si lo hago ella tal vez ya no me reconozca” … pensaba a menudo, cuando en su mente la imagen de aquella chica, aquel primer amor, volvía a su memoria.
Aquel día se había decidido a buscarla de nuevo, aquel día volvía sus pasos de nueva cuenta como cuando llego por primera vez a América, entonces todo parecía posible y a pesar de la soledad que sentía en aquella ocasión, tenía la esperanza de triunfar por sus propios medios. En ese entonces sufría la perdida del primer amor pero entonces era el quien se había alejado por el bien de ella, pensando que eso traería su felicidad.
“Que ironica ea la vida pues quien fuera a pensar que años despues ella lo hiciera por la misma razón y en ambas ocasiones los dos hemos sufrido” –pensó.
Alzo el rostro en medio de los recuerdos y camino hasta el Hogar de Ponny recordando el camino con cada paso, trayendo imágenes a su memoria del primer encuentro con aquellas mujeres, con aquel árbol, con aquel paisaje. Sabía que ella estaba ahí pero no estaba seguro de que lo esperara, sin embargo quería creer que si lo hacía. Quería creer que a pesar de la distancia, el tiempo, la vida, ellos seguían destinados a encontrarse y a seguir juntos. Si no era así al menos deseaba verla para decirle que había vuelto y que retomaría su vida para alzarse de nuevo, que los años transcurridos no habían sido en vano y que la buscaba porque ella había sido su motor para continuar, quería agradecerle por todo lo que había vivido con ella aunque… aunque todo hubiera sido tan doloroso...
- Sin que tu lo supieras me inspiraste para retomar mi camino y seguir adelante. –murmuro a sus adentros.
A lo lejos vio las luces de aquel lugar, pequeño pero calido, lejano pero añorado y entonces dio media vuelta y se alejo. Era una noche fría, pero habia dicho lo que tenia que decir y no importaba si ella no lo habia escuchado, no era necesario que lo hiciera porque solo entonces se dio cuenta que esas palabras que quería decirle de frente eran las que el necesitaba escuchar para si mismo.
A lo lejos vio tambien aquel gran árbol que movia sus ramas desnudas con la fuerza del viento, recordándole que no importaba cuan fuerte fuera siempre habría algo que pudiese moverlo, sonrio y continuo caminando ya no sumido en sus pensamientos del pasado, sino mirando al futuro.
“Algun dia nos encontraremos Candy, no hoy y tal vez no pronto pero lo haremos y entonces te demostrare que los sueños si se pueden lograr”…