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Inspirado en "Kiss and say Goodbye" de The Manhattans
La mujer se encontraba revisando unas cajas antes de mandarlas al desván, eran objetos que había mucho que no veía y creía que tampoco le daría uso, después de tantos años de ausencia en la villa de Escocia. De presto un sobre cae al suelo, se inclina para recogerla y todo el contenido se sale del interior dejando al descubierto viejos papeles, viejos recuerdos viejos amores.
Observa por un par de segundos la fotografía... y revive ese momento.
-Muchas gracias por haber venido hoy Elroy
-¿Qué sucede Fabricio? Tienes mala cara
-Te he llamado para darte una mala noticia, no podía esperar más tiempo
-Me estás asustando ¿Se puede saber qué sucede?
-Debido a mis obligaciones... y los que tú tienes...
El hombre duda un poco antes de continuar, sabe que es una excusa insuficiente
-¿Mis obligaciones? Fabricio, habla de una vez
Elroy estaba molesta, sus divagaciones le hacia entender que no era nada bueno lo que tiene que decir.
-Ésto es un adiós, te voy a echar de menos, pero he decidido... voy a casarme con Chloé
-¿Cómo dices?
-Es lo mejor, además tú estás prometida con William
-Pero quedamos en que nos escaparíamos, y que
-Olvida todo eso... creo que esto es lo que hay que hacer, me duele, pero no podemos seguir adelante.
-¿Ni siquiera lo vas a intentar?
Él hizo un movimiento de cabeza como negativa, Elroy se sintió morir, por unos segundos intentó procesar todo... quería patalear, pegarle un bofetada, gritar de histeria, el hombre que ella ama la estaba dejando.
Lo único capaz de hacer fue levantarse de su asiento y darle un último beso, como sellando una sentencia de dolor y pena para Fabricio.
Otra dama sentada en una mesa en el rincón observaba toda la escena, sabía que ellos todos los días se encontraban, que se amaban y pensaban escaparse. Pero eso último no lo pensaba consentir, y como pudo, tramo todo de tal manera para poner entre la espada y la pared al joven Fabricio, obligándolo de tal manera a tener de dejar a su gran amor. Ella intentó recuperarlo y le envió una fotografía donde estaba en el mismo restaurante de todos los días y donde le dió el último beso.
Días después Elroy lo vio mientras caminaba por la plaza, y por un instante todo a su derredor desapareció
-Te extraño
-Te echo de menos, no puedo mentir
-¿No lo vas a intentar? ¿No te echas para atrás?
-Vamos a besarnos y decirnos adiós
El aire meció los cabellos de la joven e inmediatamente continuó con su camino, le daba la espalda, pero pudo escuchar que el viento le traía ese susurro
-Te echo de menos madame Ardley
Años después de haber vivido ese amor de juventud encuentra la fotografía, suelta un suspiro de nostalgia al recordar que Fabricio, muy caballeroso rechazó sus sentimientos y que no accedía a escaparse junto a ella. Dos días después se casó, lo vio una sola vez antes de viajar a Estados Unidos con su esposo.
Volvió a guardar todo en el sobre, y lo guardó en la caja de sombrero junto a más cosas, tal vez más adelante le contaría a alguno de sus sobrinos o nietos sus aventuras amorosas de juventud, o simplemente dejará que alguien los encuentre y desempolve esos sentimientos, mientras que ahora sólo les puede decir
-Un beso y adiós, amor
la tia se enamoro y encima me la intercambian por las tretas de una arpia?
