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ADVERTENCIA: Este escrito puede contener situaciones y uso impropios de algunas palabras, por lo que no es apto para todo publico.
Si eres sensibles a ciertas tramas de horror, favor de no leer.
Cumpliendo segunto Reto de Geza 
"The world's the same I am to blame
She used my head like a revolver
The world's the same."
—Planet Queen—
ELLA USÓ MI CABEZA COMO UN REVOLVER
—Se equivocan—dijo con suma tranquilidad el productor artístico—, yo no he hecho nada, ha sido ella la que ha escrito su propio destino cual reencarnación de Elizabeth Bathory—una irónica y temblorosa sonrisa se estiraba de sus labios mientras que un par de lágrimas se desprendían de sus oscuros ojos café.
El castaño hombre negaba pausadas y repetidas veces con la cabeza mientras intentaba tragar saliva, pero el nudo que sentía en su garganta le hacía difícil esa tarea.
Empleados de mantenimientos, actores y los agentes de seguridad lo voltearon a ver: al fin había esbozado palabra desde que se le encontrara bebiendo y fumando al lado del cuerpo aparentemente sin vida de Eleonor Baker, mismo que se encontraba dentro de una tina llena de un dudoso liquido escarlata.
Todo el lugar era sacado de una de esas novelas negras del momento: plumas y cabezas de palomas, así como sus pieles y salpicaduras de sangres se hallaban esparcidos por el enmaderado suelo.
El que encontró aquel horroroso cuadro había sido unos de esos obreros que pertenecían al área de escenografía, quien se disponía a guardar algunos objetos sobrantes, este no se lo pensó dos veces para salir y regar la voz de que el señor Hathaway había perdido la cabeza, y que en medio de su locura había arrastrado a la veterana actriz Eleonor Baker…
Nadie podía dar crédito a lo que el anciano decía por lo que fueron a comprobar por sí mismos lo que se les fue dicho por el agitado hombre.
Hubo una sucesión de impresiones ante tal atrocidad: vómitos, lagrimas, gemidos, incluso, hasta desmayos; pero nadie se atrevió a dar unos de esos tan naturales gritos de horror…
En esos lugares, donde decenas de artistas teatrales desfilaban a todas horas, siempre había al menos un par de servidores de la justicia para mantener cierto orden o dar sus testimonios por si algún incidente sucedía; al menos ha sido así desde que sucediera aquel infortunio con la tan aclamada Susana Marlow, cuyo desafortunado accidente la dejó desprovista de una pierna todo por salvar al gran actor Terrence Grandchester, dicho incidente nunca fue esclarecido en su totalidad y para matar los cientos de comentarios que auguraba alrededor de lo que sucedió, los directivos decidieron sumar a su lista de gastos el pago por protecciones policiaca.
—Ella—señalando con un movimiento a la mujer en la tina—utilizó mi cabeza como un revolver—decía el director desde su posición ya que nadie se había animado a intervenir, ni siquiera el par de policía ya que estaban en espera de los cuerpo especial que se encargaba de esos complicados temas.
Algunos murmullos que denotaban ascos, lamentos y de maldición lograban colarse en las orejas del alcoholizado director quien seguía mostrando esa sonrisa carente de arrepentimiento.
—Ella no era una santa ¡Se equivocan todos los que la alababan, los que lamentan su ausencia de esta vida maldita! —continuaba con su perorata—. Ustedes deben agradecer que están ahí parados y no aquí—señalaba a los actores para luego apuntar hacia la sangre que cubrían las partes intimas de la rubia actriz. —. Ustedes no creerían las cosas que he hecho por esta mal agradecida, esta perra maldita…
Envuelto en su rabia, hizo el vano intento de ponerse de pies, pero su estado de ebriedad se lo impidió.
»Ella me obligaba a reclutar jóvenes promesas actorales, que tuvieran implantadas la inocencia; eso era de suma importancia para llevar a cabo su asqueroso ritual… «¿Cómo me obligaba?», se preguntaran—una sonrisa—, manipulando el amor que siempre he sentido por ella y, claro, con algunas sesiones sexuales en las que ella solo miraba mientras me cogía a otras y ella se tocaba frente a mi, porque nunca me permitió darle mas que unos simple besos en los labios, ya que si permitía que alguien mas que ella penetrara su intimidad «eso» entorpecería el ritual que la mantendría eternamente bella.
Una carcajada llena de frustración, incredulidad y odio.
» Y yo le creí todo, absolutamente todo; incluso me tragué la idea que lo de ella con el estúpido de Richard había sido un error y que esto no había traído consecuencias, ¡Y me hizo tremendo drama cual excelente actriz, donde dejaba ver su preocupación frente al espejo de arrugas imaginaria! Y fue allí donde, al ver su alterada preocupación ante la falta de colágeno, accedí a ayudarla a continuar con sus sanguinarias cosmetología.
Se relamía el hombre sus agrietados labios.
»Un treinta y uno de diciembre, mientras estábamos llevando a cabo una de esas reuniones con quien sería la victima de esa noche, toca a su puerta un gallardo muchachito al cual no pude vislumbrar bien desde la distancia, pues me encontraba detrás de una ventana y la jodida ventisca que hacia aquella noche no me facilitaba las cosas—proseguía el hombre sintiendo esa incomoda sensación que lo asaltaba cada vez que descubría o recordaba algún engaño—, dicha visita era la «supuesta consecuencia que no se había dado entre el actual duque de Grandchester y la talentosa actriz»—ironizó él señalándola con ambos brazos como si estuviera presentándola ante un venerado público—; según había dicho ella en aquel momento «no era nadie», porque si, la mujer le impidió el paso a su propio hijo al que no veía desde que este tenía cinco años, años en los que estuve yo en una gran gira por toda Europa, por lo que desconocía la existencia de este muchachito.
» Le creí que no era nadie importante, porque nadie le negaría el paso a un ser querido que va de visita en una noche donde la naturaleza parecía enojada con la humanidad—hizo una pausa—. Años después, se presenta el muchachito este pidiendo trabajo como actor, lo probé, como es natural; yo, bajo mi ignorancia, le extiendo mi manto y lo sumo a nuestro equipo.
» Pasan los días y nuestra gran Eleonor Baker regresa de su gira y que se topa con el joven haciendo un monologo de su papel pata lo obra que participaría, ella palidece y lo saca del escenario y comienzan una gran discusión en su camerino—se volvió el director hacia el cadáver de la mujer —¿Cómo fuiste tan malditamente inteligente para manipular aquella situación?— comienza a masajearse este el puente de la nariz al miso tiempo que hace un movimiento de negación con la cabeza— cuan estúpidamente enamorado estaba que te creía que las olas son productos de la magia y no del agua salada—una risotada.
» Pero las mentiras no duran cien años para ser descubiertas, mis queridos oyentes—decía de manera burlona el hombre al escuchar el revuelo de los presentes quienes les pedían que se callara de una buena vez—, descubrir su engaño no fue tarea difícil, lo difícil fue montar todos aquellos pesados equipos para que cayeran sobre el joven que me estaba acaparando toda la atención de la mujer por la que he hecho tanto..
Todos quedaron boquiabiertos al escuchar aquella confesión por parte del respetadísimo hombre.
» Nadie, ni ella se dio cuenta que todo fue un plan orquestado por mi persona para llamar su atención, aunque de cierta forma funcionó, de una forma no planeada, pero funcionó, ya que ella mismita llegó a la conclusión de que debía de maximizar sus tretas de esoterismo para que todo continuara yéndole bien, incluyendo entre sus satánicas forma de proceder a su hijo: Y adivinen a quien ella necesitaba para que todo eso se llevara a cabo—una carcajada—¡Exactamente! ¡A su fiel servidor! Pero esta vez no me conformaría con otras cosas y se lo deje claro, pero ella continuaba dándole largas a las cosas por lo que nunca volví a conseguirles a sus mentadas personas…
Decía el hombre pasando su pulgar por los labios mientras recordaba aquellos satisfactorios meses en donde la actriz se estaba dejando llevar por su paranoia, por lo que fue descuidándose y reaccionando a ciertos eventos de manera sumamente exagerada. Su cabello fue tornándose grisáceo y algunas ojeras acompañadas por minúsculas arrugas resaltaban en su rostro, tema que fue la noticia de motones de revistas por varias semanas consecutivas.
Lo mejor fue verla ante él humillada, bajo aquel estado de abstinencia involuntaria; la vió tan insignificante que algo dentro de su negro corazón se desprendió, por lo que le dijo al fantasma errante de la actriz: «hoy te preparare tu mágico baño», y la vio sonreír, volvió a ver ese indiscutible brillo en su mirada que le dieron ganas de besarla, cosa que hizo y ella correspondió como jamás lo había hecho, eso incrementó el odio en él.
» Esta sangre que ven aquí—jugaba con el escarlata liquido—como podrán ver, no es sangre humana, si no de palomas, cosa que ella ignoró hasta que se lo revele después de hacerla mía…ella decidió suicidarse—tomó una de las manos que estaba sumergida y mostró las heridas de las muñecas femeninas—, yo le brinde dos opciones: desposarse conmigo o acabar con su vida—rio, pero esta vez un doloroso llanto lo acompañó, recogiendo sus piernas en donde apoyó su cabeza.—ella prefirió la muerte antes de compartir una vida junto a mi…
Los agentes especiales, junto a un equipo de paramédicos y bomberos, llegaron al lugar, halaron salvajemente el hombre:
—Señores, no creerían las cosas que he hecho por ella, cobardemente, pero sin vergüenza—decía el hombre a los agentes que los trasladaban con esposas, Roberth Hathaway iniciaba nuevamente la historia que les contara a su equipo de trabajo, cosa que haría en muchas ocasiones a partir de ese momento.
FIN
Última edición por igzell el Mar Abr 12, 2022 5:15 pm, editado 2 veces
ZAZ!! 
