Fanny volvía a leer una vez más su libro favorito: Candy Candy, la historia definitiva. Era ya la 35 vez que lo hacía.
A los 45 años de edad se consideraba la fan #1 de la historia creada por su autora preferida Keiko Nagita. Viajó a Francia a conocerla y tenía buenas fotos junto a ella. Coleccionaba artículos de Candy Candy, siempre y cuando su bolsillo le permitía y tenía un póster de Terry en el techo de su habitación para ser lo primero y último que viese.
La castaña se sabía la trama de cabo a rabo y estaba profundamente enamorada de Terry.
Tenía ya dos años felizmente divorciada de un hombre que consideraba era el Albert de su vida. Siempre se decía que su matrimonio parecía más dos hermanos viviendo juntos que una pareja de esposo.
El matrimonio fue tranquilo, sin altos, ni bajos. Monótono.
Siempre vivía suspirando por emoción, por sentir algo diferente a una taza de té caliente por las noches.
No tuvieron hijos. Él no quería. Y ahora, ella lamentaba el haber sido tan Ya condescendiente con su antiguo esposo. Ya no estaba en edad de niños y menos tenía las fuerzas para criarlos.
Se encontraba sola y así se quedaría.
Entonces suspiró.
«Qué no daría yo por estar en la historia de Candy Candy y conocer a Terry», pensó mientras cerraba los ojos y dejaba que el sueño la venciera.
Fanny abrió sus ojos y se encontró en un lugar totalmente diferente. Se levantó corriendo de la cama, no obstante la puerta la hizo asustarse. Una mujer con cara de pocos amigos entraba con un periódico en sus manos.
— Esto no puede volver a suceder, Susana.—gritó la mujer— ¿Cómo es posible que este actorcito de cuarta te robe la primera plana?
— Yo… —intentó hablar, pero esta en trance. Era nada más que Susana Marlowe...
— No me vengas con excusas, tu padre siempre se distinguió por tener el apellido Marlowe en primera plana. Sus días de Romeo están contados.
Entonces entendió que realmente se encontraba dentro del libro de Candy Candy y que ahora era Susana Malowe antes de que Candy visitara NY. Podría quedarse con Terry, pero moriría al final o podría cambiar la historia… Aunque ¿se molestaría Nagita por ello…?
CONTINUACION, CONTESTANDO EL RETO
Fanny conocía de memoria la historia, apenas se dio cuenta de lo que pasaba decidio tomar la historia en sus manos, si, era cierto que le encantaba el final de Nagita pero, no estaba muy segura de como funcionaba su presencia en la historia y si al seguir la historia su curso ella podria sobrevivir al final… Claro que, sin Susana pues… era demasiado difícil decidir, lo único cierto era que su madre, es decir la madre de Susana, no iba a decidir por ella.
- Sabes que, ya me harte, desde este momento no hare caso a lo que digas.
- Susana!!!
- Seamos realistas, yo no soy tu y tu no eres yo, si no quieres que me ganen las portadas págame clases de actuación, paga un buen asesor de imagen y déjate de tonterías, que si no tengo talento pues no lo tengo y ya, Terry se lo ha ganado a pulso.
La madre de Susana estaba atónita, su hija, su hijita nunca le contestaría asi, llena de rabia le dio una bofetada dejando a Fanny en shock, la verdad era que no se lo esperaba, pero una vez que sintio el ardor en la mejilla se le lanzo como si no se tratara de su madre, bueno, no es que lo fuera, asi que no habia problema que aquella loca recibiera una buena lección de parte de ella, era su momento… los mechones del pelo por aquí, un botón por alla, unos moretones mas o menos, vaya arrastrada que le dio mientras la mujer atónita, furiosa, asustada comenzaba a gritar por ayuda, su hija se habia vuelto loca. A su auxilio llegaron un par de chicos del teatro, si, efectivamente estaban en el teatro y todos se dieron cuenta que la dulce y hermosa rubia se habia vuelto loca, con eso no contaba Fanny, pero en cierta forma sirvió para sus planes, Susana estaba fuera de escena y justo ese dia, unos minutos mas tarde Terry llegaría a ensayar pero con tal alboroto se cancelaron los ensayos y por suerte el no estaba cuando aquellas luces cayeron sobre el escenario, nunca sabría que Susana, es decir Fanny, le salvaría la vida pero de otra forma. Por lo pronto, se llevaron a Susana, digo, Fanny a una casa de reposo, su madre decidio internarla debido a esa crisis de locura sufrida, pronto la actriz fue suplida por Karen y la historia continuo su curso.
Fanny desde el hospital, medio drogada escuchaba la noticia de que el actor Terrence Granchester se casaba con una enfermera desconocida, tambien se entero que sus primos fueron parte del cortejo, Albert, un vagabundo que resulto ser el millonario padre adoptivo de la chica, la llevo al altar. De pronto un sonido se escucho en su cabeza, cerro los ojos y el reloj marco las 12 del medio dia, volvio a abrirlos y entre sus manos se encontraba aquel libro, la historia definitiva, la cual hablaba de los dias en Familia de Candy y Terry, los hijos que tuvieron, el final maravilloso que ella deseaba y en los créditos ya no estaba el nombre de Nagita, sino el de ella… Y Susana Marlowe? Bueno, se decía que logro demandar a su madre por enviarla al manicomio y se hizo famosa haciendo libros de superación personal.
FIN.
A los 45 años de edad se consideraba la fan #1 de la historia creada por su autora preferida Keiko Nagita. Viajó a Francia a conocerla y tenía buenas fotos junto a ella. Coleccionaba artículos de Candy Candy, siempre y cuando su bolsillo le permitía y tenía un póster de Terry en el techo de su habitación para ser lo primero y último que viese.
La castaña se sabía la trama de cabo a rabo y estaba profundamente enamorada de Terry.
Tenía ya dos años felizmente divorciada de un hombre que consideraba era el Albert de su vida. Siempre se decía que su matrimonio parecía más dos hermanos viviendo juntos que una pareja de esposo.
El matrimonio fue tranquilo, sin altos, ni bajos. Monótono.
Siempre vivía suspirando por emoción, por sentir algo diferente a una taza de té caliente por las noches.
No tuvieron hijos. Él no quería. Y ahora, ella lamentaba el haber sido tan Ya condescendiente con su antiguo esposo. Ya no estaba en edad de niños y menos tenía las fuerzas para criarlos.
Se encontraba sola y así se quedaría.
Entonces suspiró.
«Qué no daría yo por estar en la historia de Candy Candy y conocer a Terry», pensó mientras cerraba los ojos y dejaba que el sueño la venciera.
Fanny abrió sus ojos y se encontró en un lugar totalmente diferente. Se levantó corriendo de la cama, no obstante la puerta la hizo asustarse. Una mujer con cara de pocos amigos entraba con un periódico en sus manos.
— Esto no puede volver a suceder, Susana.—gritó la mujer— ¿Cómo es posible que este actorcito de cuarta te robe la primera plana?
— Yo… —intentó hablar, pero esta en trance. Era nada más que Susana Marlowe...
— No me vengas con excusas, tu padre siempre se distinguió por tener el apellido Marlowe en primera plana. Sus días de Romeo están contados.
Entonces entendió que realmente se encontraba dentro del libro de Candy Candy y que ahora era Susana Malowe antes de que Candy visitara NY. Podría quedarse con Terry, pero moriría al final o podría cambiar la historia… Aunque ¿se molestaría Nagita por ello…?
CONTINUACION, CONTESTANDO EL RETO
Fanny conocía de memoria la historia, apenas se dio cuenta de lo que pasaba decidio tomar la historia en sus manos, si, era cierto que le encantaba el final de Nagita pero, no estaba muy segura de como funcionaba su presencia en la historia y si al seguir la historia su curso ella podria sobrevivir al final… Claro que, sin Susana pues… era demasiado difícil decidir, lo único cierto era que su madre, es decir la madre de Susana, no iba a decidir por ella.
- Sabes que, ya me harte, desde este momento no hare caso a lo que digas.
- Susana!!!
- Seamos realistas, yo no soy tu y tu no eres yo, si no quieres que me ganen las portadas págame clases de actuación, paga un buen asesor de imagen y déjate de tonterías, que si no tengo talento pues no lo tengo y ya, Terry se lo ha ganado a pulso.
La madre de Susana estaba atónita, su hija, su hijita nunca le contestaría asi, llena de rabia le dio una bofetada dejando a Fanny en shock, la verdad era que no se lo esperaba, pero una vez que sintio el ardor en la mejilla se le lanzo como si no se tratara de su madre, bueno, no es que lo fuera, asi que no habia problema que aquella loca recibiera una buena lección de parte de ella, era su momento… los mechones del pelo por aquí, un botón por alla, unos moretones mas o menos, vaya arrastrada que le dio mientras la mujer atónita, furiosa, asustada comenzaba a gritar por ayuda, su hija se habia vuelto loca. A su auxilio llegaron un par de chicos del teatro, si, efectivamente estaban en el teatro y todos se dieron cuenta que la dulce y hermosa rubia se habia vuelto loca, con eso no contaba Fanny, pero en cierta forma sirvió para sus planes, Susana estaba fuera de escena y justo ese dia, unos minutos mas tarde Terry llegaría a ensayar pero con tal alboroto se cancelaron los ensayos y por suerte el no estaba cuando aquellas luces cayeron sobre el escenario, nunca sabría que Susana, es decir Fanny, le salvaría la vida pero de otra forma. Por lo pronto, se llevaron a Susana, digo, Fanny a una casa de reposo, su madre decidio internarla debido a esa crisis de locura sufrida, pronto la actriz fue suplida por Karen y la historia continuo su curso.
Fanny desde el hospital, medio drogada escuchaba la noticia de que el actor Terrence Granchester se casaba con una enfermera desconocida, tambien se entero que sus primos fueron parte del cortejo, Albert, un vagabundo que resulto ser el millonario padre adoptivo de la chica, la llevo al altar. De pronto un sonido se escucho en su cabeza, cerro los ojos y el reloj marco las 12 del medio dia, volvio a abrirlos y entre sus manos se encontraba aquel libro, la historia definitiva, la cual hablaba de los dias en Familia de Candy y Terry, los hijos que tuvieron, el final maravilloso que ella deseaba y en los créditos ya no estaba el nombre de Nagita, sino el de ella… Y Susana Marlowe? Bueno, se decía que logro demandar a su madre por enviarla al manicomio y se hizo famosa haciendo libros de superación personal.
FIN.