ART DE POLLIFRODI
EN EL CAMERINO
BY GEZABEL
Su insistencia fue mucha, el soborno no tanto, pero al fin logro que su esfuerzo fuera recompensado al conseguir el pase al camerino del actor al cual llevaba íntimo amigo, quien podría dudarlo de una señorita de alta sociedad como lo era Eliza Leagan. Camino por los polvorientos pasillos del teatro, entre cuerdas y cortinas viejas, con cada paso que daba se quejaba, no obstante no daba marcha atrás.
Al llegar fingió tocar la puerta, miro alrededor y al ver que nadie le prestaba atención entreabrió la puerta asomándose de a poco, ciertamente estaba en el camerino de Terry Grandchester, lo notaba por la cantidad de flores que se encontraban dentro, termino por meterse y comenzó a curiosear pensando, tal vez, que el actor habría salido, pero en eso estaba cuando detrás del vestido Terry salió enojado por ser interrumpido a medio cambiar.
- Les he dicho que…!
- Terry!! Pensé que no estabas, estaba a punto de irme sin verte.
-
Terry no podía creer lo que veían sus ojos, a quien menos esperaba ver era a Eliza con aquella sonrisa torcida en el rostro mirándolo fijamente.
- No sé quién te dejo pasar, pero te voy a pedir amablemente que te vayas de aquí.
- Pero como, si apenas he llegado. –dijo observando fijamente el pecho del chico quien no se dio cuenta que su camisa estaba abierta. – te ves más apuesto que antes.
Al sentir la mirada casi desnudándolo Terry trastabillo intentando al mismo tiempo torpemente cerrar su camisa, Eliza sonrió sordamente y se giró fingiéndose avergonzada.
- De saber que te encontraría asi hubiera tocado más fuerte. –dijo fingiendo que lo había hecho. – pero como nadie abrió pues decidí entrar a dejarte este regalo.
- Llévate tu regalo, no somos amigos ni nada para que me des un obsequio, no sé qué tramas pero no te quiero cerca.
- Tú te lo pierdes, -dijo girándose molesta- conmigo te hubiera ido mejor que con la huérfana esa, pero bueno ya vi lo que tenía que ver –comento sardónicamente- me voy, pero tal vez vuelva a ver si te encuentro de mejor humor.
Terry termino de abrocharse, corrió a cerrar la puerta con pestillo y maldijo mientras que Elisa salía sudando emocionada por haber visto a Terry en aquel atuendo.
Uff, espero que la próxima salga sin pantaloncillos. – pensó mientras reía bajito imaginándolo.