Art. Betty Graham
Todo estaba listo, solo esperaba que llegará la niñera, Alvin estaba inquieto, se removia entre sus brazos, sabía que su madre se iría y lo dejaría solo. Era difícil para ella dejar a su bebé con la niñera y lo peor, dejarlo llorando.
-- Tranquilo, bebé - lo balanceo un poco entre sus brazos para tranquilizarlo, pero nada.
La puerta fue tocada un par de veces, se levantó del sofá y se encaminó para abrirla.
-- Puntual como siempre, Miriam -- admiro, como siempre, la responsabilidad de la mujer a la que le confiaba lo que más amaba en este mundo.
Miriam era una conocida de Albert, no sabía que tipo de relación había entre ellos, pues su hermano era muy reservado y a ella no le gustaba entrometerse en su vida privada.
Con todo el dolor de su alma, dejó a su pequeño en brazos de Miriam, acomodó su uniforme blanco y camino hasta la avenida para tomar un taxi. Tuvo suerte, ya que no espero mucho en conseguir uno.
-- ¿Candy? -- preguntó el chico de cabellos castaños y aspecto salvaje que conducía el taxi.
-- ¿Tom ? -- preguntó de regreso impresionada, hacia casi cinco años que no lo veía.
Ellos se habían graduado juntos de secundaria, ambos fueron grandes amigos.
-- Sube -- pidió con una enorme sonrisa. La rubia subió al asiento trasero -- ¿A dónde la llevo, MY Lady? -- recito galante
Candy rio ante el atrevimiento de su amigo, él siempre era así.
-- Esta es la dirección-- le entregó un papel donde había apuntado la dirección. Tom comenzó a conducir hasta el lugar -' ¿Qué tal te va? -- interrogó.
-- Bien, soy veterinario. Recuerdas que te comenté que ese era mi sueño desde niño, -- comenzó con entusiasmó-- trabajo en el auto que me regaló mi madre por mi graduación, para ayudarme a costear la renta de mi apartamento. Y, ¿Qué hay de ti? Estas muy hermosa, tu mirada refleja mucha madurez, como si tu vida hubiera pasado por una transición.
-- Soy madre, tengo un hijo precioso -- respondió orgullosa, Tom abrió los ojos con asombro -- hoy empiezo a trabajar como enfermera personal de un hombre evidente.
-- Me alegra lo de tu trabajo, pero, ¿enserio eres madre? ¿como se llama tu hijo? ¿cuando nació? ¿Estás casada? ¿Quién es el padre? Según lo que escuché, seguiste con el granuja de Terry después de graduarnos.
Las preguntas de su amigo estaban taladrando en sus oídos, pero ella sabía que podía confiar en el y decirle la verdad. Le contó solo lo más importante de su relación con Terry, él solamente la escuchó en silencio. De repente, esraciono el auto, entonces supo que había llegado.
-- Fue un placer verte de nuevo, Candy -- dijo. Sacó una tarjeta de su billetera y se la entregó-- Esta es mi tarjeta, puedes llamarme cuando quieras.
-- Me has caído como anillo al dedo, Tom -- confesó, ¿Podrás buscarme cada mañana en la misma dirección de hoy y traerme aquí? -- Tom asintió en respuesta -- Nos vemos luego, te llamaré para ponernos de acuerdo.
Le entregó el dinero, él cual este rechazo, pero ella insistió y no le quedó más que aceptarlo. Estaba por bajarse del taxi, pero Tom la tomó de la mano.
-- Lamento mucho lo que pasó con Terry -- murmuró con pena.
-- Yo también lo lamento-- respondió.
Continuará.....
Última edición por Pecas TG el Mar Abr 30, 2024 9:30 pm, editado 1 vez