Buenas noches mis queridas combatientes Sí, ya saben que si me aparezco por acá no puedo dejar de ladp mis trincheras, así que vengo con todo esta noche. Aunque nuevamente me este volando mis horas de sueño que mañana de seguro pagaré en el trabajo
Pero no importa, esta noche les hago entrega de mi tercer aporte para el grupo de "Amigas y Rivales"
Como verán, nuevamente he venido con una pequeña serie de drabbles, no acostumbro a escribir demasiado, así que nuevamente les traigo un pequeño texto. Esta vez la temática es "Kazoku" que es la palabra japonesa utilizada para "Familia".
Mi intención es hablar un poquito de los hijos de algunos de los personajes de Candy Candy, y aunque será algo pequeño espero que sea significativo.
Comenzamos con el personaje principal, nuestra querida pecosa. Cuando lo lean, seguro sabrán quien es el padre de su hijo mi intención era que estos drabbles no especificarán alguna pareja, pero cuando comence a escribir el de Candy, recorde un pequeño minific que hice por el cumpleaños de Anthony y que hablaba sobre el hijo de Candy. Basandome en eso, he utilizado algunas cosillas de ese minific, pero no es necesario que lo lean para poder entenderlo. Sí aún así desean leerlo pueden buscarlo en Fanfiction bajo el título: "Un príncipe en la Colina"
Así que comenzamos, espero sea de su agrado.
Serie de Drabbles: KAZOKU
"Tipos de Amor"
Drabble #1
"Tipos de Amor"
Drabble #1
Había pasado tiempo desde la última vez que Candy había entrado en aquella habitación que guardaba todos los bellos recuerdos que había adquirido en su adolescencia.
De vez en cuando le gustaba rememorar todo lo bueno que había pasado en su vida y que la habían convertido en la mujer que era ahora. Experiencias amargas y tristes, felices y divertidas… todo era parte de crecer y madurar.
Candy siempre lo había visto de esa manera, pero la mayoría de las personas que había a su alrededor aún se preguntaban cómo era que, a pesar sus vivencias, la hermosa chica de cabellos rubios siempre llevaba una sonrisa en el rostro.
— ¿Estás ahí, mamá? — una dulce vocecilla que ella conocía a la perfección se escuchó al otro lado de la puerta, interrumpiendo sus pensamientos.
— ¿Qué pasa, Anthony? — preguntó una vez que abrió la puerta y se topó con aquellos ojos verdes llenos de curiosidad tratando de observar lo que había detrás de su madre. — Pensé que aún seguías en el jardín.
— Ya he terminado de regar el rosedal — exclamó el pequeño, y se abrió paso con confianza llegando hasta un pequeño cofre que Candy había mantenido abierto observando antes de la interrupción de su pequeño hijo.
— ¿Ahora sí me enseñaras lo que habías prometido? — el niño mostró su mirada suplicante, que la mayoría de las veces surtía efecto, especialmente con su padre.
Candy sonrió al ver a su hijo tan interesado en todo lo que ella le platicaba. No había olvidado las muchas preguntas que le había hecho después de que visitarán la colina de Pony, y seguramente todo había venido a raíz de aquel curioso encuentro.
— Ven aquí — ella lo atrajo con cariño y lo sentó sobre sus piernas.
Acercó el cofre y sacó una de las fotografías que había dentro.
— ¡Sí! ¡Es la persona con la que me encontré! — exclamó con emoción — ¡Es tío Anthony!
— ¿”Tío”? — preguntó ella.
— Dijo que podía llamarlo así. Era muy extraño llamarlo señor... — el pequeño de cabellos rubios dudó unos segundos — pero creo que es demasiado joven para llamarlo tío. No estoy seguro…
— Considerando que es sobrino de Albert, creo que lo más atinado sería llamarlo primo... — susurró la pecosa para sí misma, pero rápidamente negó con la cabeza — Esta bien, puedes llamarlo tío.
No había necesidad de confundir más a su hijo, así que no importaba realmente la forma en la que lo llamará.
— ¿Y entonces? ¿Me dirás quién es? — volvió a preguntar el niño — ¿Por qué me llamo igual que él?
— Porque tu papá y yo decidimos ponerte el nombre de él. Ambos lo decidimos porque es una persona que ambos queremos mucho.
Sus ojos verdes nuevamente se llenaron de duda.
— Él… Anthony era una persona muy especial para mí. Era la persona que amaba.
— Pero… tú amas a papá, ¿no?
— Hay diferentes tipos de amor, Anthony — respondió acariciando los cabellos de su hijo — A lo largo de tu vida vas a conocer a muchas personas y algunas de ellas tendrán un significado especial para ti por diferentes circunstancias. Yo amo a tu padre, y soy feliz estando con él. También estoy muy feliz de tenerte a ti, pero él — dijo señalando la fotografía que su hijo sostenía — fue la persona que me dio cariño y calidez cuando lo necesitaba. Durante una época en la que estaba triste, en la que me sentía sola, él me dio lo suficiente para sentirme feliz. Me dio la ilusión de niñez que uno nunca debe perder… es por eso que es alguien especial. Alguien que no voy a olvidar.
— ¿Papá también lo quiere por eso?
— Así es… y por muchas más razones.
— Entonces sí es un príncipe… igual que tío Archie — exclamó. Parecía comprender lo que madre había intentado decir — Sí cuidó bien de mamá, entonces yo también lo quiero. ¿Puedo volver a visitarlo en la colina?
Candy abrazó a su pequeño hijo.
A pesar de las tantas circunstancias atravesadas a lo largo de su vida, nada era mejor que tener a aquel pequeño junto a ella.
Sí, había conocido el amor de diferentes maneras. Y cada uno mantendría ese espacio especial dentro su corazón.
Pero el amor que su familia le daba era uno tan especial, uno tan grande que sobrepasaba cualquier otro y era el mejor que había conocido.