LA PROMESA
Gianny 17
CAPITULO 7
[/center]Gianny 17
CAPITULO 7
El pequeño ser del bosque se escondía tras las faldas de una de las viejas matronas, era la primera vez que la traían a aquel lugar y como en algún momento de su existencia ella debía de ocuparlo habían visto por conveniente llevarla a visitar a la gran Moira. La pequeña observaba todo con mucho asombro y más al percatarse del olor a hierbas aromáticas dispersas por el ambiente, podía observar las raíces del fresno Yggdrasil - el árbol del mundo en el centro del cosmos - donde millones de hilos lo surcaban y se dirigían a aquella anciana mujer que solo los acariciaba al unirse en aquel viejo telar. Observo las cristalinas aguas que regaban el fresno y la arcilla que se formaba de un lado para que éste no pierda su verdor ni se pudra. Había escuchado durante su viaje a aquel lugar que la vida de cada persona, cada ser se hallaba en aquellos hilos, y la longitud de cada cuerda era la duración de la vida de ellos. Sin duda todo aquello le parecía fascinante.
----Pequeña Doncella.- Se escuchó el ronco llamado de aquella que miraba con una sonrisa a la hada.- Acércate para que te vea mejor.- Mirando a su padre y recibiendo su aprobación Candy empezó a caminar a paso lento hacia aquella mujer. - ¿Cómo estas Candy?
----¿Cómo sabes mi nombre?.- Pregunto la niña sorprendida
----Yo lo sé todo….como tú también lo sabrás... algún día. – El rostro de la pequeña se entristeció y bajo la mirada al suelo.
----Me dijeron que viviría aquí cuando sea mayor…sola
----¿Y eso te asusta?.- El tono que empleo la vieja fue tranquilo logrando que ella asintiera
----¡CANDY!.- La voz de su padre logro hacer que la vieja sonriera ante la reacción de la niña que formo un puchero de reclamo.
----Me gustaría hablar a solas con ella.- Pidió la anciana mientras suavemente la tomaba de la espalda y la obligada a seguirla hacia un jardín lleno de narcisos.- Pueden esperarnos fuera.
Oficialmente corridos todos los seres mágicos salieron el lugar y dieron espacio a aquellas que gracias al destino se unían para la eternidad.
----¿No te gusta mi hogar para que sea tuyo?.- Dijo la anciana mientras cortaba una blanca y la colocaba sobre su rizado cabello
----No es eso
----Entonces
----Me dijeron que no podre tener un compañero como todas mis hermanas, que me prepararan para ocupar tu puesto y trabajare duro para lograrlo y que cuando llegue el momento tendré que dormir en los brazos Aita…¿tendré que morir? .- La anciana observo el rostro compungido de la niña e invitándola a sentarse a su lado le hablo
----¿No deseas morir?. La niña negó con un movimiento.- ¿Qué deseas Candy?.- La niña se mordió el labio y estrujando su blanco vestido no contesto.- ¿Quieres que cambie tu destino?.- La carita blanquecina la miro con emoción.
----¿Puedes hacerlo?
-----Claro….soy la Moira del destino y señora de la gran sabiduría profética…puedo hacerlo.
-----¿Cómo lo harías?.- Pregunto la niña mientras la miraba
-----Cambiaria tu vida por la de una de tus hermanas .- Los ojos de Candy se abrieron ante lo escuchado.- Y tu podrás hacer lo que desees.
----¿Una de ellas morirá? .- la vieja asistió dejando aún más triste a Candy.- No, no quiero que ellas mueran.
-----Es la única forma
----Entonces no quiero.- la niña se puso de pie bruscamente dándole la espalda aquella que se había atrevido a siquiera mencionarlo. De pronto se escuchó la risa de la mujer lo que provoco que molesta la niña volteara a enfrentarla.- ¿De qué te ríes?
----Me recuerdas tanto a mi.-El suspiro que soltó la mujer provoco que la rubia niña se enfurruñara mas.- Dejare que vivas lo que ninguna de tus hermanas viva, saldrás más allá del bosque y tendrás a tu compañero, conocerás lugares que ninguno de los tuyos conozca y cuando hallas vivido lo suficiente vendrás a mi…ocuparas tu puesto y dirigirás el destino de todos.
-----¿Saldré del bosque?.
-----Si
----¿Viviré con los mortales?
-----Tal como lo quieres…¿no es así? .- La sutil afirmación obtenida le basto a la anciana para ponerse de pie y dirigirse hacia el telar .
----Nada te lastimara pequeña doncella.- La mujer cogió un hilo y lo cubrió con cera.- Ni mortal, ni mágico …colmaras tus deseos de conocer lo que nadie desea conocer y amaras profundamente hasta que este amor te devuelva a mi .- Vio como de sus faldas desprendía un fino hilo y lo unía al de Candy.- Vendrás y sin quejas tomaras el lugar que te corresponde.
----¿Mi compañero me matara? .- hablo muy despacio al ver como una gota de sangre teñía aquel hilo que empezaba a correr en aquel viejo telar.
----No pequeña.- La vieja le brindo una sonrisa.- La muerte de este consumirá tu corazón y apagará la luz de tus ojos.
----¿Qué pasa si deseo cambiar mi destino?.- Pregunto la niña de pronto
----Sabes dónde encontrarme …siempre estaré dispuesta a escucharte.- Y antes que Candy preguntara algo más la vieja Moira la despacho.- Es hora de irte …feliz vida Candy….hasta una nueva oportunidad.
Sin decir algo más la mujer se alejó del lugar dejando a una niña totalmente sorprendida ante lo prometido, sin lugar a dudas aquello no era lo que se esperaba al haber venido a verla.