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PRESENTACIÓN EN SOLITARIO ADRIANA, 2018
En un lugar muy lejano, exactamente al otro lado del mundo, unos personajes muy conocidos se reunían para discutir sobre algo muy importante. Al parecer, era más bien una emergencia.
Ese día, Candy los llamó a todos en el departamento y uno a uno fueron apareciendo, incluso Terry hizo acto de presencia. Así que después de que el Señorito Neal se dignara a salir, Candy les explicó el motivo de la reunión.
"Les pedí a todos que vinieran porque hay algo importante que decirles".
Por un momento los chicos se miraron unos a otros sin saber a qué se refería exactamente, por lo que Candy continuó,
"Creo que en esta ocasión no podremos participar en la Guerra Florida".
"Pero, Candy, ¿qué te hace decir eso?" Era Albert que de la sorpresa hasta se puso de pie.
"Bueno, es que..." Quiso explicarles la razón, pero alguien la interrumpió.
"No me digas... Adriana no ha preparado nada, según ella y temes que no participaremos, ¿no?" Era Terry que se cruzó de brazos.
"Ojalá y fuera tan sencillo como eso, Terry". Fue la respuesta de Candy.
"Vamos, ¿por quién me tomas?
Dos años consecutivos Adriana nos ha salido con el mismo cuento y al final, la vemos corriendo y desvelándose para subir los aportes. En verdad que me sorprendes. Ya no sé si enojarme con ustedes por ser tan ingenuos o conmigo mismo por escuchar siempre lo mismo y hacerles caso". 
Y diciendo esto, se puso de pie para marcharse. Definitivamente, no estaba interesado en lo que él pensaba sería el 'drama' del día. Pero justo cuando estaba por salir del balcón, Candy le dijo algo que lo haría detenerse.
"Adriana no está por ningún lado y me temo que se ha ido..." Todos la miraron asombrados.
"¿Cómo que se ha ido?" Neal replicó, "si yo la vi ayer trabajando en su computadora". Y volviéndose a la mesa para señalar donde la había visto, fue entonces que se dio cuenta de algo más. "¡No está!"
"Eso es precisamente lo que trataba de decirles, Adriana y la computadora han desaparecido desde ayer. No vino a dormir y no sé dónde puede estar".
"¿Has llamado a su celular?" Albert preguntó, era lo más lógico en esos momentos.
"Sí, desde esta mañana y está apagado. ¿Qué vamos a hacer?"
Los chicos se miraron unos a otros sin saber qué decir. No era normal que su amiga simplemente desapareciera, sobre todo con la computadora.
"Stear, ¡haz algo!" Replicó Archie a su hermano.
"¿Y qué quieres que haga? Si no sabemos adónde fue". Respondió cruzando los brazos.
"Bueno, yo no me quedaré aquí sentado, iré a buscarla por los alrededores. Tal vez alguien la vio salir y sabe algo".
"Esa es una buena idea," comentó Albert, "mientras tanto, Anthony y yo... Por cierto, ¿dónde está Anthony?"
Todos abrieron los ojos como platos. En su desesperación, Candy no se dio cuenta de que Anthony también estaba ausente. En eso, y con una risa burlona, Neal se acercó a Candy para decirle,
"Igual esos dos se escaparon y fueron a pasear..."
"¿Cómo se te ocurre decir eso, Neal?" Le reclamó Archie.
"Bueno, como no están aquí, es lógico pensar eso, ¿no?"
"¿Cómo se te ocurre semejante barbaridad? Para que te lo sepas, ninguno de los dos haría algo así".
"¿Ah, sí?"
"Claro. Aunque lo dudes. Ahora me entiendo porqué del dicho 'el león cree que todos son de su calaña', ¿no, Neal?" Archie tenía ya un dejo de enojo en su tono.
El señorito no pudo contenerse y justo cuando quiso abalanzarse contra Archie, se escucharon voces y la puerta se abrió.
"Hola a todos". Eran Adriana y Anthony que llegaban. "¿Sucede algo?" Les preguntó al verlos tan sorprendidos.
"Pues, estamos aquí deliberando si ustedes dos se habían escapado o no". Neal dibujó una risa burlona.
"¿Escapar de dónde o de quién?" Preguntó ella confundida no sabiendo exactamente a lo que se refería.
Intuyendo que habría guerra si su amiga se enteraba de las sospechas del Señorito, Candy rápidamente se acercó a ella para aclararlo todo.
"Como no te vi desde ayer, estaba preocupada por ti y bueno, los llamé a todos para decirle..."
"Pero, Candy, no había necesitad de eso. Tan sólo hubieras llamado por teléfono..." Y sacando el celular de su bolsa, se dio cuenta de que estaba apagado. "Upss, perdón. No me di cuenta de que me quedé sin batería".
"¡Excusas!" Se escuchó a alguien decir desde el balcón.
Entre cerrando los ojos, Adriana supo exactamente de quién provenía.
"¿Y por qué habría de hacerlo, si me puedes decir, Terry?"
"¿Te lo cuento o te lo platico?"
"¡Habla ya!"
"Tal vez querías pasar tiempo con tu 'Amorcito'? Y mirando a Anthony le guiñó un ojo.
"Para que te lo sepas, mi 'Amorcito' y yo estuvimos trabajando toda la noche. Además tuvimos una conferencia de larga distancia con la Tía Abuela. Así que no me vengas con eso".
"¿Trabajando en qué?"
Se cruzó el inglés de brazos, "¿en cómo sentirse más románticos bajo la luz de la luna?" 
"¡Eres imposible, Terry!"
Anthony, que hasta entonces había permanecido callado, entonces intervino.
"Sé que te preocupas mucho por Adriana, Terry. Lo cierto es que estuvimos trabajando mucho y como la Tía Abuela quería indicarnos paso a paso qué teníamos que hacer y cómo subir las presentaciones, estuvimos con ella casi toda la noche. Además, como no quería dejar sola a Adriana, me ofrecí ir con ella".
"¿Apoco no es un amor?". Y con la mirada ensoñadora, Adriana le sonrió a Anthony totalmente enajenada, ignorando a Terry.
Sabiendo que iría para largo, Terry tomó la computadora que Adriana había puesto sobre la mesa y abriéndola, pudo ver todos los aportes.
"¡Pero si ya está todo listo!" Comentó con sorpresa.
"¿Y qué esperabas? La Tía Abuela no se anda por las ramas. Con ella hay que trabajar y en serio".
"Ni que fuera mono... jaja".
Todos se volvieron a mirar al Señorito que trataba de hacerse el chistoso, pero obviamente su comentario fuera de lugar no resultó como esperaba.
"En fin, no discutamos y pongámonos a trabajar.
Aquí están marcadas las fechas en las que participaremos y si a alguien no le parece..." 
Se volvió a mirar a Terry, mientras que todos hacían lo mismo, haciéndolo intimidar, "dice la Tía que con mucho gusto la llamen para que les explique sus razones y el por qué de su decisión. La pobre se siente tan solita allá que no le importa que la despierten". 
Todos se miraron de reojo mientras Adriana dibujaba una sonrisa de triunfo. ¡Vaya que todos le daban la vuelta a la Tía!
"Bueno, ya que todos estamos de acuerdo, pues... ¡Comencemos!" Y diciendo esto, le hizo a Terry una seña para que se hiciera a un lado y pudiera subir la primera firma de presentación.
¡Hola a todos! Es un gusto poder volver a esta nuestra reunión anual. Me alegra poder ver de nuevo a tanta gente querida, en verdad que el año se pasó rapidísimo.
Bueno, en esta ocasión he decidido hacer algo diferente con las celdas y espero que les gusten los trabajos que he preparado con tanto cariño.
Ojalá y me dé tiempo de acabar con todo lo que tengo planeado para ustedes, si no es así, les pido disculpas de antemano.
Por lo mientras, les dejo esta firma de nuestra querida Pecas. Por falta de tiempo, solamente haré diez, así que por favor anótense en orden como sigue...
1-
2-
.....
10-
Y díganme de quién de los galanes les gustaría ver en una historia este año. He escrito cuatro en esta ocasión.
Pues sin más, ¡comencemos nuestra participación!
ENTREGANDO AQUI
https://s937.photobucket.com/user/adrinag1/library/GF2018?sort=3&page=1
Un abrazo
Adriana
En un lugar muy lejano, exactamente al otro lado del mundo, unos personajes muy conocidos se reunían para discutir sobre algo muy importante. Al parecer, era más bien una emergencia.
Ese día, Candy los llamó a todos en el departamento y uno a uno fueron apareciendo, incluso Terry hizo acto de presencia. Así que después de que el Señorito Neal se dignara a salir, Candy les explicó el motivo de la reunión.
"Les pedí a todos que vinieran porque hay algo importante que decirles".
Por un momento los chicos se miraron unos a otros sin saber a qué se refería exactamente, por lo que Candy continuó,
"Creo que en esta ocasión no podremos participar en la Guerra Florida".
"Pero, Candy, ¿qué te hace decir eso?" Era Albert que de la sorpresa hasta se puso de pie.
"Bueno, es que..." Quiso explicarles la razón, pero alguien la interrumpió.
"No me digas... Adriana no ha preparado nada, según ella y temes que no participaremos, ¿no?" Era Terry que se cruzó de brazos.
"Ojalá y fuera tan sencillo como eso, Terry". Fue la respuesta de Candy.
"Vamos, ¿por quién me tomas?
Dos años consecutivos Adriana nos ha salido con el mismo cuento y al final, la vemos corriendo y desvelándose para subir los aportes. En verdad que me sorprendes. Ya no sé si enojarme con ustedes por ser tan ingenuos o conmigo mismo por escuchar siempre lo mismo y hacerles caso". Y diciendo esto, se puso de pie para marcharse. Definitivamente, no estaba interesado en lo que él pensaba sería el 'drama' del día. Pero justo cuando estaba por salir del balcón, Candy le dijo algo que lo haría detenerse.
"Adriana no está por ningún lado y me temo que se ha ido..." Todos la miraron asombrados.
"¿Cómo que se ha ido?" Neal replicó, "si yo la vi ayer trabajando en su computadora". Y volviéndose a la mesa para señalar donde la había visto, fue entonces que se dio cuenta de algo más. "¡No está!"
"Eso es precisamente lo que trataba de decirles, Adriana y la computadora han desaparecido desde ayer. No vino a dormir y no sé dónde puede estar".
"¿Has llamado a su celular?" Albert preguntó, era lo más lógico en esos momentos.
"Sí, desde esta mañana y está apagado. ¿Qué vamos a hacer?"
Los chicos se miraron unos a otros sin saber qué decir. No era normal que su amiga simplemente desapareciera, sobre todo con la computadora.
"Stear, ¡haz algo!" Replicó Archie a su hermano.
"¿Y qué quieres que haga? Si no sabemos adónde fue". Respondió cruzando los brazos.
"Bueno, yo no me quedaré aquí sentado, iré a buscarla por los alrededores. Tal vez alguien la vio salir y sabe algo".
"Esa es una buena idea," comentó Albert, "mientras tanto, Anthony y yo... Por cierto, ¿dónde está Anthony?"
Todos abrieron los ojos como platos. En su desesperación, Candy no se dio cuenta de que Anthony también estaba ausente. En eso, y con una risa burlona, Neal se acercó a Candy para decirle,
"Igual esos dos se escaparon y fueron a pasear..."
"¿Cómo se te ocurre decir eso, Neal?" Le reclamó Archie.
"Bueno, como no están aquí, es lógico pensar eso, ¿no?"
"¿Cómo se te ocurre semejante barbaridad? Para que te lo sepas, ninguno de los dos haría algo así".
"¿Ah, sí?"
"Claro. Aunque lo dudes. Ahora me entiendo porqué del dicho 'el león cree que todos son de su calaña', ¿no, Neal?" Archie tenía ya un dejo de enojo en su tono.
El señorito no pudo contenerse y justo cuando quiso abalanzarse contra Archie, se escucharon voces y la puerta se abrió.
"Hola a todos". Eran Adriana y Anthony que llegaban. "¿Sucede algo?" Les preguntó al verlos tan sorprendidos.
"Pues, estamos aquí deliberando si ustedes dos se habían escapado o no". Neal dibujó una risa burlona.
"¿Escapar de dónde o de quién?" Preguntó ella confundida no sabiendo exactamente a lo que se refería.
Intuyendo que habría guerra si su amiga se enteraba de las sospechas del Señorito, Candy rápidamente se acercó a ella para aclararlo todo.
"Como no te vi desde ayer, estaba preocupada por ti y bueno, los llamé a todos para decirle..."
"Pero, Candy, no había necesitad de eso. Tan sólo hubieras llamado por teléfono..." Y sacando el celular de su bolsa, se dio cuenta de que estaba apagado. "Upss, perdón. No me di cuenta de que me quedé sin batería".
"¡Excusas!" Se escuchó a alguien decir desde el balcón.
Entre cerrando los ojos, Adriana supo exactamente de quién provenía.
"¿Y por qué habría de hacerlo, si me puedes decir, Terry?"
"¿Te lo cuento o te lo platico?"
"¡Habla ya!"
"Tal vez querías pasar tiempo con tu 'Amorcito'? Y mirando a Anthony le guiñó un ojo.
"Para que te lo sepas, mi 'Amorcito' y yo estuvimos trabajando toda la noche. Además tuvimos una conferencia de larga distancia con la Tía Abuela. Así que no me vengas con eso".
"¿Trabajando en qué?"
Se cruzó el inglés de brazos, "¿en cómo sentirse más románticos bajo la luz de la luna?" "¡Eres imposible, Terry!"
Anthony, que hasta entonces había permanecido callado, entonces intervino.
"Sé que te preocupas mucho por Adriana, Terry. Lo cierto es que estuvimos trabajando mucho y como la Tía Abuela quería indicarnos paso a paso qué teníamos que hacer y cómo subir las presentaciones, estuvimos con ella casi toda la noche. Además, como no quería dejar sola a Adriana, me ofrecí ir con ella".
"¿Apoco no es un amor?". Y con la mirada ensoñadora, Adriana le sonrió a Anthony totalmente enajenada, ignorando a Terry.
Sabiendo que iría para largo, Terry tomó la computadora que Adriana había puesto sobre la mesa y abriéndola, pudo ver todos los aportes.
"¡Pero si ya está todo listo!" Comentó con sorpresa.
"¿Y qué esperabas? La Tía Abuela no se anda por las ramas. Con ella hay que trabajar y en serio".
"Ni que fuera mono... jaja".
Todos se volvieron a mirar al Señorito que trataba de hacerse el chistoso, pero obviamente su comentario fuera de lugar no resultó como esperaba. "En fin, no discutamos y pongámonos a trabajar.
Aquí están marcadas las fechas en las que participaremos y si a alguien no le parece..." Se volvió a mirar a Terry, mientras que todos hacían lo mismo, haciéndolo intimidar, "dice la Tía que con mucho gusto la llamen para que les explique sus razones y el por qué de su decisión. La pobre se siente tan solita allá que no le importa que la despierten". Todos se miraron de reojo mientras Adriana dibujaba una sonrisa de triunfo. ¡Vaya que todos le daban la vuelta a la Tía!
"Bueno, ya que todos estamos de acuerdo, pues... ¡Comencemos!" Y diciendo esto, le hizo a Terry una seña para que se hiciera a un lado y pudiera subir la primera firma de presentación.
¡Hola a todos! Es un gusto poder volver a esta nuestra reunión anual. Me alegra poder ver de nuevo a tanta gente querida, en verdad que el año se pasó rapidísimo.
Bueno, en esta ocasión he decidido hacer algo diferente con las celdas y espero que les gusten los trabajos que he preparado con tanto cariño.
Ojalá y me dé tiempo de acabar con todo lo que tengo planeado para ustedes, si no es así, les pido disculpas de antemano.
Por lo mientras, les dejo esta firma de nuestra querida Pecas. Por falta de tiempo, solamente haré diez, así que por favor anótense en orden como sigue...
1-
2-
.....
10-
Y díganme de quién de los galanes les gustaría ver en una historia este año. He escrito cuatro en esta ocasión.
Pues sin más, ¡comencemos nuestra participación!
ENTREGANDO AQUI
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Un abrazo
Adriana
Última edición por Adriana G el Sáb Abr 21, 2018 12:36 pm, editado 2 veces
un abrazo fuerte y ya sabes que mi historia favorita siempre será con Albert 
