Lloraba, simplemente no podia dejarla ir, pero ella ya no estaba ahi, al menos no la que era su Candy, ahora solo estaba un cuerpo inmovil dentro de aquel feretro el cual debia ser enterrado en lo mas profundo de aquella solitaria tumba... no, no queria dejarla ir.
Candy habia adquirido una infeccion en el hospital, una que por necedad no habia atendido y la fue consumiendo poco a poco y cuando lo supo ya era tarde, no quiso decir que deseaba verlo pero Albert lo sabia y decidio traerlo, asi fue como llego, asi fue como volvieron a encontrarse en aquel lecho de muerte que el destino les habia preparado.
Aun podia recordar cada momento vivido a su lado, habia sido tan poco tiempo y al mismo tiempo tan largos años, separacion tras separacion, encuentro tras encuentro... Como habia empezado? no lo sabia, no estaba seguro el momento exacto en que su mente empezo a jugarle tan mala pasada de verla en todos lados, aquella sonrisa facil y contagiosa, aquellos ojos tan brillantes... Su Candy, a quien habia amado en el colegio, su primer amor, su unico amor.
Postrado en el suelo humedo abrazaba el feretro sin tregua, como si al hacerlo ella pudiese volver.
"No llores Terry, al final estamos juntos, no llores que yo me voy tranquila por haberte conocido". -Le escuchaba decir con aquella voz que solia tranquilizarlo, pero no, no era su voz y ella ya no estaba ahi.
Eliza lo miraba desde lejos, tambien ella recordaba a su enemiga numero uno y ahora lamentaba aquella perdida, Albert y Archie tambien lloraban, Neal habia preferido no ir, no tenia caso hacerlo, al final los recuerdos que Candy habia dejado en cada uno eran poderosos e imborrables.
- Vamos Terry, tenemos que dejarla ir.
- Porque? Explicame porque debo dejarla ir? -le constesto a Albert mientras seguia aferrado a ella.
Al fin Albert logro convencerlo de levantarse, lo abrazo mientras el feretro bajaba, lo acompaño en cada minuto mientras a el mismo se le partia el alma, escucharon como la tierra caia y cubria lo que una vez habia sido una chica alegre y fuerte y lloraron mientras con cada palada iban apareciendo imagenes de ella durante toda su vida...
- Adios Candy... Adios amor mio... -dijo Terry en silencio dejandose caer de rodillas ante la tumba.
"mientras vivamos podremos encontrarnos" ... se escucho decir... "no mas, ya no podremos volver a encontrarnos, ya no"... dijo mientras grandes lagrimas se confundian con la lluvia... El cielo tambien estaba llorando su partida.
FIN.
Hasta aqui dejamos esta colaboracion hecha fic... aun tenemos un poco mas del colegio pero esta historia ya llega a su fin, espero les haya gustado el relato que se logro acompañando las imagenes de la talentosa Jeann Pollifrodi...