Hola guerreras de todos los bandos
Aquí les traigo esta pequeña historia espero sea de su agrado
Les cuento, siguiendo el consejo de mi querida May de escribir de anecdotas, de nuestra vida cotidiana me e atrevido a escribir de algunas cosas que observé mientras acompañaba a mi mamá, a sus,consultas en el hospital allí conocí a las personas que en este relato representan a nuestro queridos personajes
Con mucho cariño para ustedes :
Por la amistad y el amor a TG
CITAS NO CONSERTADAS
POR.ANALILIT
Después de 30 minutos en la oficina del director del hospital Candice W estaba por salir
-Bueno señorita White el puesto es suyo preséntese a las 7 a.m en el área de los consultorios, Rosario le explicará el trabajo que debe realizar.
- Sí, muchas gracias señor director. Aquí
estaré muy puntual.
-No hay de qué señorita White puede retirarse.
Candy, salió de la oficina con la mirada de del director del hospital pegada a su espalda. Rosario ya la esperaba fuera.
-¿Te dieron el puesto Candy?
- ¡Sí, sí me lo dieron!
Confirmó saltando de emoción.
-¡Te lo dije!, no es la gran cosa pero es algo. -Bromeas es trabajo que nos permitirá salir adelante con los gastos.
-Te comprendo Candy, han vivido presionadas durante mucho tiempo.
Candy la observó con gratitud y le sonrió -Gracias Chayito no sé qué hubiéramos hecho sin tí
-¿ Qué hubieran hecho?, pues Erika y tú seguirian esforzandose como hasta hoy, teniendo cualquier trabajito para sacar adelante a su pequeña familia. ¡Pero ahora, vete, vete, que Johan está esperándote. Mira la hora, se está haciendo tarde.
Candy miró el reloj.
-Tienes razón es tarde, voy por mi amorcito. Nuevamente gracias chayito.
La envolvió en un abrazo muy apretado.
-Nos vemos más tarde.
- Mejor dicho nos vemos mañana aquí, se puntual Candy, le dijo sonriendo.
HOSPITAL GENERAL DE TLAXCALA
ÁREA DE CONSULTORIOS Y SALA DE ESPERA
6:40 am.
-Buenos días chayito.
Candy, saludó afectuosamente a la mujer con un abrazo y un beso en la mejilla.
- Buenos días Candy, pero mira nada más qué puntual resultaste pequeña.
Correspondió Chayito, al abrazo y riendo burlona. Candy solamente encogió los hombros riendo.
-Ya ves una que aprecia el trabajo Jajaja.
Las dos bromeaban mientras ingresaban a la sala de espera.
- Pues bueno Candy, aquí es donde trabajarás. Cómo ves los consultorios están ubicados alrededor en forma de una u y en medio está el jardín y después siguen los sanitarios, aquí al lado encontrarás la bodega donde está todo lo necesario para tu trabajo, aquí también puedes dejar tus cosas y mira este es tu uniforme.
Le entregó dos overoles muy amplios con resorte en la cintura uno gris y otro azul en tonos claros. Candy los tomó y le dio las gracias.
-Tu trabajo será limpiar los pisos y hacear las mesas del área de espera, también limpiaras los consultorios y los cubículos. ¡Ha! y por favor algo muy, muy importante ten cuidado con los documentos y expedientes médicos, no los muevas de su lugar.
Advirtió, Rosario, con seriedad y Candy asintió en señal de entendimiento.
-Además trata de no mover de su lugar las pertenencias de los médicos y enfermeras algunos son muy... digamos... especiales.
-¡De verdad! Y ¿de quién debo cuidarme?.
-Veamos, del doctor Granchester, es un excelente médico pero tiene un genio de los mil demonios. Este es su consultorio, sin embargo no lo verás de momento, porque está en un seminario y llega hasta la próxima semana. también ten cuidado con la doctora Elisa, es muy especial.
-Entonces comenzaré con sus consultorios para no tener dificultades con ellos.
-Pero, no te preocupes,con el tiempo conocerás a todo el personal médico y si haces bien tú trabajo no tendras problemas. Al final de la jornada ordenadas y limpias la bodega.
Con estas y otras indicaciones Candy, comenzó su trabajo en el hospital. El cual con el paso del tiempo se fue llenando de personas, médicos y enfermeras que llegaban algunos muy sonrientes repartiendo besos y abrazos a sus compañeros de trabajo. Candy al observarlos, pensaba.
"deben ser muy buenos amigos y conocerse desde hace años".
Algunos médicos se giraban y al mirarla con curiosidad se preguntaban. ¿dónde está Neil?.
También observó el ingreso de muchos pacientes, niños y ancianos y sus muy preocupados y desorientados cuidadores que en muchas ocasiones no sabían a dónde dirigirse. Ya terminaba de hacear todo el piso cuando un señor le preguntó.
-Señorita disculpe. ¿dónde está el consultorio de ortopedia?
-Lo siento señor, es mi primer día de trabajo y no lo sé, pero mire esa es la mesa de información ahí le pueden orientar.
-Gracias señorita.
- Hola, tú debes ser la nueva encargada de la limpieza.
Un joven médico rubio y guapo ojiazul atrajo su atención.
- Así es doctor de ahora en adelante Yo haré el aseo de esta área.
-¡Que bién!
Expresó el médico detallando a la joven que no era fea. Extendió la mano a fin de saludarla.Pero una vez estrechada la mano intentó atraerla hacia él con la intención de darle un beso en la mejilla.
-Es un gusto que trabajes con nosotros.
-Gracias doctor Yo también estoy contenta en este trabajo.
Respondió la joven poniendo la mano en su pecho para evitar el acercamiento. El médico sonrió.
- ¿Qué pasa bonita?, sólo quiero darte un beso de bienvenida.
-No hace falta, con el saludo es suficiente. Además, no me gusta dar besos a los desconocidos.
-Eso se arregla fácilmente bonita.
Y extendió otra vez la mano.
-Mucho gusto Antonio Brown. Pero puedes llamarme Tony.
Y le regaló una hermosa sonrisa. Sin embargo élla saludo tocando levemente su mano.
-Doctor mucho gusto, mi nombre es Candice y si me permite tengo trabajo que realizar.
-¿Y el beso?
-Lo siento. Aún sigue siendo un extraño para mí. Además a mí, no me gustan esas confiancitas de andar repartiendo besos a diestra y siniestra.
Y dándole la espalda se marchó. Tony la observó alejarse y sonrió coqueto.
-No te preocupes bonita, ya nos conoceremos y te aseguro que me darás muchos muchos besos ...
Continura...
Ok ok no es la gran cosa pero espero las entretenga un ratito gracias por su atención
Aquí les traigo esta pequeña historia espero sea de su agrado
Les cuento, siguiendo el consejo de mi querida May de escribir de anecdotas, de nuestra vida cotidiana me e atrevido a escribir de algunas cosas que observé mientras acompañaba a mi mamá, a sus,consultas en el hospital allí conocí a las personas que en este relato representan a nuestro queridos personajes
Con mucho cariño para ustedes :
Por la amistad y el amor a TG
CITAS NO CONSERTADAS
POR.ANALILIT
Después de 30 minutos en la oficina del director del hospital Candice W estaba por salir
-Bueno señorita White el puesto es suyo preséntese a las 7 a.m en el área de los consultorios, Rosario le explicará el trabajo que debe realizar.
- Sí, muchas gracias señor director. Aquí
estaré muy puntual.
-No hay de qué señorita White puede retirarse.
Candy, salió de la oficina con la mirada de del director del hospital pegada a su espalda. Rosario ya la esperaba fuera.
-¿Te dieron el puesto Candy?
- ¡Sí, sí me lo dieron!
Confirmó saltando de emoción.
-¡Te lo dije!, no es la gran cosa pero es algo. -Bromeas es trabajo que nos permitirá salir adelante con los gastos.
-Te comprendo Candy, han vivido presionadas durante mucho tiempo.
Candy la observó con gratitud y le sonrió -Gracias Chayito no sé qué hubiéramos hecho sin tí
-¿ Qué hubieran hecho?, pues Erika y tú seguirian esforzandose como hasta hoy, teniendo cualquier trabajito para sacar adelante a su pequeña familia. ¡Pero ahora, vete, vete, que Johan está esperándote. Mira la hora, se está haciendo tarde.
Candy miró el reloj.
-Tienes razón es tarde, voy por mi amorcito. Nuevamente gracias chayito.
La envolvió en un abrazo muy apretado.
-Nos vemos más tarde.
- Mejor dicho nos vemos mañana aquí, se puntual Candy, le dijo sonriendo.
HOSPITAL GENERAL DE TLAXCALA
ÁREA DE CONSULTORIOS Y SALA DE ESPERA
6:40 am.
-Buenos días chayito.
Candy, saludó afectuosamente a la mujer con un abrazo y un beso en la mejilla.
- Buenos días Candy, pero mira nada más qué puntual resultaste pequeña.
Correspondió Chayito, al abrazo y riendo burlona. Candy solamente encogió los hombros riendo.
-Ya ves una que aprecia el trabajo Jajaja.
Las dos bromeaban mientras ingresaban a la sala de espera.
- Pues bueno Candy, aquí es donde trabajarás. Cómo ves los consultorios están ubicados alrededor en forma de una u y en medio está el jardín y después siguen los sanitarios, aquí al lado encontrarás la bodega donde está todo lo necesario para tu trabajo, aquí también puedes dejar tus cosas y mira este es tu uniforme.
Le entregó dos overoles muy amplios con resorte en la cintura uno gris y otro azul en tonos claros. Candy los tomó y le dio las gracias.
-Tu trabajo será limpiar los pisos y hacear las mesas del área de espera, también limpiaras los consultorios y los cubículos. ¡Ha! y por favor algo muy, muy importante ten cuidado con los documentos y expedientes médicos, no los muevas de su lugar.
Advirtió, Rosario, con seriedad y Candy asintió en señal de entendimiento.
-Además trata de no mover de su lugar las pertenencias de los médicos y enfermeras algunos son muy... digamos... especiales.
-¡De verdad! Y ¿de quién debo cuidarme?.
-Veamos, del doctor Granchester, es un excelente médico pero tiene un genio de los mil demonios. Este es su consultorio, sin embargo no lo verás de momento, porque está en un seminario y llega hasta la próxima semana. también ten cuidado con la doctora Elisa, es muy especial.
-Entonces comenzaré con sus consultorios para no tener dificultades con ellos.
-Pero, no te preocupes,con el tiempo conocerás a todo el personal médico y si haces bien tú trabajo no tendras problemas. Al final de la jornada ordenadas y limpias la bodega.
Con estas y otras indicaciones Candy, comenzó su trabajo en el hospital. El cual con el paso del tiempo se fue llenando de personas, médicos y enfermeras que llegaban algunos muy sonrientes repartiendo besos y abrazos a sus compañeros de trabajo. Candy al observarlos, pensaba.
"deben ser muy buenos amigos y conocerse desde hace años".
Algunos médicos se giraban y al mirarla con curiosidad se preguntaban. ¿dónde está Neil?.
También observó el ingreso de muchos pacientes, niños y ancianos y sus muy preocupados y desorientados cuidadores que en muchas ocasiones no sabían a dónde dirigirse. Ya terminaba de hacear todo el piso cuando un señor le preguntó.
-Señorita disculpe. ¿dónde está el consultorio de ortopedia?
-Lo siento señor, es mi primer día de trabajo y no lo sé, pero mire esa es la mesa de información ahí le pueden orientar.
-Gracias señorita.
- Hola, tú debes ser la nueva encargada de la limpieza.
Un joven médico rubio y guapo ojiazul atrajo su atención.
- Así es doctor de ahora en adelante Yo haré el aseo de esta área.
-¡Que bién!
Expresó el médico detallando a la joven que no era fea. Extendió la mano a fin de saludarla.Pero una vez estrechada la mano intentó atraerla hacia él con la intención de darle un beso en la mejilla.
-Es un gusto que trabajes con nosotros.
-Gracias doctor Yo también estoy contenta en este trabajo.
Respondió la joven poniendo la mano en su pecho para evitar el acercamiento. El médico sonrió.
- ¿Qué pasa bonita?, sólo quiero darte un beso de bienvenida.
-No hace falta, con el saludo es suficiente. Además, no me gusta dar besos a los desconocidos.
-Eso se arregla fácilmente bonita.
Y extendió otra vez la mano.
-Mucho gusto Antonio Brown. Pero puedes llamarme Tony.
Y le regaló una hermosa sonrisa. Sin embargo élla saludo tocando levemente su mano.
-Doctor mucho gusto, mi nombre es Candice y si me permite tengo trabajo que realizar.
-¿Y el beso?
-Lo siento. Aún sigue siendo un extraño para mí. Además a mí, no me gustan esas confiancitas de andar repartiendo besos a diestra y siniestra.
Y dándole la espalda se marchó. Tony la observó alejarse y sonrió coqueto.
-No te preocupes bonita, ya nos conoceremos y te aseguro que me darás muchos muchos besos ...
Continura...
Ok ok no es la gran cosa pero espero las entretenga un ratito gracias por su atención