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Hola chicas.
Con cariño para ustedes.
CITAS NO PLANEADAS
Por : Analilit
Al día siguiente Candy y Terry se reunieron para tomar el almuerzo juntos.
-¿Cuántos años tiene Johan?
-Tres añitos es tan hermoso y lo quiero mucho, siento que él llegó para dar sentido a mi vida.
¿Y su papá?
-El nombre de su padre es Albert. Fue novio de Erika. Pero lo eligieron para terminar su carrera en el extranjero, Erika no quiso seguir con un noviazgo de lejos.
Sonrío triste.
- Ya sabes lo que dicen de esos amores.
Terry sólo asintió.
-Cuatro meses después se enteró que Johan venía en camino, trató de localizar a Alberto, pero no tuvo éxito. -Suspiro- Fueron tiempos muy angustiantes para ella. Ahora a mí me tocaba darle fortaleza y ánimo. decidimos que saldríamos adelante juntas como hace años y pues aquí estamos.
-Y lo han hecho muy bien. Johan es un niño hermoso sano y muy inteligente como las mujeres que lo han educado. Y aunque no tengo ningún mérito, me siento orgulloso de él y de ustedes.
Tomó sus manos entre las suyas con firmeza y las beso Candy sonrió agradecida, ella también se sentía orgullosa.
-Y bueno pecas ¿qué trajiste de comer.?
-Espinacas
-¿Espi...que? preguntó Terry con un gracioso puchero mostrando su desagrado.
-¡Vamos! ¿No me digas que no te gustan? Si hasta Johan se las come.
Reía burlona Candy.
-¡No te creo!
Espetó Terry frunciendo la boca y Candy volvió a reír.
-Está bien, tuve que prometerle un premio y darle de comer en la boca.
-Yo también quiero un premio.
Dijo travieso y Candy abrió los ojos sorprendida.
-Y seguro también Quieres que te dé de comer en la boca.
A Terry le brillaron los ojos
-Me parece muy buena idea.
-Ok .
Dijo Candy conteniendo la carcajada tomó el tenedor y cortó un trozo de espinaca que estaba relleno de jamón y queso y se lo dio en la boca. Terry hizo un movimiento rápido con ambas dejas mientras abría la boca y Candy no pudo contener la carcajada.
-Y Bien ¿Qué tal me salió?
-¡Tú! ¿cocinaste?
-Sí. -contestó tímidamente- Eri, me esta enseñando.
Entonces Terry, tomó el recipiente y el tenedor e introdujo un trozo de espinacas a su boca y cerró los ojos degustando.
-hmmm
El movimiento de sus labios y la expresión de satisfacción en el rostro de Terry hicieron sonrojar a Candy.
-¡Delicioso!
Exclamó Terry abriendo los ojos y mirándola con mucho mucho amor
Si, eso le confesó el hombre con la mirada y ella lo comprendió
§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§
Pasando unos días el rostro de Candy se volvió triste Se le veía sonreír muy poco y cuando creía que nadie la veía limpiaba de sus pecosas mejillas, lágrimas de tristeza.
-¿Qué te pasa Candy, porque lloras?
Le preguntó Terry cuando la encontró en la bodega.
-¡Albert, el padre de Joan volvió!
Contestó sin dejar de derramar amargas lágrimas.
-Erika dice que hace tres semanas lo volvió a ver y se enteró de la existencia de Joan... Ahora que se han reencontrado y se van a casar.
-Pero esa no es razón para que llores, al contrario, deberías estar feliz Johan, tendrá su papá con él.
-¡Sí! ¡lo se! pero... Albert, trabaja en Guadalajara... y ¡se los llevara con él!... Y... yo... yo me quedaré sola…
Candy sollozaba dolorosamente, cubriendo su pecoso rostro con ambas manos, el llanto lastimero amenazaba con partir el corazón de Terry, que no soporto mas, acortó la distancia cubriendola con sus brazos, deseando borrar con su calor la tristeza de su corazón.
-Candy… cariño… amor...princesa.
El la mecía suavemente besando su frente llevo su mano al chongo en su nuca y soltó sus rizos y los acarició
Después de un rato la chica suspiro más tranquila el calor, el aroma y la fuerza de su abrazó le daba paz a su corazón. Entonces lo miró al rostro.
-¿Soy malvada? ¿Soy envidiosa? Al no querer que se alejen de mí.
-No, Candy es normal desear estar con quienes amamos y nunca alejarnos de ellos. Especialmente tú que has sufrido la pérdida de tus padres. Pero amor...debes entender y aceptar que es lo mejor para Johan y tu hermana.
Johan, necesita una figura paterna para educarlo y jugar con él
Y Erika, necesita el amor, protección y estabilidad que Alberto el hombre que ama le puede brindar
Y tú, tú tienes que seguir adelante, siempre adelante mi amor.
Hace casi cuatro años hiciste aun lado tus estudios, sueños y aspiraciones. Pero es tiempo de continuar con tu vida, terminar una carrera, de conocer lugares, personas amigos y... enamorarte. Con el tiempo También tú, formaras tu propia familia.
"Nuestra familia " pensó Terry suspirando y estrechandola con ternura en sus brazos. Mientras la joven escondía su rostro en el pecho masculino meditando sus palabras.
-No temas estar sola… Erika y Alberto verán la manera de apoyarte, tal como tu les brindaste tu ayuda durante estos años.
Tu hermana, te ama demasiado ni ella ni Johan se alejaran de tí, ya lo verás. Y yo mi pecosa, tampoco lo haré, estaré a tu lado siempre.
La joven, dejó de refugiarse en él y se alejó un poco para mirarlo al rostro, ese hombre la miraba con amor infinito, estaba segura de eso ese hombre la amaba, como ella a él.
El amor se desbordaba a raudales por su mirada azul y tan sólo por si quedaba alguna duda él inmediatamente se lo confirmó.
-Te amo Candice White Andley…
Y entonces la beso.
~~¤¤~~¤¤~~¤¤~~¤¤~~¤¤~~¤¤~~¤¤~~¤¤~~
SEIS AÑOS DESPUÉS
-Hola Cristy buenas tardes.
Candy entró al hospital luciendo un hermoso y elegante vestido strapless color vino y bolso a juego.
-¡Hola Candy! !oh wao que guapa te ves!
-Jajaja ¿Guapa? Yo diría que parezco un
balón.
Ambas mujeres rieron. Mientras Cristina salió del estanquillo para darle un abrazo.
-No, qué va, tienes la hermosura de una mujer en dulce espera. De verdad te vez magnífica.
-Gracias. Cristy
-¿Cuantos meses tienes?
-seis
-¿Puedo tocarte?
-Por supuesto pero primero déjame sentarme en el banquillo.
-Ten cuidado está un poco alto .
-Estaré bien, Cristy. Ahora sí, ya que estoy cómoda te presento a mis bebes.
Y tomando su mano la colocó con firmeza en el lugar que ella sabía haría a sus amorcitos bailar.
-Gemelos Candy, que emoción.
Por eso el doctor Granchester trae un humor inmejorable. Se le nota la felicidad a kilómetros de distancia
-Sí, está muy contento y se a vuelto muy sobre protector si por el fuera no pondría un pié en la calle.
Reían ambas mujeres
¿Me podrias ayudar a ponerme estas
zapatillas .
Le mostró unas hermosas zapatillas plateadas en pedrería, con tacón de aguja de 16 pulgadas altísimas.
-¡Oh Candy son preciosas! Pero en tu estado son muy peligrosas.
-Si, pero no te preocupes. No las caminaré mucho, si acaso unos pasos y al lado de mí bastoncito.
- ¿tu bastoncito?
-Jajaja me refiero a mi marido. Siempre que me pongo zapatillas, esté o no embarazada. me sujetó con fuerza de su brazo, para no caer.
-Y ¿Qué están festejando? Porque no te vestiste así solo para venir por él al trabajo.
-Nuestro aniversario, hoy seis de mayo cumplimos cuatro años de casados.
-Tienes razón, había olvidado la fecha. Es una lastima que no pudiéramos estar con ustedes, en esa ocasión tan especial.
-¿Y cómo podrían? Tony, no nos hubiera perdonado echarles a perder su luna de miel.
Cristina se sonrojó.
-Por cierto. Tengo unas fotos de tu boda que me gustaría mandarte. Me podrias dar tu correo para enviartelas.
-Claro me encantará verlas y tambien mandame unas de tu boda. Mi meil es locakris@... ¿Y cual es el tuyo?
- El mio es, Yuriko Yukinawa@...
Un hombre a lo lejos miraba a las mujeres reír. Pero sobre todo admiraba a su hermosa mujer. Vestida con elegancia para esta ocasión . La había citado para cenar en un lugar muy especial para los dos. Y alli estaba sentada de manera sexi en ese banco mientras ambas mujeres acariciaban el capullo donde crecían sus amores.
El hombre elegantemente vestido. Se acercó lentamente, disfrutando de la vista que le regalaban las curvas de su mujer.
-Me permite Cristina, yo haré esa labor.
Y sin esperar respuesta, tomó la zapatillas e hincándose frente a su esposa, comenzó a colocarlas en los finos pies, mientras con movimientos insinuantes, acariciaba la suave piel de sus tobillos y pantorrillas.
La futura madre hacía un esfuerzo sobrehumano, para controlar la electricidad que recorría su cuerpo al ser tocada por su esposo y verlo postrado a sus pies.
Cuando el hombre terminó con su extenuante trabajo, se puso de pie y tomando su mano, la ayudó a ponerse en pié con cuidado rodeando su amplia cintura y ella se sujetaba firmemente de su cuerpo y aun así tambaleo un poco
-Hay, jajajajaja
Reía, la pecosa.
-Creo Terry, ya es muy peligroso que las use.
Pero, Cristy, la última vez que use zapatillas no tuve problema.
-Cristina, tiene razón amor, además la última vez que usaste este calzado mis pecositos eran mucho más pequeños. Toma tu bolso, mejor te llevo en brazos, nuestra reservación nos espera.
la pecosa obedeció, mientras su esposo la levantaba del suelo como frágil pluma. Cómo se sostiene y se protege al tesoro más preciado del mundo y ella se sostuvo del cuello de su marido
-Nos vemos Cristy, que tengas buen camino a casa y por favor dale nuestros saludos a Tony.
-Muchas gracias, les deseo que tengan una hermosa velada. Hasta pronto Candy
El joven matrimonio entró al área de consultorios del hospital y se dirigieron al lugar de su primera cita.
- Aquí estamos pecosita.
Terry la depositó en el suelo y abrió la puerta de la bodega y la joven observó el interior con sorpresa y alegría.
¿Tu hiciste esto?
No era, el más exclusivo restaurante, pero se había esmerado para crear un ambiente romántico y sobre todo lleno de recuerdos.
-No todo, pedí ayuda a algunos amigos.
Le comentó mientras entraban y él cerraba la puerta tras de sí.
-Recuerdas que aquí fue nuestra primera cita.
Le recordó mientras la abrazaba por la espalda y depositada en su cuello besos suaves y caricias causando que electricidad nuevamente recorriera el cuerpo de su esposa
-¿Cita? Pues yo no recuerdo que me hayas pedido alguna cita.
-Tienes razón, nuestras primeras citas no fueron planeadas pero, después de unas semanas ninguna cita fue cosa de la casualidad.
Y él tenía razón, después de algún tiempo ambos buscaban la manera de encontrarse y almorzar juntos.
-Y mucho menos cuando aquí mismo aceptaste ser mi novia.
El, giro a su esposa sobre su eje y sosteniendo firmemente su talle con un brazo, con su mano libre la tomó por el cuello acariciando y atrayendo su rostro hacia él y besándola con deleite
-Y... también... aquí...hmmmm...
acepte ser tu esposa.
Él, sonrió travieso, pues no la dejaba terminar una frase.
-Y no solo eso, hace 6 meses aquí festejamos tu graduación.
Ella enrojeció furiosamente, al recordar lo que había pasado allí, cuando fue a informarle a su esposo, el éxito de sus exámenes y su pronta graduación
El resultado de ese festejo hoy crecía en su vientre.
-Te gustaría que festejemos nuevamente princesa mía.
Le preguntó con voz ronca en su oído haciéndola estremecerse con su voz y sus caricias.
-En verdad me gustaría pero tus pecositos tienen hambre. ¿Que preparaste de comer?
-Jajaja ven amor alimentemos a ese par de traviesos.
Y así entre muchos recuerdos Y envueltos en mucho amor la joven familia se dispuso a cenar y más tarde También seguirán festejando su amor
FIN.
SI, lo se pudo haber sido más larga
Pero de hecho en un inicio era más corta
Espero les haya gustado como a mi me gusto escribirlo
Aunque he de confesar escribir es muy difícil, por lo menos a mi, asi me lo a parecido, pero es hermoso que te den un comentario sincero.
De verdad admiro a todas las escritoras que dedican tanto tiempo y esfuerzo y nos regalan un cachito de su corazón
Mil gracias a todas
Por favor cuidense mucho
Abrazos a todas
Con cariño para ustedes.
CITAS NO PLANEADAS
Por : Analilit
Al día siguiente Candy y Terry se reunieron para tomar el almuerzo juntos.
-¿Cuántos años tiene Johan?
-Tres añitos es tan hermoso y lo quiero mucho, siento que él llegó para dar sentido a mi vida.
¿Y su papá?
-El nombre de su padre es Albert. Fue novio de Erika. Pero lo eligieron para terminar su carrera en el extranjero, Erika no quiso seguir con un noviazgo de lejos.
Sonrío triste.
- Ya sabes lo que dicen de esos amores.
Terry sólo asintió.
-Cuatro meses después se enteró que Johan venía en camino, trató de localizar a Alberto, pero no tuvo éxito. -Suspiro- Fueron tiempos muy angustiantes para ella. Ahora a mí me tocaba darle fortaleza y ánimo. decidimos que saldríamos adelante juntas como hace años y pues aquí estamos.
-Y lo han hecho muy bien. Johan es un niño hermoso sano y muy inteligente como las mujeres que lo han educado. Y aunque no tengo ningún mérito, me siento orgulloso de él y de ustedes.
Tomó sus manos entre las suyas con firmeza y las beso Candy sonrió agradecida, ella también se sentía orgullosa.
-Y bueno pecas ¿qué trajiste de comer.?
-Espinacas
-¿Espi...que? preguntó Terry con un gracioso puchero mostrando su desagrado.
-¡Vamos! ¿No me digas que no te gustan? Si hasta Johan se las come.
Reía burlona Candy.
-¡No te creo!
Espetó Terry frunciendo la boca y Candy volvió a reír.
-Está bien, tuve que prometerle un premio y darle de comer en la boca.
-Yo también quiero un premio.
Dijo travieso y Candy abrió los ojos sorprendida.
-Y seguro también Quieres que te dé de comer en la boca.
A Terry le brillaron los ojos
-Me parece muy buena idea.
-Ok .
Dijo Candy conteniendo la carcajada tomó el tenedor y cortó un trozo de espinaca que estaba relleno de jamón y queso y se lo dio en la boca. Terry hizo un movimiento rápido con ambas dejas mientras abría la boca y Candy no pudo contener la carcajada.
-Y Bien ¿Qué tal me salió?
-¡Tú! ¿cocinaste?
-Sí. -contestó tímidamente- Eri, me esta enseñando.
Entonces Terry, tomó el recipiente y el tenedor e introdujo un trozo de espinacas a su boca y cerró los ojos degustando.
-hmmm
El movimiento de sus labios y la expresión de satisfacción en el rostro de Terry hicieron sonrojar a Candy.
-¡Delicioso!
Exclamó Terry abriendo los ojos y mirándola con mucho mucho amor
Si, eso le confesó el hombre con la mirada y ella lo comprendió
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Pasando unos días el rostro de Candy se volvió triste Se le veía sonreír muy poco y cuando creía que nadie la veía limpiaba de sus pecosas mejillas, lágrimas de tristeza.
-¿Qué te pasa Candy, porque lloras?
Le preguntó Terry cuando la encontró en la bodega.
-¡Albert, el padre de Joan volvió!
Contestó sin dejar de derramar amargas lágrimas.
-Erika dice que hace tres semanas lo volvió a ver y se enteró de la existencia de Joan... Ahora que se han reencontrado y se van a casar.
-Pero esa no es razón para que llores, al contrario, deberías estar feliz Johan, tendrá su papá con él.
-¡Sí! ¡lo se! pero... Albert, trabaja en Guadalajara... y ¡se los llevara con él!... Y... yo... yo me quedaré sola…
Candy sollozaba dolorosamente, cubriendo su pecoso rostro con ambas manos, el llanto lastimero amenazaba con partir el corazón de Terry, que no soporto mas, acortó la distancia cubriendola con sus brazos, deseando borrar con su calor la tristeza de su corazón.
-Candy… cariño… amor...princesa.
El la mecía suavemente besando su frente llevo su mano al chongo en su nuca y soltó sus rizos y los acarició
Después de un rato la chica suspiro más tranquila el calor, el aroma y la fuerza de su abrazó le daba paz a su corazón. Entonces lo miró al rostro.
-¿Soy malvada? ¿Soy envidiosa? Al no querer que se alejen de mí.
-No, Candy es normal desear estar con quienes amamos y nunca alejarnos de ellos. Especialmente tú que has sufrido la pérdida de tus padres. Pero amor...debes entender y aceptar que es lo mejor para Johan y tu hermana.
Johan, necesita una figura paterna para educarlo y jugar con él
Y Erika, necesita el amor, protección y estabilidad que Alberto el hombre que ama le puede brindar
Y tú, tú tienes que seguir adelante, siempre adelante mi amor.
Hace casi cuatro años hiciste aun lado tus estudios, sueños y aspiraciones. Pero es tiempo de continuar con tu vida, terminar una carrera, de conocer lugares, personas amigos y... enamorarte. Con el tiempo También tú, formaras tu propia familia.
"Nuestra familia " pensó Terry suspirando y estrechandola con ternura en sus brazos. Mientras la joven escondía su rostro en el pecho masculino meditando sus palabras.
-No temas estar sola… Erika y Alberto verán la manera de apoyarte, tal como tu les brindaste tu ayuda durante estos años.
Tu hermana, te ama demasiado ni ella ni Johan se alejaran de tí, ya lo verás. Y yo mi pecosa, tampoco lo haré, estaré a tu lado siempre.
La joven, dejó de refugiarse en él y se alejó un poco para mirarlo al rostro, ese hombre la miraba con amor infinito, estaba segura de eso ese hombre la amaba, como ella a él.
El amor se desbordaba a raudales por su mirada azul y tan sólo por si quedaba alguna duda él inmediatamente se lo confirmó.
-Te amo Candice White Andley…
Y entonces la beso.
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SEIS AÑOS DESPUÉS
-Hola Cristy buenas tardes.
Candy entró al hospital luciendo un hermoso y elegante vestido strapless color vino y bolso a juego.
-¡Hola Candy! !oh wao que guapa te ves!
-Jajaja ¿Guapa? Yo diría que parezco un
balón.
Ambas mujeres rieron. Mientras Cristina salió del estanquillo para darle un abrazo.
-No, qué va, tienes la hermosura de una mujer en dulce espera. De verdad te vez magnífica.
-Gracias. Cristy
-¿Cuantos meses tienes?
-seis
-¿Puedo tocarte?
-Por supuesto pero primero déjame sentarme en el banquillo.
-Ten cuidado está un poco alto .
-Estaré bien, Cristy. Ahora sí, ya que estoy cómoda te presento a mis bebes.
Y tomando su mano la colocó con firmeza en el lugar que ella sabía haría a sus amorcitos bailar.
-Gemelos Candy, que emoción.
Por eso el doctor Granchester trae un humor inmejorable. Se le nota la felicidad a kilómetros de distancia
-Sí, está muy contento y se a vuelto muy sobre protector si por el fuera no pondría un pié en la calle.
Reían ambas mujeres
¿Me podrias ayudar a ponerme estas
zapatillas .
Le mostró unas hermosas zapatillas plateadas en pedrería, con tacón de aguja de 16 pulgadas altísimas.
-¡Oh Candy son preciosas! Pero en tu estado son muy peligrosas.
-Si, pero no te preocupes. No las caminaré mucho, si acaso unos pasos y al lado de mí bastoncito.
- ¿tu bastoncito?
-Jajaja me refiero a mi marido. Siempre que me pongo zapatillas, esté o no embarazada. me sujetó con fuerza de su brazo, para no caer.
-Y ¿Qué están festejando? Porque no te vestiste así solo para venir por él al trabajo.
-Nuestro aniversario, hoy seis de mayo cumplimos cuatro años de casados.
-Tienes razón, había olvidado la fecha. Es una lastima que no pudiéramos estar con ustedes, en esa ocasión tan especial.
-¿Y cómo podrían? Tony, no nos hubiera perdonado echarles a perder su luna de miel.
Cristina se sonrojó.
-Por cierto. Tengo unas fotos de tu boda que me gustaría mandarte. Me podrias dar tu correo para enviartelas.
-Claro me encantará verlas y tambien mandame unas de tu boda. Mi meil es locakris@... ¿Y cual es el tuyo?
- El mio es, Yuriko Yukinawa@...
Un hombre a lo lejos miraba a las mujeres reír. Pero sobre todo admiraba a su hermosa mujer. Vestida con elegancia para esta ocasión . La había citado para cenar en un lugar muy especial para los dos. Y alli estaba sentada de manera sexi en ese banco mientras ambas mujeres acariciaban el capullo donde crecían sus amores.
El hombre elegantemente vestido. Se acercó lentamente, disfrutando de la vista que le regalaban las curvas de su mujer.
-Me permite Cristina, yo haré esa labor.
Y sin esperar respuesta, tomó la zapatillas e hincándose frente a su esposa, comenzó a colocarlas en los finos pies, mientras con movimientos insinuantes, acariciaba la suave piel de sus tobillos y pantorrillas.
La futura madre hacía un esfuerzo sobrehumano, para controlar la electricidad que recorría su cuerpo al ser tocada por su esposo y verlo postrado a sus pies.
Cuando el hombre terminó con su extenuante trabajo, se puso de pie y tomando su mano, la ayudó a ponerse en pié con cuidado rodeando su amplia cintura y ella se sujetaba firmemente de su cuerpo y aun así tambaleo un poco
-Hay, jajajajaja
Reía, la pecosa.
-Creo Terry, ya es muy peligroso que las use.
Pero, Cristy, la última vez que use zapatillas no tuve problema.
-Cristina, tiene razón amor, además la última vez que usaste este calzado mis pecositos eran mucho más pequeños. Toma tu bolso, mejor te llevo en brazos, nuestra reservación nos espera.
la pecosa obedeció, mientras su esposo la levantaba del suelo como frágil pluma. Cómo se sostiene y se protege al tesoro más preciado del mundo y ella se sostuvo del cuello de su marido
-Nos vemos Cristy, que tengas buen camino a casa y por favor dale nuestros saludos a Tony.
-Muchas gracias, les deseo que tengan una hermosa velada. Hasta pronto Candy
El joven matrimonio entró al área de consultorios del hospital y se dirigieron al lugar de su primera cita.
- Aquí estamos pecosita.
Terry la depositó en el suelo y abrió la puerta de la bodega y la joven observó el interior con sorpresa y alegría.
¿Tu hiciste esto?
No era, el más exclusivo restaurante, pero se había esmerado para crear un ambiente romántico y sobre todo lleno de recuerdos.
-No todo, pedí ayuda a algunos amigos.
Le comentó mientras entraban y él cerraba la puerta tras de sí.
-Recuerdas que aquí fue nuestra primera cita.
Le recordó mientras la abrazaba por la espalda y depositada en su cuello besos suaves y caricias causando que electricidad nuevamente recorriera el cuerpo de su esposa
-¿Cita? Pues yo no recuerdo que me hayas pedido alguna cita.
-Tienes razón, nuestras primeras citas no fueron planeadas pero, después de unas semanas ninguna cita fue cosa de la casualidad.
Y él tenía razón, después de algún tiempo ambos buscaban la manera de encontrarse y almorzar juntos.
-Y mucho menos cuando aquí mismo aceptaste ser mi novia.
El, giro a su esposa sobre su eje y sosteniendo firmemente su talle con un brazo, con su mano libre la tomó por el cuello acariciando y atrayendo su rostro hacia él y besándola con deleite
-Y... también... aquí...hmmmm...
acepte ser tu esposa.
Él, sonrió travieso, pues no la dejaba terminar una frase.
-Y no solo eso, hace 6 meses aquí festejamos tu graduación.
Ella enrojeció furiosamente, al recordar lo que había pasado allí, cuando fue a informarle a su esposo, el éxito de sus exámenes y su pronta graduación
El resultado de ese festejo hoy crecía en su vientre.
-Te gustaría que festejemos nuevamente princesa mía.
Le preguntó con voz ronca en su oído haciéndola estremecerse con su voz y sus caricias.
-En verdad me gustaría pero tus pecositos tienen hambre. ¿Que preparaste de comer?
-Jajaja ven amor alimentemos a ese par de traviesos.
Y así entre muchos recuerdos Y envueltos en mucho amor la joven familia se dispuso a cenar y más tarde También seguirán festejando su amor
FIN.
SI, lo se pudo haber sido más larga
Pero de hecho en un inicio era más corta
Espero les haya gustado como a mi me gusto escribirlo
Aunque he de confesar escribir es muy difícil, por lo menos a mi, asi me lo a parecido, pero es hermoso que te den un comentario sincero.
De verdad admiro a todas las escritoras que dedican tanto tiempo y esfuerzo y nos regalan un cachito de su corazón
Mil gracias a todas
Por favor cuidense mucho
Abrazos a todas
pense que ya no la ibas a terminar 
jejeje que bueno que te has animado a escribir felicidades muy romántica 
