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EL MALENTENDIDO
La noche era joven en el circuito de cabarets de Nueva York y Terrence Grandchester miraba de soslayo a los clientes que llenaban el elegante bar ubicado en el Sir Henry penthouse rooftop. Como habituaba después de cada presentación, se iba a relajar en solitario en ese lugar donde sabía no sería molestado ni por admiradoras ni fastidiosos periodistas, que persistían en indagar en su vida privada. Como si fuera lo único que valiera la pena conocer de él.
A la mitad de su botella de su bourbon, distraída la mirada en las luces que se veían desde los ventanales, vio en el reflejo de uno a un par de rubios que les pareció conocidos. Fijó su vista en ellos y tuvo que tallarse los ojos para cerciorarse de que no estaba viendo alucinaciones. El hombre de casi 2 metros le resultó inconfundible, era su famoso amigo Albert... bueno, William Albert Andrew, quien resultó ser un magnate de la industria siderúrgica, pero su cabeza explotó cuando vio a su acompañante, por la posición en la que ella iba caminando a su lado no le pudo ver con claridad el rostro pero estuvo casi seguro de que era Candy White. Que diablos estaba haciendo ella con él en semejante lugar??
Terry sintió que le hervía el alcohol consumido en las sienes y su mente corrió a mil caballos por segundo.
Tomaron asiento y ella quedó de espaldas mientras que el rubio quedó de perfil, ellos al parecer por el lugar donde él estaba sentado no lo pudieron ver, así que sintiéndose como un infortunado voyuerista, los observó a detalle toda la velada. Era evidente que estaban pasando un excelente tiempo juntos, demasiado para su gusto y el nivel de confianza, por no querer decir intimidad entre ellos era vergonzoso de ver. Tuvo que aguantar las ganas de levantarse y armar un escándalo cuando vio como al calor de las copas consumidas, el anteriormente soso y aburrido Albert se acercaba en plan de seducción a la rubia que aceptaba sin pudor los avances de este. Terry dejó que sus celos se desbocaran después de quizá 30 minutos que a él le parecieron horas observando el desagradable espectáculo del par de tórtolos que se desarmaban en arrumacos y un juego previo a un desenlace que a él le estaba revolviendo el estómago.
Incapaz de soportarlo más, se levantó dispuesto a encarar a ese par de descarados, imaginando el rostro de esa sinvergüenza que le había roto el corazón hacia tanto tiempo y se atrevía a portarse como una cualquiera con su mejor amigo en su territorio. Caminó el tramo entre ambas mesas preparándose para irse incluso a los golpes cuando Albert de reojo lo vio acercarse y en un cambio súbito en su gesto pasó primero de la sorpresa, a la alegría al susto.
- Terrence, que gus...
-Con que estás tenemos Cand...?!
Poniendo su mano con rudeza sobre el hombro de la rubia para obligarla a voltear, y para su mayor sorpresa e incredulidad, la chica volteó atónita mientras buscaba con ansiedad a Albert para que la salvara del guapo energúmeno.
- William, que está pasando?? Le conoces???
- Si, Jillian, permíteme presentarte a un viejo y despistado amigo mío de Inglaterra, el duque de Grandchester, Terrence, quien por cierto es actor y fue novio de Candy, de quien ya te he hablado.
Albert le lanzó una mirada furibunda de descontento al trigueño que se quedó pasmado ante la joven que de espaldas se veía igual a Candy, pero que de frente quizá se pudiera parecer un poco pero que definitivamente no era ella. Poniéndose rojo cual cerillo encendido, se disculpó intentando hacer una broma y apurándose a marcharse poniendo un pretexto absurdo, mientras Albert lo miraba queriéndolo traspasar de furia pues perfectamente comprendió lo que había pasado por la mente del celoso de su amigo.
-Por cierto, Terrence, cuando gustes puedes escribir a Candy, está viviendo en el hogar de Pony.
-Oh, amigo, gracias por avisarme, lo siento debo irme ya.
-No, no te molestes, nosotros ya nos íbamos también, tenemos una suite aquí mismo, regresa a terminar tu botella. Adiós.
El par de rubios se marchó evidentemente incómodos por el episodio, Albert aún alcanzó a mirar de reojo y cabreado por la reacción de Terry, quien se quedó en el bar aún sin atinar a razonar ante lo que acababa de pasar...
Última edición por Maga Cafi el Miér Mayo 20, 2020 9:19 am, editado 1 vez
