LA AMENAZA
By Cherry
Es normal que llegado a cierta edad en la vida de una niña, se hace cierta algarabía porque se hace su presentación en sociedad... cada familia que tiene una hija con su apellido, se prepara meticulosamente para dicho momento, pues... desean que tras dicho evento... tras ser expuesta como un trofeo... un objeto de exposición... los padres puedan recibir tentadoras propuestas para un enlace más que beneficioso.
Para cualquier familia, es un sueño poder emparentar con alguien de la alta sociedad... y tras ello, enfocan todo su empeño, para que dicho día, en que la joven dama... entra en el salón, portando su mejor vestido, engalanada con exquisita joyas y hermoseada con sonrisas tímidas y candorosas... se encuentre rodeada de la crema y nata de la ciudad, poderosas familias, con apellidos reconocidos y de renombre, esos que dicen que su futuro económico está solventado hasta el fin de sus días... sí, todos buscaban el apellido "Du Pont, Mellon, Rockefeller, Brown, Cornwell o Ardley" en fin... que cualquiera les venía a bien.
En el caso de los chicos es igual, pero con menos efusividad, al fin de cuentas, su única carta de presentación que necesitaban... eran los ceros tras la coma que acompaña al apellido. Y eso nunca aseguraba que el joven tuviese el mejor de los talantes, un carácter de ensueño o la madurez adecuada. Como era el caso de los herederos de la familia Cornwell.
El mayor de los hermanos, ya había mostrado desde muy pequeño cierta predilección por las travesuras que él llamaba los "inventos"... en más de una ocasión habían salido volando las tuercas, explotando motores e incendiando salones... el pobre se excusaba diciendo que "quería presentar algo especial para cada evento" logrando el mismo resultado catastrófico... sus padres, se habían rendido y la tía abuela -que siempre llegaba para su aniversario- se terminaba riendo, por las caritas de complicidad que utilizaba el pequeño Archy para liberar a su hermano Stear.
Por lo que ésta vez no se podía quedar tranquilo, aparte de ser su cumpleaños, su querida tía -que no es querida en lo más mínimo- Sara Legan, había logrado que la talentosísima soprano Patricia Janeckova, haga una presentación especial en la fiesta que estaban organizando en su honor.
El eco del tacón de sus zapatos, anunciaba que se acercaba hasta la habitación en donde estaba el castaño ajustando con el destornillador unas partes al objeto en sus manos.
- Stear...
Llamó la mujer una vez había entrado a la habitación sin previo aviso, tomando por sorpresa al castaño
- Señora Legan... ¿Qué hace aquí?
contesta ocultando el objeto con una manta
- Nuestra invitada de honor acaba de llegar, vengo a decirte que dejes lo que estás haciendo... y te prepares para la fiesta
- Señora Legan, el invitado de honor soy "Yo" que no se le olvide... es mi cumpleaños, por consiguiente, sin mi presencia dicha fiesta no tiene razón
- Muchacho insolente... no tienes idea de nada... por tanto, te exijo que no hagas ninguna de tus travesuras y estropees la fiesta
- ¿Me exige? ¿Usted a mí?
- Así como lo has oído
- Mire... "SEÑORA" desconozco la razón por la que mis padres permitieron que fuera usted quien organizara esta fiesta, para el interés que le tengo... pero usted, solo hace eso... no tiene poder en mi vida ¿entendió?
-Muchacho insolente ¡No permitiré que estropees mi trabajo, tendré que hablar seriamente con tus padres para que te han entrar en razón
- Bueno, hasta entonces... adiós
y con un empujón para nada sutil, la sacó de su habitación; Sara estaba furiosa y Stear soltaba un suspiro de exasperación. Cogió sus cosas que estaban sobre la mesa y salió al patio para ultimar los detalles de su invento.
Mientras ajustaba con la llave inglesa las últimas piezas, un joven de cabellos dorados y mirada azur -Sí, he puesto "AZUR" deliberadamente- camina hasta donde él y lo observa silenciosamente... el aire acariciaba sus cabellos a la vez que lo hacía ver como un ser místico... o al menos eso fue lo que pensó la señorita Patricia, al ver a los jóvenes en el jardín, ajenos a su presencia... ya que iba con la señora Legan, ultimando los detalles de su presentación
Fue el estruendo que se escuchó con fuerza en toda la casa, la rubia salió corriendo hasta donde segundos antes había visto a los chicos y una humareda los envolvía
- Coj, coj, coj... ¿Estás bien Stear?
-Coj, con, coj, con... sí no te preocupes Anthony... creo que he puesto mucho catalizador y...
- ¡¡PERO ¿QUÉ SIGNIFICA TODO ESTO?!! Stear, estás completamente loco ¿cómo se te ocurre montar una bomba en este lugar? ¡Deberían encerrarte para que dejes de hacer tantas locuras!
- Pero ¿Qué dice señora?
- Oooh... lo que has oído ¡Te mandaría ahora mismo a alcatraz! para que dejes de hacer tantas locuras
Los jóvenes estaba sorprendidos por la manera tan desmesurada de reaccionar de la mujer... tras escuchar una perorata sin sentido...
Stear aun estaba un poco en shock por la amenaza ¿Alcatraz? Esa prisión donde van los peores delincuentes y que está en un isla de la cual parece imposible poder escapar... como si fuese él, el peor de los villanos ¿Qué le pasa a esa mujer?... una vez repuesto de la primera impresión, se atrevió a contestarle
- Con mucho gusto aceptaría semejante condena... si usted, al cumplir con su amenaza, me librará de una vez de su presencia
- ¿cómo dices?
- Que no le temo a sus amenazas señoraaaa... diga lo que le quiera, yo seguiré siendo siempre Stear... y si no le gusta, ¡adiós, muchas gracias!
- Ohss.. muchacho insolente ¿Te crees que son simples amenazas?
- No... sino, palabras sin sentido... No se le olvide señor, quién soy yo ¡Es mi cumpleaños y hago lo que me venga en gana! Para eso es mi fiesta... por eso invité a quienes yo quise... mis amigas del Team Retos, Las guerrera del Zafiro, Las de la Mansión Legan, Ady AMDA, Rossy Castaneda y ¡A quién me sale del gorro, porque ¡ES MI CUMPLEAÑOS! ¿LO ENTENDIÓ?
Furiosa, Sara se da la vuelta al ser consciente de la presencia de la joven a su lado, no podía darse el lujo de montar semejante escena frente de sus invitados, por lo que se marcha, mientras que Patricia le sigue los pasos... la joven rubia se había quedado sorprendida por la respuesta del castaño, soltó un suspiro con cara de ensoñación y con una idea muy clara para decirle a su representante.
Una vez que las mujeres lo dejaron solos, el rubio puso una mano sobre su primo y le pregunta
- Oye ¿estás bien?
-Sssi... sssí... creo que sí... ha sido por la explosión o yo qué sé... algún sueño extraño... nunca había reaccionado así ¡Me sentí tan diferente, pero muy a gusto contestándole a esa mujer así!
- Hahahaha... ya lo puedes decir que sí ¡Muy diferente! bueno de momento está bien... será mejor que vayamos a cambiarnos para poder estar presentables en la fiesta
- ehh... sí... claro
Se fueron pues, a sus aposentos con la idea de estar presentables para cuando llegasen los demás invitados... Stear estaba aún conmocionado por lo ocurrido, no sabía si tomar en serio o no la amenaza de esa mujer, quiérase o no "Alcatraz le daba yuyu"... por lo que tranquilamente tomó asiento donde Sara le dijo. Los músicos estaban tomando posición a la vez que los invitados se presentaban.
Cuando ya todo estaba en donde se supone debía estar... los músicos empiezan a tocar... pero de presto se detiene porque un caballero llevaba algo... como una muñeca... una muñeca rubia con dos coletas y la deja en medio del escenario...
Todos estaban sorprendidos y un poco confusos... pero una Sara Legan estaba al punto del síncope cuando reconoció a la soprano Patricia Janeckova... entonces la música suena y la muñeca a cantar
Una vez terminada la función, los invitados aplaudieron por tan hermoso acto... luego, la rubia Patricia se para en el centro del escenario se aclara la garganta y le dice al cumpleañero
- Por cierto Stear, yo con mucho gusto me iría contigo a "ALCATRAZ"
El castaño se ríe abiertamente y mira de soslayo a la vieja bruja... perdón, digo a la tía Sara Legan... y con una sonrisa más que perversa pasa a su lado y dice con sorna
- Yo con esa muñeca, me voy ahora mismo a "ALCATRAZ"
FIN