-No te preocupes Archy, igual pienso continuar. Vamos, que de seguro la final estará por comenzar.
-Pero Candice… ¿Y tú brazo? ¿No temes que empeore la lesión o no puedas lanzar bien debido al dolor?
-Tranquilo Stear, el doctor me ha dado unos calmantes y están empezando a hacer su efecto. Con ello podré aguantar, luego te prometo que descansaré todo lo que sea necesario y más para poderme recuperar, pero ahora mismo no. Por lo visto Neil hizo que me callera de Tormenta porque querían eliminarme, tal vez para que Eliza no me tuviera como rival en los juegos, o por simple maldad, quien sabe. Así que no debemos decepcionarlos y continuar participando.
-Pero Candice…
-Ya de verdad, estaré bien. Esto tengo que hacerlo por Anthony. Además, no podemos dejar que la conciencia de los traidores descanse en paz.
-¿Quieres decir exactamente?
-Chicos, ustedes saben perfectamente cómo son Neil y Eliza, y cómo se las gastan.
-¡Son unos desgraciados!
-Cuidado con esa boquita Archy, no digas esas barbaridades obscenas… ha, ha, ha.
-Ha, ha, ha… sí Candice, sé que son cosas peores, pero no las puedo decir enfrente de ti, eres una dama.
-Te lo agradezco, vosotros sois bueno chicos. Anthony también, dulce, amable y carismático, pero a veces demasiado sobreprotector, más después del accidente del día de la caza… y no lo entiendo por qué...
-¿En serio no entiendes sus razones Candice?
Inquiera Stear sorprendido, la joven frunce el ceño un poco confundida, pero luego descarta perder el tiempo intentando comprender lo que él acababa de decir.
-¿Consciencia? ¿De qué hablas?
-He, he, he… es que le soltado una mentirijilla a Neil
Confiesa entre sonrisas, les explica lo que pasó en la enfermería y la razón por la cual necesitan que usen los inventos de Stear para hacer cantar a Neil sus fechorías. Lo hermanos no pueden evitar partirse de la risa por la ocurrencia y aceptando de buena gana participar de la broma. <<”Tranquila Eliza, yo me encargaré personalmente de ti”>> sentencia la joven mientras la observa tomar su puesto para empezar la final.
Poco a poco las otras chicas fueron descartadas, hasta que finalmente quedaban Patricia, Eliza y Candice para tirar a las dianas a 90 yardas. La primera en hacerlo fue la señorita Patricia O’Bryan quien sólo pudo asestar en el área roja sus flechas, después fue Eliza Leagan; cuando se posiciona para lanzar la primera flecha, ésta queda cerca del área azul.
Insatisfecha consigo misma avanza para tirar a la segunda diana su concentración es interrumpida por esa voz que decía >>”No habrá paz para los malvados, dice el Señor… y por eso él termino en enfermería”>> y sin proponérselo la pelirroja suelta la flecha y termina en el límite del área amarilla. Pero ella sólo quiere ver por qué Candice había dicho eso, es entonces que se percata que su hermano no está. De presto un escalofrío la recorrió inesperadamente y sus manos empezaron temblar por lo que al lanzar su última flecha ésta y no acertó en ningún lugar.
-Candy ¡Eso ha sido tú culpa!
-¿Qué dices Eliza? ¿Acaso tu conciencia se perturba con una simple oración?
-¡AHORA ES EL TURNO DE LA SEÑORITA CANDICE ANDREW!
Se escucha por un altavoz llamar a la joven por lo que la pelirroja no pudo decirle más. Se ve como la rubia toma posición y lanza la primera flecha, ésta da de pleno centro del área amarilla, continua a la segunda diana y también acierta, cuando llega a la última se prepara mientras continua con su "rezo"...
-Porque yo estaré contigo y derrotaré a tus enemigos…
¡Zas!
Sale disparada y acierta en la diana, Eliza está que bulle del disgusto y cuando la rubia se gira para verla con una sonrisa traviesa, no puede evitar disimular su enojo y rompe la varilla de una flecha; entonces Candice vuelve a tomar otra y dispara, dando en el mismo lugar partiendo en dos la flecha que había lanzado anteriormente.
La victoria es innegable que le corresponde a la señorita Andrew. Eliza sólo recibe un ramo de flores por el tercer lugar, Patricia también más el listón del segundo lugar y cuando llegó el momento de premiar a Candice, un caballero se acerca tras el juez que ha otorgado los galardones
-Es un honor como Duque de Grandchester entregar el broche “Nobleza Real” por su astucia y talento a la señorita Andrew. En hora buena señorita, ha sido una participante admirable, se merece el primer lugar
-Muchísimas gracias Duque de Grandchester.
Agradece la joven a la vez que observa el objeto que ha sido prendido en la solapa de su chaqueta; una base de oro en forma circular, contiene perlas que rodean un diamante en su centro, haciendo palidecer el hermoso y sencillo alfiler de oro en forma de flecha que ha ganado por obtener el primer lugar.
Todos los presentes se sorprenden, reconocen la joya y saben que siempre ha pertenecido a la familia del Duque, y nunca antes habían premiado a un alumno. Más no sabían que era una especie de compensación por parte de él para con Candice pues había reconocido su talento, aunque lastimosamente había sido elimina de la competición de hípica y se había lesionado.
Acto seguido Archy se acerca y le coloca un pañuelo en forma de cabestrillo, luego fueron con todos los demás para la clausura del festival. Un joven de cabellos castaños había estado observando a la joven en la distancia desde el momento que se calló del caballo y se había querido acercar para ayudarla cuando se sucedieron éstos hechos, tenía curiosidad por saber cómo se realizarían las cosas que la rubia tramaba.
Cuando termino el festejo los jóvenes Andrew se despidieron de la tía Elroy e intentaron ocultarle las tragedias y el hecho que Anthony estaba castigado. Entonces Candice aludiendo que se sentía dolorida se retiró a la habitación y el siguiente día tampoco salió, obtuvo el tiempo suficiente que necesitaba para poder conseguir lo que quería.
Al día siguiente hubo gran alboroto en el dormitorio de los chicos, Neil gritaba asustado porque veía manchas de cascos de caballo en sus sábanas y techo, varias personas se acercaron para ver de qué se trataba y las monjas también; al querer explicar la razón de su espanto ni uno le daba crédito pues no veían nada a lo que él se refería
-Pero es verdad… yo las vi, mis mantas estaban llenas de huellas de caballo
-Ay, ay, ay ay… me parece que nuestro primo Neil está teniendo delirios hermano ¿Qué será lo que le está atormentando la conciencia?
-No lo sé Archy, pero es muy sospechoso
-¡Silencio todos! Será mejor que se dirijan a los salones que las clases están por iniciar, y usted señorito Neil no tomará la cena toda la semana, la glotonería perturba el descanso de las mentes jóvenes y es un pecado, seguro comió en exceso en el festival por lo que necesita hacer una purga en su organismo, y así verá que ya no tendrá esas alucinaciones.
Los chicos se ríen por el castigo a Neil, pero para él las cosas no se calmaron. Escuchaba los cascos de animal cada vez que paseaba por los pasillos, la sombra de una cabeza asomaba por todos lados, hasta que en plena noche ésta vez le habló
-Tuuuu… por tu culpa me mataron… ¡Eres el culpableeeee!
-¡Aaaahhh! ¡No, no hice nada! ¡Aléjate!
-¡Por tu culpa me mataron… ahora vengo a torturarte!
-Aaahhhh
Grito despavorido Neil saliendo de la habitación, los demás alumnos se asoman para ver de qué se trataba y las monjas también. Lo encuentran acurrucado tapándose los oídos, temblando como una gelatina y gritando
-¡Lárgate! ¡Déjame en paz!
-Huuuu… sólo si admites la verdad
-¡Está bien, está bien! ¡Fui yo, fui yo! ¡Yo corté las cinchas de la montura de Candy! ¡Fui yo! Pero sólo quería que la descalificaran de la competición, nunca imaginé que Anthony te mandaría a sacrificar ¡Ve a torturarlo a él!
-¿Qué significa todo esto?
-¡Hermana Gray, lo siento! Fui yo… yo hice Candy callera del caballo, pero no le hice nada al animal, por favor ¡Quíteme ese fantasma de encima!
Todos estaban sorprendidos por la confesión del joven, la superiora estaba muy molesta e inmediatamente ordenó que lo llevaran a la torre de castigo y que mandaría a llamar a sus padres.
-Neil Legan, quedas expulsado un mes.
Dijo la superiora molesta por las últimas revelaciones. Los hermanos Corwell se congratulaban por haber conseguido su objetivo. Desde el balcón de su habitación Candice había visto las luces encenderse en el pabellón de los chicos imaginando la razón de ello, por lo que decía a sí misma <<”Pronto… pronto te llegará la hora Eliza”>>
Última edición por Cherry Cheddar el Mar Abr 19, 2022 3:23 pm, editado 1 vez