¡¡¡POR ALBA!!!
¡¡El Clan Alba Highland´s Andrew!!
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FIC
Necesito dinero
Por Mayra Exitosa
Capitulo 1
¡Sin manto ni cama!
Necesito dinero
Por Mayra Exitosa
Capitulo 1
¡Sin manto ni cama!
El hogar de Pony era algo que ya estaba muy lejos, ya no podía continuar viviendo a expensas de dar el servicio de enfermería, habían sido años de trabajos varios, hospitales que te contrataban por un periodo corto y otros tantos despidos sin trabajos largos. Pagar renta, ya no era tan posible, vivir con las compañeras, ya no se podía después de quedarse sin un ingreso constante. Irse a otro lugar, no era tan fácil, todos estaban en similares circunstancias, al que consideraba su mejor amigo, ya estaba casado, Tom se había quedado en el rancho de su padre. Y pedirle ayuda, después de que su mujer ya iba por el tercer hijo, no era lo más prudente.
Las amigas que conoció hacía años que estaban casadas y algunas estaban de viaje y no podía contactarlas. Volver al hogar, era ser la carga de casa, debido a que ya contaban con tres enfermeras y todas vivían ahí, ayudando con los niños, que casualidad, ella misma las había recomendado y ahora se encontraba de nuevo y sin trabajo. El doctor Martin, si, el pudiera darle de nuevo trabajo, pero si seguía bebiendo, que le podía esperar, aun así, no podía darle alojamiento, solo trabajo gratuito.
En ese dilema se encontraba, con su maleta con su maleta a un lado y viendo las aves volar al sur, pronto llegaría el invierno y estaba sin un lugar donde dormir. A lo lejos vio a un hombre con un saco en el hombro, lo notaba desorientado, mirando hacia el sol con un… animal que él había saltado al hombro ¡Por Dios!
Corría a ayudarlo, cuando el animalito al verla se asustaba y salía directo al árbol cercano.
--- ¡Tranquila Pupe! Es solo una chica.
--- Pensé que le había… brincado para atacarlo. ¿la conoce? ¡por Dios! Si hasta la llamó por su nombre.
--- Si, es mi amiga.
--- ¿Su amiga?
--- Si. Ambos vieron hacia el árbol donde cuidadosa, la mofeta salía asomándose a mirar a la dama que con sus ojos muy grandes la veía.
--- Ven Pupé, la señorita no quiere hacerte daño. Solo que no sabía que eres una dama. Candy giraba a verlo con una dulce sonrisa el hombre la miraba, mientras estiraba el brazo para que la mascota, se subiera de nuevo a su hombro. --- Veo que no le asustan los animales.
--- No. También tenía una, pero se quedó en un bosque muy bonito y estoy segura de que al menos tiene un buen hogar. Bajaba el rostro desanimada y el al notarlo le preguntaba,
--- ¿Y usted no?
--- En estos momentos no. Espero encontrar mañana trabajo y ya luego veré si puedo conseguir donde vivir.
--- Lo siento. Por eso esta usted sola a estas horas, cuando ya va a anochecer.
--- Si. Lo vi a lo lejos y por un momento pensé que estaba mal, luego vi a su mascota y…
--- Ya veo. Pero que le puede pedir este lugar tan bello, con este manto de estrellas, y una cama confortable de verde pasto, es saludable.
--- ¿cama? ¿manto? Por favor, es usted un poeta muy imaginativo. Espere un par de semanas a ver si con la nieve, se le blanquean las sabanas y piensa que su manto es cálido y su tapete verde yace escondido.
El hombre con un zorrillo al hombro soltaba una sonora carcajada, al escuchar como la dama era pesimista y ya se veía sin casa en dos semanas, y para colmo sin cobijas.
Con el rostro colmado de incredulidad, admiraba que aun siendo un vagabundo, sonreía bastante bien, era alegre, portaba un animal algo difícil de domesticar, no sufría por sus evidentes necesidades de hogar y era tan optimista al saberse en un bosque, como si fuera a la casita de un árbol a refugiarse en cualquier momento. Al solo imaginarlo no pudo evitar reír, y mirando a ese par, ella también reía por su imaginación tan divertida.
CONTINUARA…