RESACA
"¿¡Qué demonios hice anoche!?" Daniel Leagan preguntó por quinta vez ese mediodía, o ya era más tarde? Sus recuerdos se desvanecian y sólo tenia por seguro el terreble dolor de cabeza que se sentía como un martilleo constante, el no saber donde está, cómo diablos llegó ahí, malestar corporal, ni que decir del sabor metálico desagradable en su boca y algo más, "¿por qué no puedo mover mis piernas libremente?"
Intentó recordar algo más allá de la junta de negocios en la que cerró un magnífico trato con la más grande compañía hotelera de Europa, salió a festejar como siempre, pero no fueron al bar habitual, Patrck, su antiguo compañero del San Pablo y nuevo socio, sugierió un nuevo lugar, discreto donde podian tomar y tener todo lo que quisieran.
Recordó haber llegado, a las hermosas edecanes vestidas con fina lencería y la música, que pidió uno o dos martinis, a la bella castaña de ojos violetas que se sentó a su lado... pero nada más. Revisó su celular, tal vez alguna llamada, fotografía o mensaje le ayudaría; si, una llamada a la una de la mañana, con duración de casi una hora; llamó a..."No es posible!!!" De todos sus contactos, por qué a ella? Pero, necesitado de respuestas, y al no saber en donde estaba, con un suspiro resignado, marcó
"Buenos días", dijo con cierto temor. "Buenas tardes," contestó la bella chica, "ya te sientes mejor?" "Pues... la verdad, tengo una terrible resaca y no recuerdo nada, ni cómo llegué a este departamento. "
" Bien, estás en mi departamento, te llevó el taxista que ayer te recogió de un bar en el centro, en el botiquín del baño hay aspirinas; y ah! deja la llave con el portero..." "No, bueno, gracias por esto, pero, qué pasó anoche? Por qué te llamé y estoy aquí?" "Realmente no recuerdas NADA?" Sonrió con un toque de malicia la rubia.
" Bueno, según sé, saliste a festejar un nuevo contrato, y las cosas se salieron de control," " De qué hablas?" "No sé que te metiste esta vez, Neal, me llamaste desde el baño del bar, asustado porque creias que tu miembro al estar colgando entre tus piernas, moviendose solo y goteando, se podría caer, y querias una opinión médica, hasta me enviaste unas fotos."
Neal palideció, tragó pesado y preguntó tartamudeando"¿¡Qu..queeé, yo queeé!!??" Frotándose la cara con vergúenza y desespero, preguntó " Algo más?
"Después de que intenté explicarte que no se caeria ni estaba en tu contra, ya que empezó a moverse más y creíste que te atacaría, te quitaste un calcetín para contenerlo y lo ataste con una cuerda." " OMG!!"
" Descubriste también que el agua no tiene sabor y que mojaba, e intentaste sacarme de la pequeña caja dónde estaba encerrada por la vídeo llamada; ahh!, y también querías salir desnudo a la calle, al final, contacté a Charlie, un taxista de confianza para que te llevara a mi departamento, para que no corrieras ningún peligro."
No vuelvo a tomar así, decidió el moreno tajante. "Gracias por todo, Candy, no sé qué hubiera pasado sin tu apoyo, espero contar con tu discreción." " No hay problema, Neal, algo más en lo que te pueda ayudar?". " Sólo que no se entere nadie de la familia, y borra las fotos, no quiero que nafa de esto se sepa." " Pierde cuidado, te dejo, ya casi termino mi guardia." Candy colgó y sonrió, miró el reloj y fué a entregar el turno, nunca se pensó que ese turno doble le resultara tan divertido!!
Flammy, Julieth y Nancy se le acercaron y preguntaron "Era él?" "Si, no recuerda nada y llamó para obtener respuestas y pedirme que borrara las fotos que envió... pero no dijo nada del video. Comentó inocentemente" "Las chicas soltaron una carcajada mientras subían a la red el video, donde un Nael completamente tomado y desesperado se puso pegamento de contacto ( kolaloka) en los testículos para pegarlos a su entrepierna para que no se fueran a caer.