.. Lo siento, mi cuerpo avisa algo distinto, la visita mensual ausente por 2da vez..
Despierto, me levanto y observo el paisaje en degradación de colores ocre. Se siente el frio viento, caen las hojas de otoño muchas secas y algunas verdes, se posan en un mundo acostumbrado a ver morir, a pasar la página cuando la hoja marchita cae en la tierra.
Tomo mi bebida caliente, observando por la ventana, obviando cualquier reflejo de mi ser.
Me siento en mi mecedora de roble, hoy es diferente, siento algo que me impulsa, el estruendo de una bomba dentro del corazón imposible de apaciguar, con las palabras del Doctor aun repitiéndose en mi cabeza NO ES EMBARAZO la ausencia de tu ciclo, no puedes concebir, así que tomo mi bolígrafo y saco mi diario para desahogar, porque
entre el día de los santos, los muertos o el fin de año, cualquiera es el momento para contar las luces brillantes e intensas al final del túnel.
Haz lo que tú quieras, mi estandarte, Lo que tú quieras nunca es sencillo, el debate en torno a la maternidad es denso y "el duelo al desconocido hijo que nunca conocerás” te ahueca el alma.
Hay mucha presión social para ser madre. A las mujeres desde jóvenes nos crían diciéndonos que la maternidad es la esencia de nuestra vida.
Se piensa en la maternidad como una experiencia idílica y perfecta que nos va a proporcionar felicidad constante.
Hay Madres por convicción, amor, y otras que se convierten en madres para evitar la condena del entorno.
Creo que yo desde muy niña sentí que eso no sería para mí! Al menos de la manera natural.
De chica veía algunas niñas jugando a la casita , la mamá, yo optaba por operar y curar a mis muñecos.
Dar a luz y criar a un niño no es la única manera para nosotras las mujeres de tener ese vínculo especial en amar, criar, orientar.
Rompiendo el complot del silencio “Los hijos pesan y la ausencia de ellos mucho más y eso cambia tu mundo”.
Puedo quedarme mirando el infinito, pero Dios en su amor tiene la última palabra y nos salva.
Y aquí estoy años después enamorada de mi Profesión la medicina, a través de ella he sido "Madre de muchos", porque Dios no nos abandona y tiene una misión para cada quien. Confía !