Hola Foristas
Hace mucho, hace quizás un par de años pasé por aquí para pedir la ayuda de todas ustedes. CFRio necesitaba nuestra ayuda. Necesitaba donadores de sangre con urgencia. No sé si lo recuerden. Yo sí. La respuesta de ustedes señorinas fue excelente, realmente excelente. Avisos, mensajes de apoyo, hubo de todo y les agradezco en nombre mío y muchos otros, todo su cariño y esfuerzo hacia CFRio.
Hoy, en atención a todas ustedes que alguna vez cobijaron a CFRio cuando más lo necesitaba, me sentí en la necesidad de venir y avisarles que nuestra querídisima amiga ya por fin está descansando. El lunes partió, se liberó, y nos dejó un rastro de recuerdos invaluables, de profunda tristeza por su perdida y de gratísimos recuerdos dentro y fuera del Candy Mundo, que ahí están y seguirán estando siempre.
Quienes se van, en ese momento ya son parte del sonido de la mañana, de la calma de ese momento en que invariablemente el pensamiento callado vuelve a repetir los abrazos y los gestos, de ellos los que se van. Los que partieron a la distancia de una idea, de un parpadeo, de cada palabra certera de sus bocas, de esas sus miradas que confortan desde la inmensidad.
Hay quienes se van, secamente se van. Hay otros que murmuran, sonríen, prestos a saltar cuando más necesitamos su compañía, su voz suave que escuchamos aunque no se oiga nada. Que estarán siempre
Así es María Flores, nuestra amada CFRio
¡gracias!
Hace mucho, hace quizás un par de años pasé por aquí para pedir la ayuda de todas ustedes. CFRio necesitaba nuestra ayuda. Necesitaba donadores de sangre con urgencia. No sé si lo recuerden. Yo sí. La respuesta de ustedes señorinas fue excelente, realmente excelente. Avisos, mensajes de apoyo, hubo de todo y les agradezco en nombre mío y muchos otros, todo su cariño y esfuerzo hacia CFRio.
Hoy, en atención a todas ustedes que alguna vez cobijaron a CFRio cuando más lo necesitaba, me sentí en la necesidad de venir y avisarles que nuestra querídisima amiga ya por fin está descansando. El lunes partió, se liberó, y nos dejó un rastro de recuerdos invaluables, de profunda tristeza por su perdida y de gratísimos recuerdos dentro y fuera del Candy Mundo, que ahí están y seguirán estando siempre.
Quienes se van, en ese momento ya son parte del sonido de la mañana, de la calma de ese momento en que invariablemente el pensamiento callado vuelve a repetir los abrazos y los gestos, de ellos los que se van. Los que partieron a la distancia de una idea, de un parpadeo, de cada palabra certera de sus bocas, de esas sus miradas que confortan desde la inmensidad.
Hay quienes se van, secamente se van. Hay otros que murmuran, sonríen, prestos a saltar cuando más necesitamos su compañía, su voz suave que escuchamos aunque no se oiga nada. Que estarán siempre
Así es María Flores, nuestra amada CFRio
¡gracias!