GUERRA FLORIDA 2016 CLASE ESPECIAL AQUELARRE ANDREW
AMOR PERDIDO Disclaimer: Los personajes de Candy Candy pertenecen a la novelista Kyoko Mizuki, la mangaka Yumiko Igarashi y/o Toei Animación. Esta historia es de mi autoría, producto de mi imaginación. El uso de los personajes y sus nombres pueden contener variaciones en sus caracteres y/o similitudes. Así como también partes del manga han sido tomadas para fines de la historia que ha sido escrita sin fines de lucro y sólo para entretenimiento.
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Negocios, acuerdos, reuniones...
¡Lo tenían hastiado!
Y ni qué decir del ítem numero dos de la agenda que daba como prioridad y que estaba ubicada precisamente debajo de la carpeta amarilla, con los planes para su presentación como jefe del clan, que estipulaba debía escoger esposa y así ofrecer estabilidad al consorcio.
Tenía tres semanas para anunciar su compromiso o el voto de confianza le sería retirado.
Aún recordaba la estupefacción y el rostro de sorpresa de la junta de su consorcio cuando había dejado claro que si bien él era joven, no era ningún blandengue. ¿Por qué tenía que regirse por lo que ellos decían?
Él era un espíritu libre, alma de rebelde, que jamás permitía a alguien imponerle decisiones descabelladas y que tuvieran que ver con su vida privada.
Entonces…
¿Por qué en otro tiempo había guardado tanto silencio? ¿Es que acaso valía la pena arriesgar su felicidad?
¿Merecía sentirse solo cuando la solución se hallaba a unos cuantos minutos de su estancia?
Masajeándose el puente del seno de la nariz, Albert suspiró lentamente observando como las aves volaban y trinaban abiertamente en el exterior de la mansión de Chicago envidiando su libertad y deseando poder regresar a esas épocas donde su mayor preocupación había sido tener un lugar donde reposar unas horas antes de seguir explorando la sabana africana.
El atardecer se manifestaba con sus nubes grisáceas anunciando la llegada de una ligera llovizna primaveral.
El ambiente en el exterior era tan distinto y acogedor al estudio sombrío que lo acogía en esos momentos.
Tenía que salir. Necesitaba respirar. Entonces decidió que se tomaría unos minutos para despejar su mente.
Dado el buen tiempo allí afuera, recorrer el prado a caballo no le pareció una mala idea. Así que levantándose del sillón, dejó los documentos tal y como estaban para a continuación dirigirse hacia sus aposentos y colocarse una ropa más adecuada para cabalgar. iBrommm!
Sin imaginarse cómo, una pila de polvorientos libros aterrizó estrepitosamente a pocos centímetros de sus pies logrando que Albert mirase hacia el ala izquierda del tercer piso de la mansión.
El siempre había sido práctico, pero jamás desordenado, así que se limitó a recoger uno por unos los libros sin mirar siquiera sus cubiertas.
Cuando los tuvo apilados, los alzó sin importar que su traje se iba a ensuciar y se dirigió hacia la escalera más cercana desde donde había provenido la caída.
El personal del servicio no se encontraba a esas horas, así que no se molestó siquiera en llamar a alguno de ellos, solo por unos libros.
Depositó los compendios junto a los otros y se dio media vuelta para seguir con lo que había planificado.
Un libro pequeño de color jade entró en su vista periférica llamando su atención. Tenía las siglas A. P.
Recordó que en su niñez, un libro parecido había estado en su poder y lo había atesorado con mucho cariño, pero por desgracia una mañana había desaparecido de su habitación como si nunca hubiese existido.
Llevó el libro a su dormitorio y con sumo cuidado comenzó a limpiarlo. A medida que se revelaba el contenido, la conmoción le embargó por unos instantes. ¡Ese era el libro que había perdido!
Sin pensarlo dos veces, Albert fue hasta las últimas páginas y comenzó a leer emocionado:
Querido príncipe:
Cuando leas estas líneas, quiero que sepas que lo hago con el corazón en la mano lamentando no poder estar presente en años tan importantes para ti. Espero que a tu corta edad, estas letras que te dedico puedas aprendértelas... Porque llegado el momento, las necesitarás pequeño Bert.
Me duele dejarte en estas circunstancias cielo mío, pero confío en que mis palabras puedan guiarte en determinados momentos en busca de claridad.
Cuánto no daría por veros crecer a tu hermana y a vos. Pero el momento de partir a un lugar mejor ha llegado con mucha antelación para mí.
Obedece a tu padre, tolera y protege a tu hermana y por sobre todo valora a la familia. No siempre será fácil hijo eso puedo asegurarlo, sin embargo, he aprendido a vivir la vida esperando lo mejor y tolerando lo peor.
Que esto no se entienda como una manera de idiotez, al contrario, es a pesar de la idiotez que llegue a rodearte que deseo aplaques tu orgullo y te muestres sencillo ante los demás.
Crecerás con el peso de la responsabilidad a cuestas y aunque no me veas físicamente para decírtelo, jamás permitas que tu posición abuse de los demás.
Te exaltarán con miles de elogios, muchos realzarán tu posición y buen nombre, pero Bert, que eso no se suba a tu cabeza.
Habrá días muy malos y otros no tan buenos, pero recuerda que el destino no es cosa del azar. Lo formamos con nuestras elecciones del día a día.
Solo te pido una sola cosa. Jamás vayas en contra de lo que crees.
"La decisión debe ser solamente tuya, por sobre todas las cosas no traiciones tus principios y tu manera de pensar. Respétate, los seres que te aprecian entenderán y sus afectos por ti crecerán, porque el respeto engendra amor en quien lo practica.”
Siempre tus actos sean dictados con la sensibilidad de tu corazón pero con la sabiduría de la razón.
Jamás permitas avanzar o tomar una decisión basada en dudas porque si lo haces, ten por seguro que lo lamentaras en el futuro.
Me habría encantado conocer a la afortunada que llene tu vida de luz y alegría. Así que, cuando llegues a conocerla y sepas que es la indicada....
Llévala un lugar especial. No tiene que ser algo elegante o elaborado, ni siquiera un plan inmensamente creativo. Muchas veces lo mejor de la vida es algo simple, como un picnic en el parque, pescar en el río, montar a caballo, pasear en carruaje, etc.
Llévala a un lugar donde sepas con seguridad que ella estará cómoda.
Cuida su corazón. Las mujeres somos fuertes, pero también delicadas. No arruines eso. No seas la causa de que el corazón de una mujer se endurezca.
Conoce a su familia y amigos, a la vez permite que tu familia y amigos la conozcan.
Escúchala. Cada vez que compartas con ella, elige un lugar donde puedan hablar con tranquilidad. Pregúntale y comparte un poco de ti.
Siempre, siempre elige ser fiel; pero si decides que las cosas no están funcionando o conoces a alguien que te gustaría llegar a conocer mejor, se sincero. No des falsas esperanzas.
Disfruta de lo físico, ¡pero de manera correcta! Toma sus manos, coloca tu brazo alrededor de sus hombros y eventualmente en su cintura. Besa su cabeza, pon tu mano en su rodilla, consiéntela. Estos pequeños y dulces gestos hablan de un sentimiento especial y hará que ella se sienta querida.
Cuando llegue el momento dile que la amas, mucho. De hecho, dile todo tipo de cosas lindas. Todos merecemos recibir cumplidos.
Sírvele. Ten detalles de consideración y aprecio. Prepara su desayuno, su comida, ábrele la puerta cuando tenga que ingresar a un lugar , ofrécele tu capa si hace frío…tú sabes de lo que hablo.
Sorpréndela. De nuevo, lo sencillo puede ser mucho más especial que lo elaborado, así que quédate en lado de las sorpresas pequeñas. Llévale sus flores favoritas, sorpréndela en la cena o cómprale su postre favorito.
No subestimes el poder la palabra escrita. Por mucho que nos encante escuchar cosas buenas, es mejor cuando las leemos, porque podemos regresar a ellas cuando queramos. Así que escríbele.
Cuando sea el momento y hayas encontrado a esa mujer especial, arrodíllate y pídeselo. Pregúntale si quiere pasar el resto de sus días a tu lado.
Aplica esto pequeño mío y espero que en algo y en mi ausencia, mis palabras puedan guiarte en este mundo tan crudo y logres llevar junto a tu compañera la responsabilidad que implica dirigir el clan Ardley.
Te amo ahora, por siempre y para siempre.
Con cariño, Mamá
Mientras lágrimas se deslizaban por el rostro del rubio, en su interior se sentía aliviado. Extrañaba a su madre muchísimo, por lo que recuperar su tesoro que había dado por perdido, era como recuperar el amor de su madre de una manera más real.
Sólo un día faltaba para que la verdad saliese a luz. Pero ya no importaba, él había tomado una decisión. Su madre le había ayudado a recobrar fuerzas.
CONTINUARÁ.....
+.++.+.+.+.+.+.+.+.+.+.+.+.+.+.+.+ Hola a cada una de vosotras, un capítulo más de Amor Perdido ya está aquí. Espero hayan disfrutado de la lectura. Os dejo como regalito libre el gift animado de Albert en la parte superior. Hasta la próxima, hermosas. Arigato!
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