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La señora Leagan
Capítulo 3
Capítulo 3
El día temido en las profundidades del corazón de Sarah, en aquellos lugares donde no llega siquiera la luz, el desastre le es revelado: En la calma que supone vivir en una colonia vacacional como lo es Lakewood, Sarah ha olvidado la opresión con la que llegó hace apenas unos meses. Ha olvidado la tristeza de sentirse abandonada por su propio esposo. Ha dejado de lado la hipocresía en la que se había habituado residir, rodeada de la alta sociedad norteamericana y allí en la calma de la biblioteca de los Ardley, se da cuenta que ha olvidado todo el odio hacia Raymond. Ni siquiera le importa su día de regreso, la servidumbre con seguridad, tendrá todo preparado para su llegada.
Lejano parece el rencor hacia su padre muerto por haberse vuelto a casar, desterrándola a segundo plano. Incluso Elroy empieza a simpatizarle, luego de repetirle una y otra vez, que es parte importante de la familia. Un día, Sarah transmitirá esas palabras a sus hijos, haciéndolos sentir parte sustancial de los Ardley.
Pero había una cosa que Sarah no había olvidado: la emoción desbordante de ver cada vez al ser amado y hoy, esa emoción ha vuelto con fuerza. Para su lastimado corazón, ha resultado como un huracán. La sensación se aglomera en su garganta. Ansía con verdadero ímpetu, gritar su enamoramiento por el joven que le escucha con atención y respeto. Por ese oído que le escucha como si sus opiniones sobre novelas del realismo tuviesen valor de verdad.
La atracción inicial que era meramente física, se ha convertido en verdadero deseo. Un deseo ferviente por sentir las caricias seguramente igual de atentas que su trato diario. George, quien genuinamente se interesa en sus necesidades, ya fuese una taza de
té, o avivar el fuego de la chimenea, quien le escucha de verdad
El muchacho, que con pasión le explica la historia de trasfondo sobre las novelas que con afán leen, ¿Sentirá esa misma pasión por ella? ¿Sería tentado cada día con el mismo imperioso anhelo de besarse?
Aquel día, el fuego de la chimenea era intenso y hacía el ambiente inusualmente caluroso. Sarah no podía sacarse de la cabeza que George le mandaba un mensaje con esas novelas de mujeres infieles. Algunas amadas por sus amantes, otras, simplemente deseadas por ellos. Lo que fuese que George tratara al elegir esos títulos, debían significar algo. Ella eligió a Balzac por él e ignorando la temática; pero él, le recomendó a Flaubert y Tolstoi.
El que las protagonistas tuviesen un desenlace trágico, no resultaba muy estimulante, y el que George expresara abiertamente su admiración por Lyovin, el protagonista alterno de Ana Karenina, y dijera que el amor que este personaje profesara por Kitty y viceversa, era amor verdadero; a pesar de que ella lo rechaza en primera instancia por otro que ni siquiera la quería; ¡Kitty! Para ella, personaje más patético de la obra, superflua y vanidosa al principio, y con una religiosidad y bondad al final, que la hace cuidar de un enfermo a pesar del riesgo de contagio por el hecho de ser hermano de Lyovin, de quien se ha enamorado perdidamente. A pesar de que él renuncia a todos sus lujos y trabaja en el campo disfrutándolo, un hombre que asegura que su felicidad radica en la simplicidad de la existencia y es feliz siendo bondadoso con gente que ni siquiera pertenece a su nivel socioeconómico, junto a Kitty, quien rebaja su estatus viviendo en una granja con él. Sarah no lo entiende hasta que en un momento, se le ocurre compararse con Lyovin, después de todo, ella ahora vive en el campo.
En cambio, entiende perfecto a Ana, la mujer que abandona a su marido y sufre al ser rechazada de su ambiente social, pues sabe que la infidelidad no es problema, la mayoría de hombres y mujeres allí, lo son. Es una hipocresía el que la condenen por luchar en pos de ese amor que ha llegado tarde a su vida. George está de acuerdo, y además comprende al conde Vronsky, a pesar de tener el papel del amante, puesto que está enamorado en verdad de la protagonista. Aquello debe significar algo.
Sin embargo, cuando cuestiona a George respecto a la infidelidad, él declara:
-Los esposos no lo merecían. En todas las novelas eran hombres rectos.
-¡Pero las mujeres hubieran muerto de aburrición con ellos!
-Mejor de aburrimiento y no sucidándose y atormentadas por la culpa
-¡Ah! –gimió ella con estupor -¿Y la felicidad? El soltero que se convierte en amante está enamorado
-Ellas ya habían decidido casarse. Si hubiese amor verdadero por parte de ellos, debían dejarlas en paz. Conformarse con saber feliz a la mujer amada aún sin ser el elegido. Cada recuerdo de ella en su memoria, sería hermoso, puro y llenaría de dulzura cada evocación.
-Eso no contesta a mi pregunta…
-Quizá no sea necesario ser feliz. Pero cada recuerdo bastaría para serlo.
Sarah no terminaba de digerir lo que escuchaba. Se acercó a él con la convicción de saberse deseada por él. Quería oírlo decir algo al respecto.
-Es usted un caballero honorable, George. Me pregunto si alguna vez se ha sentido tentado
-No estoy casado, ni siquiera en una relación ¿Cómo podría ser infiel?- preguntó imperturbable
-No se haga el ingenuo conmigo, George. Me refiero a ser tentando por una mujer casada.
El joven Johnson, en un atisbo de debilidad, volteó hacia el piso. Observó las rosas bordadas en la alfombra bajo sus pies y con todo el temple que fue capaz, contestó
-No.
Pero Sarah percibió esa ligera duda e insistió
-¿Está seguro? ¿Ni siquiera un poco? Cualquiera pensaría que sí…
George no pudo evitar el sonrojo que acompañó a la perplejidad que expresó con los ojos muy abiertos
-¡He dado en el clavo! ¡A que sí!- exclamo Sarah, fascinada ante la transparencia en los sentimientos del muchacho ¡Él sentía lo mismo que ella!
-¡No diga eso, porfavor! –pidió con desesperación- Yo… Jamás podría interferir en un matrimonio
-Pero lo ha pensado. Quizá hasta lo ha soñado…
-Un sueño es una fantasía insulsa. Más le valdría quedarse como tal.
Sarah, con el corazón latiendo a mil por hora, intentó mantener la compostura, sin embargo, declaró al tiempo que salía de la habitación:
-Quizá tenga razón... A menos que nadie se entere.
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Última edición por Friditas el Sáb Abr 29, 2017 4:57 am, editado 7 veces