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"Céanna agus Difriúil"
By CherryCapítulo XIX
El joven se encuentra en el mini hangar intentando poner un poco de orden entre las cosas que había dejado desparramadas y las que habían salido volando por la explosión de la noche anterior; recuerda las palabras intercambiadas con la rubia, su forma de actuar, la forma en cómo se desenvuelve… en fin, todo. Y aunque le hayan dicho que a raíz de un accidente Candy había perdido la memoria, sentía que había perdido algo más y mucho desde que tuvo que separarse de Terry.
De presto… se escucha ruido entre unas hojalatas, asustado, se detiene en su labor para cerciorarse de si hay otra persona en ese lugar… observa, pero no hay nadie… el ruido se repite, reconoce su origen y se acerca. Empieza a mover las cosas y algo salió disparado de ahí, el chico pegó un grito y cayó de nalgas.
- Pero ¿Qué ha sido eso?
Tembloroso se agazapa en el suelo para pegar su rostro a ese nivel e intentar ver qué es… cuando se ajusta las gafas para ver mejor… dos iris fluorescentes pestañean… el chico se asusta y se hace hacia atrás… al mismo tiempo que lo hace la criatura… y suelta un maullido agudo medio débil
- Pero si… es un gatito… ¿Qué haces aquí? Sal… ven minino, minino, minino
Intenta atraer al animalito una vez que ha digerido el susto que le acaba de dar… aun siente la sensación extraña en sus manos y piernas debido a la adrenalina que corría por sus venas segundos antes. Como puede, intenta sacar al felino que se esconde debajo de una estantería; es un pequeño gatito de pelaje blanco, aunque está un poco sucio.
- De seguro tendrás hambre… vamos a la cocina, te daré leche… ¿Tú tomas leche verdad?
Miau
- ¿De dónde has salido pequeño?
Miau
- ¿En serio? Creo que, si Candy estuviese aquí se habría emocionado por haberte encontrado
Miau… pprrrr…
El animalillo ronronea al sentir la mano del castaño acariciándole el lomo, llegan a la cocina y en plato le deja leche, que la bola de pelos degusta con mucha ansia. Stear lo observa mientras recuerda a la rubia, de pequeña sonriente, vivaz… y ahora toda una dama, bella, fina, elegante, misteriosa. Tanto así que ha cautivado nuevamente el corazón de su hermano.
No puede obviar el estado actual de Archy, su apariencia es el reflejo del tormento que tiene con sus pensamientos, y aunque centra sus fuerzas en sus estudios y en acompañar a la tía abuela, la partida repentina de Candy lo tenía devastado. El felino se pasea derredor de Stear rozando su lomo contra él como señal de agradecimiento mientras que el castaño sigue reflexionando
- ¿Por qué Candy se marcharía? Pudiendo estar tranquilamente con nosotros ¿Tú que piensas Susto?
.
.
Una vez que se cerró la puerta el silencio se hizo en la habitación, parecía un momento esperado, pero a la vez con temor de no saber cómo proceder.
- Yo… yo quisiera agradecerte por… por todo lo que has hecho para cuidar de mí el tiempo que estuve inconsciente…
Comenta la rubia mientras gira sus dedos índices uno contra el otro
- … de verdad… gracias, gracias hermana
Al escuchar la última palabra, Rin siente que su corazón quiere salirse por la boca, tantas emociones pululando por todo su cuerpo… se sentía tan bien que ella le dijera “Hermana”. Candy al ver que sus ojos se estaban ensombreciendo por las lágrimas se acerca hasta la cama y la abraza.
- No tienes que agradecerme nada… con gusto habría cuidado de ti siempre… nunca hubiese permitido que nadie te hiciera daño, nunca
- Gracias… aunque no hayas podido estar, te lo agradezco, y estoy segura que me habrías cuidado más que bien. Pero no debes de atormentarte con eso, te aseguro que siempre estuve rodeada de buenas personas que me cuidaron y animaron cuando lo necesité: Stear, Archy, Anthony, Albert
- Lo sé, he tratado con ellos
Ambas sonríen, comprendiendo lo que dicen.
- Oye...
- Dime
- Podrías decirme ¿Por qué le dicen a Albert, señor Ardley? ¿Y cómo es eso que tú vivías con él en la mansión?
- Hehehe... pues... ¿Cómo te lo digo?
Candy la observa detenidamente y por un momento le da la sensación de que está viendo su reflejo en un espejo, solo que este “reflejo” lo puede tocar; es igual a ella, pero hay cosas que la hacen diferente.
- Resulta que el día que te encontré, el tío abuelo William hizo una aparición ante los medios públicos, como miembro de la familia esperaban que tú estuvieras presente, creo que era primordial para él que estuvieras… por esa razón se dieron cuenta de tu desaparición. Te estuvieron buscando por toda la ciudad y cuando lo hicieron en este hospital a la primera persona que vio fue a mí, dando por hecho que yo era Candy, la verdad que creo que nunca se cuestionó que hubiese otra igual… y bueno, luego me dio una explicación que para mí era algo tan absurdo, no terminaba de entender… y fue entonces que me dijo que se llama “William Albert Ardley”
- ¡¡Quée!! ¡¿Qué estás diciendo?!
Candy aparte de sorprenderse se altera, abre sus ojos en su totalidad incapaz de creer lo que ella le está diciendo, se levanta de la cama y se pone a caminar en círculos intentando comprender las palabras, mientras se repite una y otra vez “No puede ser ¡No puede ser!”.
Unos golpes en la puerta anuncian que alguien va a entrar… cuando el rostro de Albert se asoma, las dos mujeres los miran fijamente, cada una embargada con diferentes emociones.
- Tuuu…
- ¿Qué sucede Candy?
- ¿Cómo? ¿Cómo es posible que seas un Ardley?
Al escuchar esa pregunta el rubio no puede evitar sorprenderse. Con tanto ajetreo se había olvidado de esclarecerle ciertos datos. Ella se acerca y lo toma de las solapas de su americana mientras tira de este queriendo sacudirlo para que le dé una explicación.
- Candy, perdona que no te haya dicho nada… por favor toma asiento, me gustaría poder explicarte todo
Le pide el rubio mientras le señala la cama y se sienta a su lado para expresar todo. Erin los observa detenidamente, le parece presenciar algo paradójico: verse a ella misma, pero actuando de diferente manera. Igual pero diferente.
Albert empieza a explicarle cuál es su verdadero nombre, tras la muerte de sus padres se volvió la cabeza de la familia Ardley siendo tan joven. La tía abuela se hizo responsable de él y de su preparación hasta que tuviese la edad adecuada para asumir el mando. Por diferencias entre Elroy y él, y tras la muerte de su hermana, decidió alejarse, se auto impuso un exilio con la intención de sanar su alma.
Tiempo después fue que llegaron a la mansión de Lakewood los chicos junto con la tía abuela, se relacionaba con ellos, pero sin revelarles cuál era su verdadera identidad; Anthony, Stear y Archy le contaron que había conocido a un hermosa, alegre e intrépida niña en casa de los Legan, realmente los había impresionado desde un principio. Por eso no le fue difícil reconocerla el día que la rescato al pie de la cascada.
Desde entonces también empezó a permanecer cerca de ella y accedió a la petición de los chicos que le pedían que adoptara a Candy como miembro de la familia Ardley; aceptó porque su mirada, gentileza y dulzura le recordaban a su hermana, por eso siempre intentó cuidarla, ser su amigo, un apoyo y siempre procurarle lo mejor.
Se había marchado a África pensado que en el “Real Colegio San Pablo” estaría bien, pero al recibir un telegrama de George diciéndole que había abandonado Londres, decidió regresar a Chicago para saber cómo estaba ella y cómo podría ayudarle. Fue entonces que sufrió el accidente en el tren y perdió sus recuerdos. Después de todos los inconvenientes que pasaron porque ella se había empecinado en cuidarlo, hizo que cuando recuperó la memoria regresa con los Ardley porque ya no quería seguir escondiéndose
El día que hizo su presentación esperaba que ella estuviera para poder revelarse su verdadera identidad y fue cuando se enteraron que había desaparecido; se reprochaba con vehemencia su descuido al haberla dejado tan vulnerable ante cualquier patán que quisiera hacerle daño, como Neil u otra persona.
- En mi desesperación pensé que Erin eras tú, nunca me detuve a pensar que existiese la posibilidad que tuvieses una gemela; aunque desde un principio se comportó completamente diferente, fue muy fría
Ambos vuelven a ver a la rubia que está recostada en la otra cama escuchando el relato de Albert; ella simplemente alza los hombros como gesto que les dice “¿Qué quieres que te diga?”
- Incluso me pidió que no le dijera “Pequeña” ¿Te lo puedes creer?
- Es que no me gusta, ni siquiera cuando Anderson, Harris, Walker o Jackson me lo han dicho me ha gustado ¡Yo no soy una pequeña! Puedo cuidar de mi misma
Expuso ella haciendo un mohín y girando sus esmeraldas hasta casi ponerlas en blanco; al ver su reacción Candy sonríe y Albert la imita, luego le pregunta:
- Candy ¿Tú me dejarás que te diga “Pequeña”?
- Hehehe ¡Por supuesto Albert! Puedes decirme “pequeña”
Y con una amplia sonrisa lo abraza queriendo consolarlo, las veces que él le había llamado de esa manera había sido de la forma más tierna, sabía que lo hacía porque la quiere y mucho. Erin sonríe, no puede negar que ese hombre siempre se ha preocupado por su hermana. Luego aparece una enfermera trayendo consigo la bandeja con la cena para ellos.
Luego que terminan la cena en una amena conversación, regresa el doctor Jackson en compañía de Anderson con información; Erin reconoce esos semblantes por lo que les pregunta
- ¿Qué sucede? ¿Se sabe quién está detrás de todo esto?
- Rin, lo mejor será que descanses
- Alto ahí Anderson, alguien se ha atrevido en atacarme, y quiero saber ¿Quién y por qué?
Ellos se observan un par de segundos, saben que si Rin quiere saber algo no va a para y puede sacar a relucir la mejor parte de su mal genio; Candy estaba sorprendida por el aire de autoridad que ejercía sobre ellos
- Boss, uno de los miembros de “Five Points” se ha sublevado ante el mandato de Bill Big, también han atacado a tu daidí pero sus hombres los defendido y está a salvo… por lo visto querían eliminar la cabeza y mano derecha de la “White Hand” para que Paul Kelly vuelva a tener el control… alguien ha de haberle estado alimentado la fantasía… Harris sospecha de Torrio
Ante esa información, Erin no puede evitar tensarse; Candy se asusta tras escuchar de “ataques y eliminar”, comprende que por eso es que se acercaron de esa manera tan violenta a la hora de subir al carruaje
- Espera un momento… ¿No estarás pensando en tomar represalias? ¡Erin, no puedes meterte contra esos tipos!
- ¿Por qué no Candy? El hecho de que sea una mujer no quiere decir que no sepa lo que estoy haciendo
- Pero ¿Es que no recuerdas lo que han intentado hacer hoy? ¿Acaso no ves la escayola en tu brazo? ¡Esos hombres no se andan con juegos!
- Tranquila, no voy a ser yo quien se plante ante ellos y apriete el gatillo… no soy tonta
- ¿Y piensas mandar a otro para que lo haga en tu lugar? ¡Se trata de una vida! No puedes arrebatarla, así como si nada
- Candy, te sugeriría que no te metas en eso
- ¡Soy una enfermera! ¿Cómo quieres que no me meta cuando se trata de una vida o las que sean?
- Aggg ¡Para!
Espeta molesta y exasperada por la reacción de Candy, Jackson con intención de mediar le habla suavemente
- Me gustaría que, por esta vez le hicieras caso a tu deirfiúr, se preocupa por ti, además no estás en condiciones de moverte, no podremos estar tranquilos si te metes en esto… deja que nosotros nos encarguemos anión
- Doc, por favor no me pidas eso
Apunta muy molesta, no le gusta que nadie le haga daño a las personas que quiere y no es de quedarse de brazos cruzados
- Erin, quiero que entiendas que los tiempos que se avecinan no son para nada halagüeños, ¿Crees que alguno de nosotros quiere que te metas en eso? ¿Qué arriesgues tu vida? ¡Por favor Rin! Tu madre se sacrificó para que ustedes nunca tuvieran que meterse en eso… no permitas que su muerte haya sido en vano dejándote arrastrar por la rabia en una guerra de la cual no es necesario que participes
- Pero Doc, vosotros habéis enseñado a defenderme, pensar, hacer cosas ¿Cómo quieres que me quede fuera?
- El hecho que nos dedicáramos a enseñarte, te vistieras como chico y te instalaras en esta ciudad no era para que luego te encargaras de todo, sino… para encontrar a tu hermana y que llegado el momento, puedas cuidarte por ti misma, vivir una vida lejos de todo esto, tal y como lo deseó tanto tu madre
- Jack
Susurra, entiende lo que quiere decir, por algo su padre le permitió que se instalarán en Chicago, solo porque él era su consejero, su mano derecha
- ¿Me lo pides como comhairleoir?
- Te lo pido como tu amigo, el amigo de tu madre y como ese hombre que ha cuidado de ti como si fuese tu padre
- La amabas mucho ¿Verdad?
Al escuchar su declaración, Jackson se sorprendió en gran manera, no era algo que pensara escuchar nunca salir de sus labios
- Creo que sí… por eso te prestaste en ayudarla y nunca le dijiste nada a daidí… y lamentaste todo este tiempo su ausencia y cuidas de mí como tu mayor tesoro, como si fuera de tu sangre
- Sí… con un genuino amor y admiración, viéndola resplandecer como una flor con los rayos del sol. Por ese amor que le tenía y por el que siento por ti, sin importarme tu raza, tu sangre, no puedo permitirte te involucres en esto. Quiero que cual solsticio de tu vida, bañaba por la luna de una nueva primavera, vivas una vida lejos, muy lejos de tanta maldad
Conmovida por sus palabras, Erin asiente con su cabeza aceptando la petición de él, quien tanto la ha querido, cuidado y mimado; con quién la había acompañado para ver, completamente embelesada las noches de “Luna de Primavera” mientras le hablaba cómo era su madre y cuánto la amó.
que hermoso capítulo Cherry. 
mientras reflexiona sobre lo que le ha dicho Candy, él está preocupado pues se ha dado cuenta de que está muy cambiada, ahora es elegante, refinada, auto-suficiente y algo dura... También se ha dado cuenta de la actitud de Archie que se ha enamorado nuevamente de ella. 
que la quiere que fuera de esos mafiosos ahora que ha encontrado a su hermana. 
muy bellos FanArts.
